Extra

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Varios guardias que se encargaban de vigilar las puertas de la temida zona infernal observan con sorpresa y respeto a nuestra querida Reina.

La rubia sonríe con algo amabilidad antes de pasar junto a ellos y volver a ver al verdugo que ahora ella condena. Sus ojos oscuros llenos de cansancio observan el alrededor de los pasillos, los calabozos son repugnantes y calurosos, los gritos solo la llenan de temor, ese temor que no sentía hace tantos años.

Sus pasos resuenan en todo el lugar, los demonios desesperados se acercan a las rejas, se arrodilla e imploran perdón de su nueva reina. Esta observa con desagrado, sigue su camino y ordena a los guardias que levanten la temperatura porque los gritos no son suficientes para sus oídos.

Hasta que al fin te vuelvo a ver -comenta la soberana observando con frialdad al demonio que se encuentra sentado en el suelo-

La sombra del demonio ciervo se levanta con velocidad y se acerca en busca de consuelo a la sombre de su amada. Esta llena de dolor gira su rostro, se limpia las lágrimas y se pierde en la oscuridad del final del pasillo. Alastor se levanta con su respectiva elegancia y se acerca a la rubia que tanto recordaba.

Querida...-rie con su estupida voz de radio anticuada y desgastada- hace mucho que no te miro...

Para ti, soy la Reina Charlotte Magne primera -levanta con orgullo su rostro y sonrie con superioridad- ni siquiera puedes dirigirte ante como si fueras un Overlord porque ese cargo lo tengo yo

No - niega con la cabeza e inclina un poco su cuerpo para sostenerse de las rejas de metal y sonrie- ante mis ojos sigues siendo la misma niña asustadiza de siempre

No - niega con la cabeza e inclina un poco su cuerpo para sostenerse de las rejas de metal y sonrie- ante mis ojos sigues siendo la misma niña asustadiza de siempre

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¿ por qué? -pregunta por fin la rubia con aquella duda que tanto le carcomia el alma, el corazón y el pensamiento- ¿ por qué lo hiciste?

Por el poder, por las ganas de derrocar a tu padre, por sentir la verdadera felicidad de tener el papel principal en este escenario lleno de papeles mediocres como el tuyo -sonrie ampliamente antes de entre cerrar sus ojos escarlata- Majestad....-habla con mucho desdén refiriéndose a su cargo-

¡Te entregué mi vida Alastor! -rompe por fin esa barrera creada por temor a derrumbarse- ¡Me entregué ciegamente a ti! -sujeta las rejas- Te amé como jamás ame a nadie, te adore más que a un ser divino mucho más que a mi padre... -las lágrimas brotaban sin parar- a veces deseo que este sea un mal sueño y tu...tu vuelvas a estar a mi lado siendo felices

Eres tan patética como siempre querida- comenta mientras mueve su cabeza al compás de sus palabras- mírate, ¿crees que me fijaría en ti? -las carcajadas retumban en la celda hundiendo más el corazón de la rubia-¡Ja! ¡Más! Nunca me enamoraría de un ser tan débil que lo único que me ofrecía era el poder que tanto anhelaba...

Te pareces tanto a ellos...-susurra cansada mientras apoya su cabeza en la reja- te pareces a mi padre al llamarme mediocre y patética, te pareces a Harold al mentirme y lastimarme como siempre lo eh temido -la voz se quiebra y sus lágrimas no paran- y te pareces a tu padre al romperme en mil pedazos como lo hizo con tu madre, es verdad no me golpeas te como él, pero me hiciste tan insegura de mi misma como tu madre lo es...

Alastor deja caer su monóculo y este se rompe en mil pedazos. Su padre...su padre y él eran distintos...su padre y él no se parecían...el jamás lastimarla a su madre...

Charlotte- susurra la voz del locutor sin ese efecto de radio que tanto lo caracteriza-

Espero y tu madre te perdone...porque es madre después de todo, pero yo...-levanta su rostro y se aleja de las rejas- yo...no confiare de nuevo en mi corazón porque ahora ya no lo tengo...

La sombra del demonio desesperada toma con fuerza la blusa de la mujer y esta solo se aleja en la oscuridad de las sombras del pasillo.

¡Charlotte!-grita desesperado mientras golpea la reja intentando correr detrás de ella-

Te deseo suerte Alastor y que en un futuro seas de nuevo el Overlord más temido del infierno ya que eso es lo que tanto deseas -los pasos de esta desaparecen lentamente-

Para volver a ser lo que era, para volver a pelear por ella, para volver a estar a su lado debía confiar en los humanos...en las invocaciones que tanto disfrutaba, en donde la encontré y se...enamoró...lastimosamente toda la información requerida desaprecio...

...O tal vez no...


Una pequeña de cabello rojizo ingresó con cautela en la vivienda de un grupo de chicos que buscaban las experiencias paranormales, con cautela coloco un papel antiguo con ciertos pasos que ustedes y yo conocemos a la perfección.

¿Y este papel?- pregunta el valiente del grupo mientras se acerca a los demás- no recuerdo haberlo dejado en el libro de hechizos...

De seguro es una nota que dejo alguno que lo llevo de la biblioteca-comenta con pereza el mayor del grupo- pero que dice...









Como invocar al demonio de la radio








La pequeña llena de felicidad se acerca a su amigo abrazando con fuerza porque su pequeña acción regresaría a su mejor amigo a su lado.







Después de tanto tiempo vuelvo a escribirles solo para animarle a que continúen esta historia a su gusto...desean una secuela solo escriben la y dejen que su imaginación les entregue su final feliz...

Hasta aquí mi aporte y espero pronto seguir con ustedes como lo hacía antes.

¿Se dieron cuenta que Eres mi títere cambio de portada?

¿Será que volveré a llenarlos de momentos charlastor como antes?

Quien sabe, solo recuerden...

Seguir sintonizando a este bello mundo de la lectura.

La invocación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora