XLV

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Marcus Walker

El regreso de nuestra luna de miel fue tranquilo.

Ya la barriga de mi esposa se notaba más y no era para menos tenía dos pequeños creciendo en su interior.

-¿Qué tal te sientes?- la pegue a mi cuerpo

Ella se acomodó hacía mi mientras colocaba mi mano sobre su barriga

-Bien, pero siento que están creciendo muy rápido- bese su cabello mientras podía ver como continuaba con sus ojos cerrados

-¿Quieres desayunar?- ella asintió

-¿Algún deseo mi lady?- vi como sonrió

-Solo quiero nueces y guineo- asentí para dejar un beso en su cabello

Primero debía lavarme la boca y la cara.

Hoy teníamos nuestro seguimiento con la ginecóloga y podríamos ver a los bebes de nuevo.

Baje a la cocina para preparar nuestros desayunos.

Yo intentaba que fuera lo más balanceado posible para ella.

-Huele de maravilla- la vi llevar hacia mi arreglada

-¿En qué momento?- la señale y ella solo levanto sus hombros

-Yo termino, ve a cambiarte- asentí para besar sus labios y seguir a nuestra habitación

Una vez en el baño me di una ducha corta para luego vestirme y poder ir con mi esposa.

Ella me esperaba sentada en la mesa con nuestro desayuno.

-¿Qué tal te sientes hoy?-

-Bien, un poco ansiosa de ver los bebes y saber que todo está bien- sonreí para besarla

Así eran nuestros días, semanas y meses.

El ver a los bebe era lo que nos hacía caer en cuenta de que todo era real.

-Ya tenemos que anunciarlo- asentí mientras miraba su abdomen abultado

-Ya no lo podemos ocultar más- sonreí mientras ella negaba

-¿Quieres que le avise a nuestro padres para que vengan a cenar?- lo pensé un poco para asentir

-Deberíamos, desde que llegamos los estamos de cierta forma ignorando- ella asintió riendo

-Es que no pueden verme así de golpe-

-Lo se mi reina- pause -Tú tranquila yo me encargo de preparar todo para el momento en que ellos vengan-

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.

.

Nuestra cita con el doctor nos fue relativamente bien.

Aun seguimos con que no puedo penetrarla al momento de hacer el amor.

-¿Qué compraremos para la cena?- nos encontrábamos en el supermercado mientras ella no dejaba de mirar las fotos de los bebes

-Amor- la tome de sus mejillas para que me mirara

-¿Se parecen más a ti?- me reí

-Mi reina es muy temprano para saber- bese sus labios

-¿Quieres pechugas rellenas de pesto con mozzarella?- ella se me quedo mirando

-Si- sonreí al saber que al menos algo le interesó

Fuimos a buscar los ingredientes ya que teníamos que hacer varios para nuestros padres.

-¿Estas nerviosa?- asintió sin decir nada

Relación "Arreglada"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora