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Hyunjin desde hace años se vió interesado en un simple esclavo que limpiaba los zapatos de su familia, estaba la mayor parte del tiempo triste y nunca miraba a los ojos a nadie, ni siquiera a otros esclavos. No tenía nada de especial, era pobre y flacucho, tampoco era bonito según las opiniones de la gente.

Pero a decir verdad, a pesar de verse desnutrido, decaído, sucio, debil, y con ropa maltratada, a Hyunjin le parecía lindo, incluso si pudiera le daría un beso cada vez que lo viera, pero no podía, eso estaba mal, un príncipe no podía rebajarse ante un esclavo, mucho menos un niño de solo dieciséis años que aún no se había presentado, pero eso era lo de menos.

Ahora, el joven príncipe contaba con diecinueve años recién cumplidos, se había presentado a sus quince años como un Alfa puro. Su padre estaba hecho polvo y pronto moriría, quizás en dos años o más, y al ser hijo único no habría nadie más quien ocupara el puesto de Rey, a menos que muriera.

Una vez tomara ese gran mando, reclamaría al lindo chico, quería a ese esclavo a su lado, en el trono correspondiente a su pareja, una reina. Nadie podría quejarse, porque no lo permitiría.

Pero ¿Cómo iba a lograrlo? Nunca conversaron más que para darle una orden, y probablemente el chico ni siquiera se veía interesado por una persona que le prohibió la libertad y lo mantenían como animal en cautiverio, ejerciendo trabajos pesados sin descansos ni paga.

Nunca lograría enamorarlo, era una misión imposible.

—Buenas tardes...Príncipe Hwang...Le traje este pastel como regalo por haberme salvado...

O quizás si lo lograría, y no sería tan difícil como pensaba, pues, el chico era muy inocente y tenía un sueño, ser amado.

 The Prince ✙《 HyunSung 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora