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La familia Midoriya-Bakugou se despidió de Inko y Yagi para irse devuelta a su hogar a darle la sorpresa que tenía exaltada a Katsumi. No dejo de preguntar que tipo de sorpresa sería a sus padres en todo el camino a casa, poniendo más nerviosos a los progenitores que en su cabeza estaban pensando en todas las escenas que podrían pasar y como contestar a estas.

Al llegar a su residencia, la familia se sentó en el sofá con la pequeña Katsumi muy ansiosa, ella movía sus piernas mientras observa a sus padres mirándole, Izuku rodeo el hombro de su marido con su brazo intentando calmarlo.

—Entonces, ¿¡Cuál es mi sopresa, papi!?¡¿Que es, que es, que es!?¡Ya no soporto este misterio, quiero saber!

Katsuki e Izuku se miraron uno a otro antes de decirle a su cachorra que tendría un hermanito o hermanita. Tomaron aire y el valor esperando que todo salga bien.

— Tenemos algo que decirte, pequeña — Indicó Katsuki sentando al lado de su esposo quien tenía a la cachorrita en su regazo.

— ¿Sobre que papá? — Preguntó ella inocente inclinando su cabecita a un lado, el Alpha cenizo acarició la cabellera rubia de la misma preguntando.

— ¿No has pensado en querer un hermanito o hermanita?  — Preguntó Izuku de una sabiendo que su esposo demoraría un poco en decirlo, a él tampoco le gusta la tensión que se formó en el ambiente.

El semblante de Katsumi cambio a uno emocionado a uno perplejo, casi indignado o ofendido, tal vez molestó. Una combinación de los tres, ella frunció su ceño mientras aprieta su mandíbula por sus feromonas sus padres pudieron sentir su profunda molestia.

—¡No!¡No quiero!

Gritó Sumi de repente quitándose las manos de su papá de la cabeza y bajando se del regazo de su padre. Parándose enfrente de ellos con los brazos cruzados, bastante molesta debe decir. Casi que lastimada por la pregunta.

—¿Que...? — Murmuró Katsuki impactado por lo que vio, su peor pesadilla de hace unas horas se hizo realidad. Su hija acaba de rechazar a su nuevo cachorro, a su hermanito/a. Por alguna razón, el Alpha interno de Katsuki se sintió mal y triste.

E Izuku pudo notar esto.

— Katsumi, hija... — Antes de Izuku pudiera acercarse a ella, la infante volvió a rechazar a su padre huyendo de él y se ocultó detrás del sillón de sala —¿Por qué no quieres tener un hermanito/a?

—¡No!¡Que no quiero tener un hermanito o hermanita, lo que sea!¡Me basta con Explosion!¡No quiero!¡No quiero! — Chilló la cachorra tapándose los oídos apunto de dejar caer sus lágrimas de frustración.

Ella tampoco se podía creer lo que estaba escuchando, pensaba que sus papás se volvieron locos y se quieren deshacer de ella, que ya no la quieren. ¡Ella no quiere sufrir lo mismo que sufre Reiki!¡Era su mayor miedo! Y ahora se hizo realidad.

Katsumi empezó a sollozar pensando que volvería tonta y estúpida como Reiki, tal y como él se lo explicó.

—¿P-por qué...? — Murmuró Katsuki intentando sacar a su cachorra del suelo que siguió rechazando a sus papás. Eso a ambos Alphas no les hacía bien, no les gustaba el rechazo de su hija.

— ¡Porque no! — Volvió a gritar ella, aún llorando cosa que le rompió el corazón a Katsuki. Izuku a pesar del rechazo de su cachorro la agarro del sueño y la cargo de vuelta al sofá.

— Katsumi... Hija, ven acá. Tiene que haber una razón por la cuál no quieras tener un hermanito — Dijo Izuku con tranquilidad poniendo su cachorra contra su pecho mientras Katsuki se pone su lado secando los hilos de lágrimas de su pequeña cachorrita — Puedes decirnos porque no quieres, queremos saber... Ya que no te gusta, y nosotros somos tus padres no queremos verte triste...

ALPHA X ALPHA - [Dekubaku][FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora