electric love 𖦹 neteyam sully ✓

thirteen. ❛ friends? ❜

𝖙𝖍𝖎𝖗𝖙𝖊𝖊𝖓 | ❛ 𝖋𝖗𝖎𝖊𝖓𝖉𝖘? ❜
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✶ ׅ ࣪ ᧔♡᧓

Sylvie'lang no sabía que responder, puesto que ella tampoco sabía lo que eran.

Solo sabía que estaba enamorada de Neteyam como nunca. Y esperaba con ansias que él sintiera lo mismo. Él sentía lo mismo, ¿verdad?, se preguntó a sí misma.

Según ella, él le daba indicios. Siempre le sonreía, le respondía con mucha amabilidad, la trataba con caballerosidad, la miraba con mucho... ¿amor? Bueno, había un leve brillo cada vez que se volteaba a mirarla. Eso era algo.

La nocterqial le pidió ayuda al omaticaya con la mirada. Neteyam casi se atraganta con la comida al volver al mundo real en cuanto sintió la mirada de Sylvie'lang sobre él.

No podía dejar de mirar a Tatyanne, pensaba en lo hermosa que era y que se veía esa noche. Su cabello estaba amarrado de una parte y lo demás estaba suelto, el mechón blanco vagaba por su rostro.

Ella no se dio cuenta de su mirada. Él se sintió apenado. —Eh, amigos. Somos muy buenos amigos, ¿cierto? —sus labios formaron una nerviosa sonrisa mientras miraba a Sylvie'lang para una confirmación.

¿Amigos?, se preguntó Sylvie'lang. Volteo a ver a Neteyam con el ceño fruncido. Trato de convencerse de que él había usado esa excusa para su familia dejara de preguntar. Pero, de seguro, preguntarían más.

La familia frunció el ceño también, menos Aaliyah. Creyeron que al menos eran más que amigos, Sylvie'lang no paraba de hablar de Neteyam. Les pareció extraño que solo fueran amigos.

—¿Amigos? —Amila rompió el silencio incómodo que se formó en la choza—. ¿Solo eso?

Neteyam iba a responder algo más, pero Sylvie'lang se adelantó. —Sí mamá. Solo somos... amigos. —murmuró lo último lo dijo con desgano, se notó en su tono de voz.

Ella quería auto-convencerse con que solo lo había dicho para dejar el tema hasta. Añoraba con que en realidad fuera así. Tal vez era tímido, tal vez no se sentía listo.

Tatyanne se removió incómoda en su asiento. Ella sintió un extraño alivio de escuchar 'amigos' saliendo de la boca de Neteyam. ¿Por que sentía alivio?

La misma carraspeo levantándose de su lugar. —Bueno, yo, eh... debo irme. —avisó y todos la miraron—. Papá debe estar buscándome. —se excusó caminando a la salida.

—Yo también debería irme. —ahora la atención estaba sobre Neteyam—. Estuvo muy deliciosa la comida Señora Amila, fue un gusto conocerlos, gracias por invitarme, te veo mañana, Sylvie. —se acercó a ella dejando un beso rápido en su mejilla. Las mejillas de la misma se calentaron y se pintaron en un rojo carmesí.

Le sonrió a Neteyam y dejó que se fuera.

Tatyanne al ver eso, y escuchar como la había llamado, de forma tan confianzuda y cariñosa, sintió su estómago dar una vuelta que le provocó un nudo en este mismo. Mordió sus labios con fuerza, se preocupó de no haber sangrando después de morderlos con tanta fuerza.

No entendía que le pasaba, era un sentimiento que jamás había sentido y experimentarlo por primera vez no ayudaba en nada. Se sentía extraña. No le gustaba sentirse así. Solo sabía que no quería que Neteyam hiciera eso con otra persona.

Se preguntó cómo sería volver a sentir sus labios de nuevo en su mejilla, o en otro lugar de su cara. Quería que lo hiciera otra vez. Sus labios contra su mejilla, oh Eywa... Quería tener un apodo para que él y solo él la llamara así.

