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Por las noches, por los días y por las madrugadas, Theodore se escabullía en la habitación de Alyssa para pasar el rato con ella. A veces solo dormían, en otras jugaban algún tipo de juego que se les ocurriera, en otros debían de ser silenciosos para no despertar a los demás.
El silencio debía de ser lo que predominará con ellos.
Había tardes en las que Alyssa era encerrada, nadie sabía lo que sucedía allá abajo, ni siquiera Narcissa.
Voldemort, Bellatrix y otro hombre que al parecer era lobo llevaban a Alyssa al sótano y no sabían nada de ella hasta la noche. Durante esos días la joven sólo llegaba a su cama muy cansada a dormir, pero en la madrugada sentía un brazo alrededor de su cintura, uno que siempre reconocería. Con Theo se sentiría siempre protegida.
Al pasar las semanas Theodore empezó a notar distinta a Alyssa, más distinta de lo que ya se había hecho. Ahora tenía la mirada más perdida y solía tener frialdad en sus ojos. Se preguntaba Theo qué era lo que le hacían a Alyssa para tenerla así.
—Alyssa—Le llamó Dalia a su amiga. Ambas estaban en el jardín, viendo a la nada.
—Hola, Dals.—Le contestó con una media sonrisa.—¿Sucede algo?
—Yo... Siento que no hemos estado tan cerca más como deberíamos.
Alyssa sentía lo mismo, pero por alguna razón no podía decirlo.
—Lamento que lo sientas así—Dijo con voz tajante. Y aunque Dalia no lo demostró en ese momento, le había dolido su comentario.
—Este no es el futuro que había pensado para nosotras, ojalá no estuviera pasando...
—Pero es nuestra realidad, no podemos hacer nada para cambiarla.
—Ojalá existiera la manera-
—No existe Dalia. No existe la manera de regresar a la vida que teníamos antes. Y de verdad lamento que sientas que nos hemos alejado, te quiero y me importas muchísimo, eso jamás cambiará.—Alyssa tomó la mano de Dalia, viéndola a los ojos para sonreírle. Siempre sería su alma gemela, su otra parte.
—Quisiera regresar a esas vacaciones en tu casa—Comentó Dalia llorando, con su cabeza recargada en el hombro de Alyssa—Creo que jamás había sido tan feliz.
Alyssa rio al recordar ese momento. Estaba distanciada de Theo en ese entonces, pero eso no le prohibió pasar unas de las vacaciones más raras e increíbles del mundo. Recordó cuando besó a Draco, ambos estaban tan confundidos... Las cosas siempre pasaban por algo, aún no entendía por qué había pasado eso.
—Todo en Hogwarts cambiará... Lo sabes, ¿No? Todos allá saben quién eres ahora.
—Les tocará acoplarse, Dalia. Porque la realidad ahora es otra, y sin Harry aquí... Mi abuelo tiene el camino libre.
