Pequeño lobo arrepentido.

21. Preparación completa.

Por la tarde, Wen Jia y Ba Ping regresaron con un carro lleno de bebidas como cerveza y leche, distribuidas en dos cajas de almacenamiento.

Por la noche, Zhang Zhi llamó y dijo que ya estaba cocinando, así que les pidió que volvieran pronto.

Los suministros ya estaban más o menos listos, así que lo siguiente era remodelar la caravana de Lao Yuan y su grupo, además de revisar y mejorar la habilidad con las armas y la conducción del vehículo.

Después de cenar en casa, Lao Yuan y los demás dijeron que querían disfrutar de la vida nocturna extravagante y dejaron a Mu Zi atrás.

Aunque Mu Zi tendría un fuerte deseo sexual en el futuro como un alfa, en términos de edad todavía era un niño y no podía experimentar la vida adulta antes de tiempo.

Después de ser abandonado, Mu Zi se quedó sentado en el sofá con su osito de peluche toda la noche, enfadado, y Zhang Zhi tuvo que calmarlo por un tiempo antes de que finalmente se fuera a dormir.

Qin Chi miraba con envidia la escena, recordando cómo Zhang Zhi solía tratarlo antes con tanta ternura, pero lamentablemente...

A pesar de arrepentirse y sentirse culpable, Qin Chi no podía resistir la creciente sensación de celos y se metió en la bañera mientras Zhang Zhi se estaba bañando, abrazándolo y haciéndolo con él. Luego, jugaron locamente bajo la lluvia de la ducha, haciendo que Zhang Zhi gimiera continuamente, sus piernas temblaban y ni siquiera pudiera mantenerse de pie.

Cuando recuperó su cordura, Qin Chi se regocijó en sus momentos de felicidad y se maldijo a sí mismo por ser un animal.

Secó y peinó a Zhang Zhi y lo llevó a la cama, abrazándolo mientras este se acostaba.

Zhang Zhi estaba tan cansado que no podía abrir los ojos, pero su cuerpo se sintió aliviado por el largo coito. Como beta marcado, mientras fuera acariciado por su compañero alfa, no importaba si su alma se resistía o no, su cuerpo siempre estaría deseoso de complacerlo.

Además, ya tenía fantasías indebidas con Qin Chi que no deberían existir, por lo que en cualquier momento, su mente y cuerpo se relajaban infinitamente bajo sus caricias.

Zhang Zhi estaba a punto de dormirse, pero aún se esforzaba por abrir los ojos y darle instrucciones a Qin Chi:

-No salgas tanto últimamente. Si no hay nada que hacer, quédate a mi lado.

-Entendido, Zhi'ge. Por ahora he estado ocupado, pero después de acompañar a Lao Yuan a comprar un auto, pasaré todo mi tiempo contigo en casa.

Con la promesa de Qin Chi, Zhang Zhi finalmente se sintió más tranquilo y se durmió en sus brazos.

Qin Chi tuvo un sueño muy doloroso en el que revivió todo lo que había experimentado en su vida pasada.

A veces veía a Zhang Zhi, delgado y huesudo, buscando comida en un basurero mientras lo cargaba a él, que tenía una pierna rota. Otras veces veía al grupo de Lao Yuan siendo destrozado por los zombis, y luego veía a Zhang Leyue y Wei Zhinan, dos líderes de la Base de Hanhai, adulándose mutuamente y planeando exterminarlos a todos.

Varias escenas se entrelazaban, y Qin Chi no durmió bien en toda la noche. No podía despertarse de la pesadilla, y cuando se levantó por la mañana, no tenía nada de energía.

Zhang Zhi pensaba que estaba demasiado cansado, y se sintió apenado por él. Si él mismo no estuviera enfermo y entendiera más sobre la "apertura de un supermercado", se habría ocupado de todos los asuntos en nombre de Qin Chi.

Ese día, había una exhibición de autos en la ciudad, y Qin Chi planeaba llevar a Lao Yuan y a los demás a elegir un coche.

Mu Zi estaba intrigado por la empresa de Zhang Zhi, y justo entonces la familia de Zhang había preparado 10 millones de yuanes y quería que Zhang Zhi fuera a transferir sus acciones y manejar los procedimientos.