Capítulo 22

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ISABEL


Hablar con el periodista hace que mi energía se agote y aparte de eso, la mayoría de preguntas que me hace no las puedo contestar porque son confidenciales y lo peor de todo es que no veo a nadie alrededor que me pueda sacar de aquí. Ahora entiendo porque Matthew se ha escaqueado de él. El hombre sigue hablando sin cansarse hasta que veo a Benjamín acercarse hacía mi, es mi salvación.

—Lucas ¿has terminado ya?—pregunta guardando unos papeles en su carpeta—. Ya tenemos que irnos.

Antes de que su compañero pudiera contestarle, vi que Benjamín me da una sonrisa cómplice así que entiendo que ha querido sacarme del apuro, eso hizo que soltara un suspiro y creo que el muchacho me miró mal pero tampoco es que me afecte, lo importante es que me he deshecho de él.

—Lucas ¿verdad?—le quiero dejar en claro un par de cosas—. Entiendo que este sea tu trabajo pero tu también deberías de entender mi trabajo, no estás entrevistando a una celebridad, lo que pasa en nuestro país por culpa de esta organización es algo serio así que por favor no vaya por ahí molestando a los agentes con sus preguntas sin sentido. Nadie le va a dar la información que necesita, al menos no por ahora.

—¿Me estás diciendo cómo hacer mi trabajo?—no parece muy contento con lo que acabo de decirle.

—Por supuesto que no, pero le prometo que cuando haya algo que contar tú serás el primero—digo sarcástica .

Ahora que han podido minimizar los daños tecnológicos es más sencillo que podamos planear algo aún que este golpe está siendo muy duro, Matthew se hizo cargo de esta misión pese a que ningún otro agente quiso trabajar en ello, él sabía que iba a ser complicado pero no creo que se imaginara que llegaría hasta este punto. Formó un equipo con nosotros tres y pese a que no nos conocíamos mucho de antes, ninguno había tenido la oportunidad de trabajar con Matthew así que aceptamos también y por supuesto éramos conscientes del riesgo que llevaría.

Por ahora el jefe está hablando con el director y no me quiero ni imaginar esa conversación. No he tenido mucho trato con él pero no es un hombre muy fácil de tratar y mucho menos cuando las cosas no están yendo como quiere.

Benjamin trata de llevarse a su compañero pero él sigue reprochado lo más que me he comportado y lo primero que debe de saber es que no tiene ningún derecho a estar aquí en este momento, lo segundo es que no es un sitio al que vencer a ha entrevistar a los agentes sabiendo la situación actual y lo tercero y último podría arrestarlo por el simple hecho de crear un alboroto, pero antes de decirle cualquier otra cosa veo a Iván entrando con prisa junto con Olimpia, sus caras no lucían muy bien y eso hace que me preocupe.

—¡Iván!—le llamo la atención mientras voy a donde está, pero antes de darme cuenta veo que la entrada justo detrás de las puertas principales hay un montón de periodistas ¿qué ha pasado? ¿de dónde ha salido tanta gente de repente?— ¿Qué está...?

No me da tiempo a terminar mi pregunta cuando él me agarra del brazo y me lleva con él, llegamos los tres a una habitación vacía y cierra la puerta detrás de mí. Olimpia está en silencio y su cara no se puede descifrar, está pálida y desde el día en que la conocí nunca había mostrado una expresión tan fría.

—¿Qué leches ha pasado?—pregunto ansiosa.

—No sé como, pero han escuchado de que una hacker la cual ha cometido varios ciberdelitos está trabajando aquí, eso a la gente importante no les está gustando nada evidentemente—me explica y yo sigo sin comprender cómo es que algo así se ha filtrado, hemos sido muy cuidadosos, tanto que los único que sabemos sobre esto como Cris, Matthew, Iván y el director.

Entre la rebeildía y la libertad (Primera Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora