XXVI

1K 69 3
                                    

Verónica Spencer

-Esta es la última casa y como ven apenas está en construcción- entramos a la fachada de la casa

-Sera de tres niveles- saco unos planos la chica que nos estaba dando todo el tour

-Esta casa tendrá la cocina como la dama está pidiendo- me miro con una sonrisa

-Tendrá una isla en el medio en donde facilita que cocinen, en el primer nivel tienen la cocina, el comer y la sala de estar junto a un baño para invitados. En el segundo nivel son las habitaciones junto a la lavandería y el tercer nivel pueden tomarlo como una sala familiar u oficina- sentí como Marcus me tomo de mi cintura

-¿Qué piensas?- lo mire

-Me gusta- sonreí

-¿De cuánto estaríamos hablando?- la chica comenzó a hacer cálculos y nos mostró el pago mensual.

-Me parece perfecto-

-Entonces esta será su casa- sonreímos juntos

Ahora iríamos a la parte de poner nuestra oferta y ver que el banco la acepte.

La chica nos dejó solos afuera de la casa que solo tenía su esqueleto por así decirlo

-¿Te gusta?- asentí mirando todo

-¿Estas segura que este es el hogar en donde quieres vivir?- volví a asentir para abrazarlo

-Quiero que sea nuestro hogar-

-Sera nuestro lugar seguro- él me beso mis labios

-¿Desde cuándo te guste?- quería sacarle información

Él miro al techo negando.

-Te lo diré cuando tenga valentía- me sonrió

-Vale-

Desde que me había dicho esas palabras de que me quería lo fue todo para mí.

Quería decirle mis sentimientos también, pero él no me dejo.

-Vamos a una cita- tomo mi mano entrelazándola

-¿Una cita?-

-Si, te dije que te quería conquistar- beso mi frente

-No te costara tanto- susurré, pero al parecer no me escucho

-Adelante mi princesa- abrió la puerta de su auto para que subiera al pasajero

-Gracias- sonreí para recibir un beso de su parte antes de cerrar la puerta

Me gustaba que fuera así conmigo.

Esta faceta la había soñado, pero nada se iguala con la realidad.

Él se subió al auto y lo encendió.

Con su mano disponible él la coloco en mi muslo interno dejando pequeñas caricias.

Tome algunas fotos para los recuerdos.

-Dame tu mano que la extraño- sonreí para entrelazar nuestras manos

-Jamás pensé tenerte así- lo miré

-¿Por qué?-

-Porque intente que no pasara a toda costa, pero eres como un mariposa que cada vez que te veo estas más hermosa- sentí mis mejillas arder

-Pensé que no era de tu gusto- él se rio mientras llevaba mi mano a sus labios

-Si estuvieras en mi mente créeme que no pensaría eso-

Relación "Arreglada"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora