Capítulo 20

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"[...]
Ícaro, tú, el primero y el postrero explorador
Del día con lámpara de cera de aviador,
Escucha:
Podrá trizar tu ala el fuego impetuoso,
Lo oscuro, lo deforme, lo infame, lo horroroso,
El mal y la tristeza, el misterio y la locura,
La envidia de los dioses, la humana baba impura,
Pero tú, aunque caído, alto, más alto todavía
Yo sé que te levantarás sobre la frente mía,
Eh, Ícaro, tú, el primero y el postrero explorador
Del día con lámpara de cera de aviador."

Humberto Peduzzi Escuder  

Quizás fuese por la luz dorada del atardecer que entraba por las ventanas, o porque era la primera vez que Jane pisaba la academia como ella misma, pero en ese momento, el ambiente era diferente, como en un cuento de hadas.
Jane recorrió las diferentes aulas como si nunca antes lo hubiese hecho, fijándose en detalles que antes no había advertido. Pensando que en escasos meses volvería allí a estudiar como Jane Wood.
Su obra estaba expuesta en Somerset House, junto a muchas otras que llegaron antes de que ella e hicieron historia. Y ahora ella formaba parte de esa historia y abriría el camino para que muchas otras pudiesen seguir sus mismos sueños.
Sonrió y se pellizcó el brazo para asegurarse de que no estaba soñando.
-Tenía miedo de no volver a verte.
La voz de Benedict llamó su atención y observó al joven que la miraba con cariño desde la puerta.
Desde luego esa luz de media tarde era mágica, es cierto que siempre había visto a Benedict atractivo, pero en ese momento, con esa luz, que hacía brillar sus ojos azules e iluminaba su sonrisa, que Jane pensó que no volvería a disfrutar, estaba más atractivo que nunca.
-Solo he venido a dar una vuelta.
-Pues si necesitas un guía, aquí estoy. Aunque creo que te conoces estos pasillos más que nadie.
Jane sonrió ante las palabras de Benedict, que dio nos pasos hacia ella.
-Creo que aún no te he dado las gracias por lo que hiciste por mí con la reina.
Benedict negó con la cabeza.
-No tienes que darme las gracias, yo no hice nada. Fue tu talento el que habló por sí solo.
Permanecieron unos instantes en silencio observándose sin decir nada, hasta que Jane respiró hondo y dijo.
- No puedo sacarme de la cabeza el daño que te hice con mis mentiras. Ni siquiera sabría por dónde empezar a disculparme.
Benedict se acercó más a ella y cogió sus manos.
-No me debes ninguna disculpa ni ningún agradecimiento por nada. Soy yo el que te pide disculpas por mi reacción. Si te soy sincero, creo que reaccioné así por miedo. No sé como lo has conseguido Jane Wood, pero me he enamorado de ti de todas las formas posibles. Y estoy seguro de que volveré a hacerlo de nuevo una y otra vez, seas quien seas. Te quiero con la pasión de una tormenta de Turner.
Y dicho esto la besó y Jane pudo sentir esa pasión de la que hablaba.

"Mi querido lector,
Llega a su fin otra temporada más. Llena de escándalos y pasión. Desde aquí quiero dar mi enhorabuena a las hermanas Emily Wood por sus futuras nupcias con el señor Eric Owen y también a la señorita Jane Wood que contraerá matrimonio con el señor Benedict Bridgerton. Cosa que sorprenderá a muchos tras la momentánea desaparición de la joven.
Desde luego, Lady Hall debe enorgullecerse de haber casado a sus dos sobrinas en su primera temporada. Y su majestad la reina de nuevo ha sabido elegir a un diamante que ha hecho honor a su título.
Es una pena que otras jovencitas en cambio no hayan corrido con la misma suerte. Quizás la señorita Cowper no se desmayó lo suficiente como para impresionar a alguno.
Esperemos que la próxima temporada sea tan divertida como esta y traiga nuevos alborotos.
Sea como sea, tenga por seguro, querido lector, que estaré aquí para contárselo.
Atentamente,
Lady Whistledown."

Ícaro || Benedict BridgertonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora