Por fin se a ido. El me hace daño. Me duele mucho la barriga. Me duele cuando me pega. Cada vez tengo más miedo.[Iru tiene que ser fuerte. Iru nunca tiene que llorar y quejarse. Iru es un buen niño] Mamá, ¿iru lo está haciendo bien?...
Tengo hambre. Hice un amigo. Es un poco extraño. Tenía dos cuernos, pero el hombre malo le ha quitado uno. Iru no se siente solo ahora. El me dice que tengo lindo aroma. Nos cuidamos juntos. Su habitación está junto a la mía. Hablamos a través de un hueco de la pared. Es lindo.
Tengo un secreto. Cuando tengo hambre, dentro de mi armario tengo escondidas algunas galletas. Iru tiene hambre ahora. Me quedan dos galletas. Me las como. Están buenas.
Escucho pasos. Está subiendo. Ha regresado. Corro y me meto en la cama. Me hago el dormido. El hombre me pica con su dedo la espalda. Duele.
- Se que no estas dormido pequeño monstruo. Solo procura escuchar lo que te dire. Se que se tienes un amiguito, el raro del cuerno que esta alado. Por tu bien y el de tu amigo, espero que empieces a colaborar y dejes de ser una molestia. ¿Lo entiendes?.
No hago ruido. No respondo. Me da una cachetada.
- Prepárate, mañana empezaremos con algo nuevo. Me encantara ver como reacciona el fuego en contacto con tu piel. Espero tu cooperación ¿Entiendes? ¿Lo entiendes, bestia?.
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Despierto agitado, jadeando buscando aire y mirando a mi alrededor. Me reviso las manos y el pecho comprobando que no tenga ninguna quemadura. Estoy bien... me encuentro bien... Estoy en casa, en mi cama, el abuelo ya me saco de ese horrible lugar.
Me encuentro acostado de espalda en la cama mirando el techo. Me llevo la mano al pecho. Te necesito. Cuando lo tenia a mi lado, no importaba si solo era cuando compartimos oficina o si eras solo mi escolta o cuando se quedaba dormido. Me sentía tranquilo con solo su presencia. En un instante se había convertido en el día de mi noche.
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A sido una mañana de feroces reuniones y mis pilares me han estado observando, nerviosos y a la espera de que estallara a la mas minima provocacion. Tengo que aceptarlo, me he estado comportando de la manera menos cuerda por decirlo de ese modo en estos días. Pero a pesar de haber tenido una mañana de mierda, me siento mucho mas tranquilo y despejado, se podría decir que es casi la misma sensación de cuando alice se encontraba alrededor.
La sesión de entrenamiento con Amelie ha sigo tan dura como siempre, no deja pasar ninguna. Aun me duele algunas partes del cuerpo. Lo único es que me mantiene preocupado es que todavía no ha habido noticias de Alice. Lo ultimo que sabemos es que tenia 34 semanas de gestación, confío en las habilidades de mis pilares y desde un principio sabíamos que este tipo de cosas podrían pasar, pero ahora se han cumplido las 40 semanas según el doctor Alice ya estaría entrando en la etapa en donde puede dar a luz en cualquier momento, solo espero que purson y los demás puedan encontrarlo para entonces.
Estoy hambriento. Chima a dejado un plato sobre mi escritorio.
- Opera me a dejado su almuerzo del día iruma-sama. Son sandwiches para hoy.
- ¿Pescado y mayonesa?
- Emm... - Chima entra en pánico y empieza a disculparse con torpeza.
- Solo bromeo Chima, puedes retirarte.
- Si, lo siento. - Parece mas aliviada, pero termina saliendo a toda prisa Chima.
Comienzo a disfrutar de de mi comida cuando escucho viniendo la puerta, esta se abre y por ella pasan Elizabetta, kamui y lied. Los tres se encuentran exaltados y agitados como si huran corrido una maratón.
- Purson se acaba de comunicar con nosotros. - Suelta Lied todo agitado.
- Encontraron a Alice y no solo eso.- agrega Elizabetta recuperando el aliento.
- ¿Qué sucede? ¿Le paso algo a Alice? habla elizabetta.
- Alice acaba de entrar en parto. - suelta Lied.
Escupo la comida de la boca. Por la madre del diablo. Recibo unos golpecitos suaves en la espalda por parte de Kamui. Elizabetta me acerca un de vaso agua.
-Iruma-sama, trate de respirar - dice Elizabetta.
Palidezco. Siento como el sudor de mi frente aumenta. Me encuentro asustado. Nose como reaccionar. Veo como todos los presente festejan, pero yo sigo estático.
- ¿S-soy papá? - murmuro.
- Señor iruma.
- Soy papá. - le doy un beso en la cabeza a Kamui. - ¡Soy papá!
Unos segundos después gritos se escuchan venir desde el pasillo. Jazz cruza la puerta terminando de abrirla de par en par.
- Es un diablillo. ¡Un diablillo!
- ¿Tengo un diablillo?¿Un niño?
- Si, señor. Nos acaban de decir que es un diablillo.
- Tendre un nuevo compañero de juegos - dice lied.
- Kamui, ¡soy padre de un diablo! - Lanzo a kamui por los aires y lo vuelvo a agarra con las manos. - Soy papá.
- Felicitaciones Iruma-sama. - dice Elizabetta.
- En hora buena Iruma-sama - Dice Jazz.
- Felicidades iruma - dice opera apareciendo de la nada y agitando su cola de lado a lado. - Esto debo de informar a lord sullivan también.
- Opera, espera. - Lo detengo - se lo diré yo mismo luego, por el momento no hables.
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Buenas noches mis diablillas,
espero que se encuentren maleficamente bien.
Lamento los meses de inactividad, sucedieron
varias cosas, pero en fina ya estamos de vuelta.
atte. L.S
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