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Se sintió raro dormir sin Pedro en la noche, estaba tan mal acostumbradana dormir entre sus brazos y sentirme segura.

No se si voy a soportar mucho más tiempo.

Cuando me levante, fue con la alarma que suelo usar para prepararle el desayuno a mi novio, pero ahora no estaba.

La apague y me debati si levantarme o no, mi alarma sonaría en hora y media todavía.

Pero con toda la flojera del mundo, me levante igual, me di el lujo de darme un baño con burbujas, algo que siempre había querido, se sentía diferente.

Hasta que el agua se enfrió y me cargue de frío, tuve que salir.

-Esta parte no te la muestran en las películas- renegue y camine envuelta en la toalla hacia el armario.

Busque mi ropa para el trabajo, me peine, seque pelo, me cambie y me maquille.

Camine a la cocina, sola.

Hace meses que Fer no vive con nosotros.

No es que haya pasado algo, pero el decidió darnos nuestro espacio como pareja, lo cual está bien, pero a veces lo extraño tanto.

Más ahora que si que estoy sola, sola.

Cuando termine de desayunar mi café y unas tostadas, agarre mi bolso y salí del edificio.

Subí a mi auto y maneje hasta parar en un semáforo rojo, tome mi celular y vi que tenia un mensaje.

Pepii♡

Buenos días cariño.

Seguramente leerás este mensaje cuando estés en el auto y de camino a tu trabajo, ya que nunca tomas el celular mientras desayunas ni nada.

Hoy tampoco llegare a casa, lo lamento pero estoy ocupado en otras cosas.

Te amo y ya espero verte.

Sonreí al leer su último mensaje.

Le respondi que no había problema y que también ansiaba verlo.

Llegue al trabajo y me fui a mi oficina.

Este lugar era cansador, pero bueno, me daba buenos ingresos y así ayudaba a Pedro a mantener el depto y los impuestos.

Estar todo el día metida en esta computadora ya me hartaba, pero como dije, es mi única opción.

Cuando fue hora del descanso, me pare de la silla, me estire un poco y camine hacia la máquina de café, necesitaba uno.

-Hola Linda, como estas?

Me di vuelta y rode los ojos al verlo.

-Hola, Thomas- dije seca.

-Siempre tan distante conmigo, no te entiendo.

-No tengo tiempo para escucharte, te dije que solo somos compañeros de trabajo.

-Bua, nisiquiera amigos?- negué con la cabeza.

No es que me caiga mal el chico, pero Thomas es mi compañero de trabajo, somos de la misma edad, pasamos todos los días juntos y es un buen pibe, en verdad podríamos ser amigos tranquilamente.

Pero el quiere salir conmigo.

Ya desde el primer día lo note, y le deje en claro que tengo novio y no pienso estar con el ni con nadie, pero es muy insistente.

Así que decidí alejarme de él y mantener una relación solo profesional, a diferencia de mis otros compañeros que ya los considero amigos o algo cercano a eso.

Argentina | Pedri González |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora