Cap6. También en esta vida

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Fue un accidente, poco después de nacer.

Ninguno de los sanadores lo noto, hasta que fue muy tarde.

Hasgard, el primero en nacer, recibió una herramienta mágica para niños poco después de medir su maná. Maná mednoble.

"¡No tiene sentido!", exclamó la joven mujer sosteniendo a su primer hijo en brazos.

Partita, la hija más joven de Rihyarda, había nacido como una candidata a archiduquesa, sin embargo, como sus hermanos, no deseaba ese título ni esa responsabilidad, por lo cual, había pedido su degradación.

Algo debía estar mal con ella si su hijo había nacido con un maná tan bajo para su rango, oh eso pensó hasta que una nueva contracción la hizo gemir, la matrona confirmo entonces que eran mellizos, su segundo hijo estaba por nacer.

Fue una campanada muy larga, pero finalmente, Aldebarán nació.

Ojalá lo hubiera sabido antes. No tenían herramientas para su segundo hijo y tan tarde en el otoño, los eruditos encargados de crear las herramientas mágicas para niños se encontraban dispersos por el ducado, en el festival de la cosecha.

Regulus junto todas las feystone basura que pudo en el tiempo de una campanada, no podía dejar a su esposa e hijos solos por mucho tiempo. Sin embargo, cuando volvió, Aldebarán estaba sufriendo una fuga de maná.

El llanto de su segundo hijo se elevó por toda la casa, pequeñas burbujas comenzaron a formarse en el rostro del niño. Las piedras no habían sido suficientes. Entonces Aldebarán dejo de llorar, mirando de un lado a otro, antes de comenzar a reír, una risa pequeña e infantil, cargada de alegría.

Por un tiempo, usaron el maná de su segundo hijo en las herramientas mágicas de la casa, hasta que los sacerdotes volvieron y pudieron solicitar una nueva herramienta para niños.

Mientras crecían, se dieron cuenta de lo diferentes que eran sus hijos, Hasgard era un niño tranquilo, como su madre y estudioso, como su padre, Aldebarán por su parte, era un niño sumamente energético y curioso que necesitaba atención especial, al grado de que su niñero fue cambiado por un caballero-asistente después de que en más de una ocasión el niño se escapara del jardín y se perdiera en el bosque noble.

Durante el verano antes de su quinto cumpleaños, Aldebarán conoció a Myne y Ferd, ambos realmente interesantes, tenían su edad, pero eran tan pequeños como niños de tres años, seguro que eran devoradores. La idea de que fueran como él, niños con recuerdos de su vida pasada, lo lleno de emoción y anticipación.

Mientras pensaba en una forma de convencer a sus padres de bautizarlos, decidió observarlos, solo por curiosidad.

Los niños estaban muy unidos, incluso afirmaban que se casarían al llegar a la edad adulta, cuando el pensamiento de que ellos se habían casado en su vida pasada y se habían reencontrado en esta cruzo su mente, el recuerdo de la esposa que tuvo en su vida anterior le llegó.

'Dioses, si Akane esta en este mundo, permítanme encontrarla una vez más', fue la sincera oración que elevaría los próximos cinco años cada día al despertar y antes de dormir.

En algún momento los niños conocieron a la familia archiducal y Aldebarán no podía esperar hasta su bautizo, ¿cuál era la mejor manera de presentarse? Se pregunto mientras los días pasaban y sus cumpleaños número siete se acercaban

El otoño dio paso al invierno y fue momento de que tuviera su debut. En ese momento descubrió que todos sus planes se habían ido al caño, Myne y Ferd, ahora Rozemyne y Ferdinand, habían sido bautizados como candidatos, el estatus le impediría ser su amigo.

La Revelación de VentuchteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora