Juguete de placeres prohibidos

Capítulo 19. El dilema de la llamada venganza

Freen despertó, se froto los ojos con suavidad y los abrió lentamente a pesar de que poca luz lograba entrar a la habitación. Sentía mucho frio, pero ella estaba caliente. Metió la mano por debajo de la sabana y recordó que durmió sin ropa. Pasó su mano suavemente por su vientre para sentir lo que temía, una herida que estaba cicatrizando, casi no se sentía, pero quiso observar todo su cuerpo.

Se levanto, se subió a la cama y bajo del otro lado para no despertar a Becky quien dormía, quien la viera dormir tan flácidamente en la alfombra; en el suelo. Su cuerpo estaba contraído y su cabello castaño estaba alborotado que le cubría un poco el rostro, mientras se tapaba hasta la boca con la sabana, se veía de cierta forma: linda. Aprecio una sonrisa involuntaria en sus labios de tan solo pensarlo.

Entro al baño y comenzó a examinar su cuerpo, la cortada era leve, pero se notaba, igual no era que fuera a usar alguna blusa que mostrar su estómago, en la espalda tenía algunos moretones por los latigazos, de alguna forma su intimidad dolía un poco junto con todo su cuerpo el cual estaba caliente porque parecía que jugar con hielo mientras su temperatura corporal era elevada le causo un resfriado.

Puso una mano en su cabeza y cerró los ojos con fuerza dando un gran suspiro.

-Debería tomar una ducha...- iba a usar al regadera, pero quería relajarse así que lleno la tina de agua tibia. Se metió dentro y cerró los ojos para disfrutar de aquella sensación. Estaba tan relajada por el silencio que la rodeaba que le entro sueño, cabeceaba en la tina hasta que se durmió...no soñaba nada, su mente estaba en blanco, pero relajada hasta que se movió bruscamente con los latidos acelerados. Había recordado el incidente de violación, podría ser porque fue vendada en "su castigo". Normalizo su respiración y comenzó a bañarse para salir de ahí antes de recordar de nuevo algo relacionado con eso.

-Creo que hoy si iré a clases...- observo el reloj y tenía tiempo suficiente para llegar a tiempo, mientras que las clases de Becky ya habían comenzado, aun así, le dio miedo despertarla. Se abrazo una vez vestida y sacudió la cabeza para despejarse, recogió su ropa y los objetos que su ama empleo, su ropa la guardo para ver qué hacer con ella después mientras que la de Becky la puso en la cama; asintió y salió de la habitación directo a su salón de clases. En el camino recordó que no desayuno, por suerte en el camino encontró una máquina expendedora y por alguna razón había dinero en su falda, comió una barra de fresa con agua pues ninguna bebida se le antojaba más que simple agua.

Al llegar su semblante era indiferente, aun después de cruzar mirada con Mew, le sonrío como si nada hubiera ocurrido y fue a su lado.

-¿Y bien...?-

-Buenos días, Mew-

-...Buenos días...- trago saliva y hundió su rostro en sus brazos cruzados en el pupitre. Freen revolvió el cabello de Mew y soltó un corto suspiro como de "¿qué se le va a hacer?".

-Lo siento, mis sentimientos son muy confusos y creo que no es bueno dejarse llevar por ellos-

-Como digas- la chica mala se había dado por vencida en su conquista que ya le daba igual.

-Disculpa, enserio. Me deje llevar con Nat y me fue muy mal, no sé como paso si no soy ese tipo de persona...no es que piense que me pasara lo mismo contigo, pero no pienso en ti como algo más-

-Bien, me gusta que seas directa. Eso me gusta de ti, elije bien a la siguiente persona y...si alguna vez necesitas la ayuda de una buscapleitos, acá estaré para ti- se apuntó con el dedo, se levantó y se fue del aula dejando a una chica aliviada, la había librado de un gran peso y no la detuvo pues ella no es de entrar mucho a las clases, solo entraba para estar con ella, pero parece que esta vez tiene eso a lo que llama asuntos pendientes.

Sus clases transcurrieron como de costumbre y aprovecho su leve resfriado para decirle a la profesora que ayer se enfermó y hoy que estaba mejor vino a clases, la maestra no dudo de su excusa y la acepto borrando las faltas de ayer.

