01 | "𝑌𝑜 𝑏𝑖𝑒𝑛 ¿𝑦 𝑡𝑢́?"

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Ann.

Me desperté del mejor humor que existe, al fin conseguí un maldito trabajo. No puedo creer lo difícil que es conseguir un trabajo de medio tiempo sin un título aún ¿como esperan que pague la maldita universidad?

Gracias a dios tengo un viejo conocido que tiene un muy buen estatus. David Jost bendecido seas, me dio trabajo como asistente de la banda Tokio Hotel, juro que aun siento que estoy en un sueño. Apesar de lo mucho que me emocione este trabajo no me dejara demasiado dinero, pero creo que será más que suficiente para sobrellevar los estudios, por ahora.

Desayune, me lave los dientes y salí de mi casa felizmente a mi nuevo empleo, nadie podría arruinar mi buen humor hoy, nadie.

Espere el autobús, no estaba demasiado impaciente, de hecho, voy bastante temprano a la reunión, aun hay tiempo.

...

Bien ahora estoy más preocupada, el autobús aun no pasa, llevo más de 20 minutos esperando, se supone que debía llegar hace 15 minutos.

Finalmente llegó, venía lleno hasta el tope, me tocó irme pegada a la puerta, pero aun así, mi sonrisa está intacta.

Mi parada, al fin podré respirar. Rápidamente baje del transporte a tomar aire, delicioso aire fresco. Nunca más subiré a un autobús tan repleto.

Saque mi celular para ver la dirección que David me había mandado por mensaje, queda a malditas 10 cuadras de la parada... Respira Ann, solo respira. Esto no es tan malo, caminar te hace excelente, excelente.

Finalmente llegue al lugar del encuentro, era un estudio bastante lindo, buena ubicación, no era un lugar muy concurrido por turistas, buena elección.

Antes de entrar necesitaba liberar tensiones, no mentiré, si estoy enfadada, las cosas no están saliendo como lo planeado, pero aún seguirá mi sonrisa, quizá un poco las leve, pero ahí estará.

Estaba practicando mis caras, ya saben, mi cara de "Oh, si por supuesto Tom, quiero casarme contigo"...

Quizá si tenga un pequeño crush en el, vamos ¿ya lo vieron? es el maldito Tom Kaulitz.

Mientras mi cara parecía más de estreñimiento que de cualquier otra cosa comenzó a sonar mi celular. Vi el nombre en pantalla "David Jost" no tuve que pensarlo dos veces y conteste enseguida.

[...]

Hola Ann ¿puedo saber donde estas?— sonaba bastante impaciente.

—Afuera, ya entro.— Lo oí suspirar y luego colgar el teléfono, genial, empezamos mal.

[...]

Suficiente Ann, deja de fantasear, es tu primer día, no lo arruines.

Ya más calmada entre en el estudio, solo para toparme con Jost parado mirándome con una cara de decepción tremenda.

—Hasta que llegas, anda, te presento a los chicos y de paso firmamos de una vez.— felizmente lo seguí a una de las habitaciones del lugar.

Entre y aunque trate de mantenerme calmada no pude evitar esbozar una gran sonrisa al ver a los 4 especímenes más perfectos del planeta mirándome con una sonrisa de oreja a oreja.

—Ann, ellos son la banda para la que trabajaras, Tokio Hotel.— como si necesitara presentarmelos, apenas me entere quienes eran hice una minuciosa investigación.

De pronto el maldito Bill Kaulitz se puso de pie, y con una sonrisa se acerco a mi.

—Hola! soy Bill, Bill Kaulitz, es un gusto conocerte Ann, David nos ha hablado muy bien de ti!— me extendió la mano que no dude ni un segundo en tomar y sacudirla en forma de saludo. —Buen apretón chica, me agradas.— seguía sonriéndome, era hasta contagioso, tanto que sin darme cuenta yo también estaba sonriendo como idiota.

Be mine ; Tom KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora