Harry Styles
Casi dos semanas habían pasado desde la última vez que vi a Amara Willson. Sólo eso, un par de días.
Y ya sentía que la extrañaba.
Todo por alguna razón que ni siquiera yo sabía. De la noche a la mañana Amara se instaló en algún lugar dentro de mis pensamientos, me hacía cuestionar sobre su estado, sobre que estaría haciendo o si estaba viendo alguna serie en particular.
No iba a mentir: me asustaba hasta la mierda. Porque hace un par de meses Amara no era nadie en mi vida, era sólo la molesta amiga de Mitch y la chica a la que yo le había roto su cámara.
Era una chica molesta, torpe y testaruda. Alguien a quién no hubiese elegido tener en mi círculo de amigos.
Pero ahora estaba en mi vida. Y no la podía sacar de mi mente.
Sacudo mi cabeza e intento eliminar todo sentimientos confuso dentro de mi para luego soltar un leve suspiro, es entonces que la veo caminar en mi dirección.
Era día domingo, tenía libre y un poco de tiempo extra. Así que me contacté con ella y me ofrecí a llevarla a un lugar específico de la ciudad, si bien es cierto que la idea no era asistir dónde había mucha multitud, si podía hacer uso de mis contactos.
—Hola Harry— ella saluda cuando ingresa al vehículo. Un olor a vainilla inundó mis fosas nasales e inmediatamente supe que se trataba de su perfume.
Amara vestía unos bonitos jeans y una holgada blusa negra a juego. Su cabello iba suelto, casi liso, y de sus orejas colgaban unos bonitos aros de plata que hacían resaltar su particular brillo.
—¿Cómo has estado?— quiero saber y ella me responde de forma positiva.
Pongo el auto en marcha y nos envolvemos en una conversación sobre fotografías, sobre la temática del nuevo álbum y sobre el bebé de Mitch y Sarah que estaba ya por nacer.
Quiero estar presente al cien por ciento, pero mi mente me jugaba una mala pasada al recordar los sucesos de la noche pasada.
De nuestra conversación hasta altas horas de la noche, de nuestra repentina cercanía, de las ganas que tuve en ese momento de romper todo código de ética con Mitch Rowland, la forma en que mis dedos tocaron su suave piel y las repentinas ganas de tenerla más cerca de mi.
—¿Dónde iremos?— ella pregunta con entusiasmo mientras ve por la ventana polarizada del auto.
—Ya lo verás— es todo lo que le contesto.
Minutos más tardes, estoy estacionando a las afueras del "22 Bishopsgate", el segundo edificio más alto de todo el Reino Unido, destinado al uso de oficinas y con una arquitectura bastante posmoderna.
—No lo creo— escucho balbucear a Amara a mi lado, viendo maravillada el gran edificio que se plantaba delante de nosotros.
—Te dije que se necesita de buenos contactos para ingresar aquí— le digo y ella suelta una pequeña risa— Y yo soy el mejor contacto que podrías tener.
ESTÁS LEYENDO
Ambivalencia |H.S|
FanficLa enemistad entre Harry y Amara no era fácil, no cuando todo había comenzado por un pequeño mal entendido y menos cuando el mejor amigo de ambos era Mitch Rowland. Y si a Harry no le agradaba mucho Amara, ¿Entonces por qué escribió tantas cancione...