***

-Qué rayos...- Becky estaba despertando y esa fue su reacción al ver que dormía en el suelo. Recordó lo de anoche y solo murmuro una queja. Se levanto y noto que todo estaba en la cama aun así había un pequeño desastre en la habitación después de aquel "juicio", varias partes de la alfombra estaban mojadas, una combinación del hielo derretido y fluidos corporales de ambas.

-Debo de llamar a la sirvienta para que limpie, no quisiera que mi alfombra oliera por un largo tiempo a sexo sadomasoquista.- Se dirigió a la ducha e hizo lo mismo que su pequeña, lleno de agua tibia la tina, se relajó y se tomó su tiempo pues ya no iría a clases, a lo mucho a la última.

En efecto solo termino yendo a su última clase. Al regresar se encontró a su pequeña haciendo tarea y a su sirvienta terminando de limpiar la alfombra.

-¿Aun no está esa alfombra?- preguntó en un tono autoritario.

-Acabo de terminar, señorita-

-Bien, puedes retirarte- su sirvienta solo asintió y salió de la habitación. Becky se acercó a comprobar su trabajo, fue bueno, la alfombra olía bien y estaba fresca aún.

-¿Hare su tarea también hoy?- Freen hacia su tarea desde la primera vez que se lo ordeno y resulto estar bien.

-No, creo que la hare yo, linda- dejo sus cuadernos en el escritorio rodeando a Freen con sus brazos apoyando su cabeza en su hombro. La pequeña dejo sus labores y pregunto qué sucedía.

-¿Cómo te sientes?- En esa pose pareciera que la seduciría, pero su tono de voz fue suave y un poco tierno.

-Bien, no se preocupe-

-Dime la verdad si no quieres sentirte peor, puedo volver a castigarte y empeoraras- Un tono amenazante se mezcló con la suavidad en sus palabras, su tono de voz tranquilizante no se perdió.

-En verdad...tengo un leve resfriado y...-

-¿Y...? habla-

-Me duele un poco el cuerpo, eso es todo, no es que me moleste demasiado- no quería causarle problemas a Becky pues bien sabe que se ganó aquel castigo por andar siendo la muñeca Barbie de otra chica.

Becky pensó en darle un masaje, se estaba doblegando cuando ya había logrado estar en la cima, hacer verle bien quien era la que daba las órdenes y quien debía obedecerlas.

-Te dejare dormir en mi cama solo por tu resfriado, mañana si sigues igual no será mi problema, duermes en la alfombra como siempre- le dolía decirle aquello, pero a la vez le reconfortaba, después de todo, aquello comenzó por su desesperada ansiedad de vengarse.

-Tal vez el mantener relaciones con ella intensifico mis sentimientos, mierda- se lamentaba en voz baja con el rostro hundido en la almohada para que su muñeca no la escuchara.

-Debo hablar de esto con alguien...- busco en las bolsas de su falda y saco su celular, mando un mensaje de texto a Erika el cual fue respondido enseguida. –Nunca me fallas, amiga- le explico que no podía llamarla y le daba pereza prender la laptop, le contó su "crisis sentimental" por SMS mientras Freen solo se encontraba en el escritorio, pareciera que termino hace un buen rato y estaba absorta en sus pensamientos.

"Sigo siendo virgen gracias a Mew, esa loca era capaz de violarme del todo con quien sabe que cosas si seguía...", "Quisiera vengarme de Emma, pero...dentro de este instituto ella es más que yo si lo veo de una forma superficial...Nat, él puede quedarse como sea, solo me interesa Emma"

-Maldita...quisiera que, aunque sea te echaran del colegio-

-¿Dijiste algo?- Becky escucho lo que Freen mascullaba.

-No, nada. Ya terminé mis deberes...mmm, ¿usted puede expulsar a cualquier estudiante con solo pedirlo?-

-Si ha roto gravemente las reglas, si...entre nos, si lo quiero puedo hacer que con solo una falta se vaya, ¿acaso quieres expulsar a alguien?- la mayor comenzó a reírse.

-Solo era curiosidad, gracias- una maliciosa sonrisa fue la que tuvo al responder.

Becky no tomo importancia a aquel comentario y prosiguió en lo suyo, los SMS's con Erika. Aún era temprano así que la mascota se sacó a pasear sola, fue a vagar por los pasillos sin rumbo pensando si en verdad quería hacerle algo a Emma.