Caminaron juntos hacia sus hogares, en un incómodo silencio. Neteyam no sabía que decir y Tatyanne estaba muy concentrada en sus pensamientos.

Se olvidó por completo lo que estaba haciendo mucho antes de entrar y cenar con la familia de Sylvie'lang.

—¿Te comió la lengua el gato? —bromeó interrumpiendo sus pensamientos.

Tatyanne al escuchar eso, soltó una carcajada. Aunque no entendió muy bien a lo que se refería, sino muy gracioso.

—¿Qué?

—Es un decir. —aclaró en cuanto ella dejó de reír—. Papá me lo enseño. —se encogió de hombros—. Ni siquiera se que es un gato. —Tatyanne soltó otra risa y negó levemente.

—Ahora siento curiosidad en saber que es un... ¿cato? —alzo una ceja no muy segura.

—Gato. —corrigió y ella asintió—. Le preguntaré a papá, de seguro tendrá una foto o algo.

—¿Foto? —frunció el ceño sin entender que era.

Neteyam suspiró y rio. —Una foto es una imagen, que se toma con una pequeña caja, papá lo llama cámara. Con esa cámara se puede capturar una imagen de... lo que sea.

—¿Como funciona?

—Son como nuestros ojos; se encarga de recibir los rayos de luz del exterior y los transforma en una imagen. —explicó breve—. Déjame te muestro, espérame aquí. —Tatyanne asintió y espero que Neteyam fuera a su choza a buscar seguramente la cámara y cuando volvió tenía esta en mano con un extraño cuadro diminuto.

Neteyam le extendió la foto a la morada y está la analizó. —Así es como funciona. —el azulado le hizo una seña a la chica para que se acercara y así lo hizo. Sus cuerpos estaban a centímetros—. Solo es apuntar a un lugar y presionar en este botón y la foto saldrá. —Neteyam hizo lo que dijo y la foto salió en cuestión de segundos.

Tatyanne abrió la boca en forma de 'o' con sorpresa. Jamás había visto algo así.

—Que increíble. —soltó asombrada. Neteyam asintió.

—Sí.

Tatyanne volteo a ver la foto que Neteyam le había dado. Era una foto familiar. Ahí estaba él, junto a Lo'ak. Neytiri y Kiri estaban del otro lado. Y Jake y Tuk estaba en el cetro. Todos sonriendo a menos Kiri, lo que le pareció gracioso su expresión.

—Eso fue hace un año. —reveló acercándose a ella para ver la foto.

—Seguías siendo alto. —notó y sonrió.

—Y guapo. —bromeó y ambos rieron.

Se voltearon a ver y sin dejar de sonreír, sintieron un revoloteo en sus estómagos. Las piernas de Tatyanne temblaron al recibir esa mirada intensa pero divina de Neteyam. Por parte de él, su corazón se agitó al ver el brillo que salía de los ojitos amarillos de la chica.

No se dieron cuenta de que ambos, inconscientemente se acercaban cada vez más. Al punto en sus respiraciones se mezclaron. No dejaban de mirarse a los ojos.

Neteyam bajo la mirada a sus labios y relamió los suyos. Tatyanne copió su acción. Y cuando creyeron que iban a besarse, un grito hizo que se alejaran.

—¡Tatyanne! —la nombrada volteo a ver a su padre.

—Debo irme. Te veo mañana. —le sonrió y salió corriendo al encuentro de su padre. Pero se devolvió y dejó un beso en la mejilla de Neteyam—. Adiós. —con eso, se fue de nuevo con una sonrisa plasmada en su rostro.

Neteyam tocó la parte donde había sido besando. Y sonrió también, feliz.

Entró a su choza y se acosto en su cama sin dejar de sonreír y sin dejar de pensar en que me casi se besan. ¡Se iban a besar!