A través del tiempo: El experimento [1] BILOGÍA

Capítulo 14

Elizabeth Sullivan, año 2040

Abro mis ojos lentamente para acostumbrarme a la luz del sol que entra por una ventana y me siento en la cama para analizar mi alrededor. Es la misma habitación de siempre.

De pronto me veo con la mano apretada en un puño y la abro porque algo dentro me está dañando. Es el reloj, me digo a mí misma, es el reloj que mi bisabuelo tenía enganchado en su chaleco.

Me levanto y abro mi ropero, todo sigue en orden, la misma ropa, los mismos pendientes, todo.

La puerta de mi habitación siendo abierta me causa gran impacto cuando veo entrar a toda mi familia con una torta en manos de mi madre para cantarme la canción del cumpleaños feliz. Terminan de cantar y soplo ambas velas un tanto confundida.

-Feliz cumpleaños, hija-mi madre besa mi mejilla y es seguida por el abrazo de mi padre y Axel desordenando mi cabello de forma cariñosa.

Todos saludándome amorosamente.

-No te quitaremos más tiempo, cámbiate de ropa o llegarán tarde a la escuela.

Ellos están aquí conmigo, ellos están vivos, de pronto mis ojos se llenan de lágrimas, pero decido cambiarme de ropa una vez que todos salen de mi habitación y guardo el antiguo reloj colgándolo en el abrigo de mi chaleco escolar para bajar a desayunar.

Todo en casa parece ir normal.

Me siento enfrente de Axel y lo veo comer de la torta como si el mundo se fuera a acabar, mi madre limpia la cocina y mi padre mira el periódico sentado al otro extremo de la mesa.

-Apresúrate, no quiero llegar tarde al primer día de clases y último año escolar-Axel dice con la boca llena y yo solo lo miro sonriente sin entender nada.

-¿Padre?-me dirijo hacia él.

-¿Sí?

-¿Me recuerdas una última vez en qué trabajas?-pregunto, pero me mira dolido.

-No es gracioso, Elizabeth-dice llevándose el periódico una vez más a su cara para tapársela.

Asiento asustada y preocupada, pero me obligo a comer para irme de aquí. Me levanto de la mesa una vez que Axel se levanta también para ir en busca de su mochila que está en su habitación.

Estoy por salir de casa para esperar a mi hermano afuera cuando la voz de mi madre hace que le preste toda atención.

-¿Cuántas veces te hemos dicho que tu padre aún no encuentra trabajo?, para él ha sido toda una odisea encontrar algún trabajo estable-mi madre sigue explicándome-.Cada vez que mira el periódico trata de buscar algo en lo que él pueda hacer, mientras tanto soy yo la que trae comida a casa...espero que no le digas que tuvimos esta conversación-susurra esas últimas palabras.

Miro a mi padre desde la puerta de casa y él sigue mirando el periódico con pocos ánimos.

-¿Cómo llegamos a esta ciudad?-le pregunto a mi madre.

-Tu abuelo nos hizo mudar de Ground Wells cuando naciste, no recuerdo muy bien por qué-cuenta-.Pero como él ya no está más con nosotros con tu padre decidimos que volver tras dieciocho años sería lo mejor...una nueva vida en un antiguo, pero nuevo hogar-me sonríe-.En fin, basta de charla, cuídense-nos dice una vez que Axel llega a mi lado.

Ambos salimos en dirección hacia la escuela en nuestro bus escolar y mi mente viaja a todas esas preguntas que se han insertado en mi cabeza, pero más en una que no logro descifrar. ¿Funcionó?, me cuestiono tocando el reloj de mi bisabuelo una y otra vez.