Pasaron diez minutos desde que estuve esperando al agente Velázquez, y en ese momento me fijé que Amelia estaba cerrando el negocio.
No quería que me viese, pues me fui corriendo hacia la otra acera para que no se diera cuenta que era yo.
Me quedaba en la puerta principal de la Universidad que estaba cerrada y me dio repelús por lo oscuro que se veía el campus.
Desvíe mi mirada hacia un coche negro, con ventanas blindadas y asomo una mano como si quisiera que fuera.
No sé si era él o no pero me iba a paso rápido dirigiéndome a su coche y me sentaba en la parte de delante del coche.
Si.
Era el señor Velázquez.
Le miré por unas milésimas de segundos pero después desvíe mi mirada al frente, empecé a recordar la última conversación que tuvimos.
-¿Todo bien, Martha?-preguntó cordialmente sin mirarme a la cara y parecía volver a conducir.-
-Si, todo bien.-
El agente Velázquez seguía conduciendo de manera despacio mientras qué él se quedaba mirando a la ciudad, estaba vestido de particular.
-Iremos a un sitio donde no haya nadie.-dijo.-
No le respondí pero estaba de acuerdo con ello.
-Y te pido perdón por como te traté en aquel bar, pero me pasé con la bebida y me altere.-
-Olvidelo.-dije sin más para no aumentar la tensión y seguía mirando hacia delante.-
-No, no voy a olvidarlo.-dijo seriamente mirando al frente mientras conducía.- Soy mucho más mayor que tú, te conozco desde siempre y no estuvo bien.-
-No pasa nada.-susurré cabizbaja mientras miraba al suelo del coche.-
Desde ese momento no hablamos más dentro del coche.
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Nos fuimos a un bar normal pero a diferencia de una hora de donde vivíamos para que nadie sospechará de nosotros.
El agente Velázquez se pidió una cerveza aunque sin alcohol y yo simplemente un vaso de agua.
Esto era un tema serio, teníamos que hablarlo.
-Me sorprendió que me llamarás para hablar conmigo, no me lo esperaba.-dijo.-
-Quería hablar con usted para saber la historia completa sobre ese tal.. Lukas Castillo, pero no estoy diciendo que crea que Benjamín sea Lukas.-
-Claro.-dijo irónico mientras asintió su cabeza.-
Le observé que daba un trago a su cerveza despacio y luego dejaba el vaso en la mesa.
-Pues vas a tener que contarme cómo empezó tu relación de Benjamín.-
-¿Que yo empiece a contarle?-pregunté desconcertada mientras me señalaba a mi misma con un dedo.- Eso no creo que sea justo.-
-¿Por qué crees eso? Necesito saber todo sobre él.-
-Pero yo necesito saber la verdad sobre Benjamín, usted debería de hablar primero.-
-Bueno... Si estás aquí, es por qué dudas de él.-
Desvíe la mirada hacia otra parte de aquel bar desconocido como si le diese la razón y suspiré.
-Si quiere que le ayude, primero tendrá que contarme usted.-dije insistiendo por ello y le escuché de suspirar con resignación.-
-Muy bien..-dijo mientras que se me quedaba mirándome fijamente.- Lukas Castillo fue a un reformatorio por haber matar a su padre con una escopeta con dieciséis años, su madre está muerta a manos de su padre justo una semana antes del asesinato y parece que fue una venganza por parte de Lukas, él salió a los dieciocho años de aquel reformatorio, él era menor en ese entonces y no pudo entrar en la cárcel... Luego, estuvo con una chica llamada Lina durante un año y un día la mató a apuñaladas como te mencioné, pero desde ese día ya no hay rastro ninguno de Lukas, desapareció y ya no se ha vuelto a saber más nada de él.-
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¿Puede amar un monstruo?
Mystery / ThrillerLa joven llamada Martha de 18 años lleva enamorada de un tipo llamado Benjamín de 25 años, de hace un tiempo. El vecino de en frente. Aunque su vecino no sabe de su existencia hasta que coinciden en un encuentro casual y Martha comenzará a conocerlo...