Princess Manobal

°•《capítulo siete》•°

JENNIE♡

─Jendeukie...¿vas a darle una sorpresa a Lisa?

─¡Si! Nos quedamos de ver esta noche pero quiero llevarle un pequeño detalle.

─Entiendo... ¿que tal unas flores?

─¡Eres un genio Kim Jisoo! Siempre le muestro mi campo y no había pensado en darle una flor.

─Ya se, soy la mejor.

Después de pasar la tarde con jisoo, me dirigí a casa para escoger de mi cultivo el regalo perfecto.

...

Bien... ahora ¿cómo voy a subir?

Estaba frente de la torre donde se supone que esta la habitación de Lisa, no estaba segura como iba a subir, hasta que di con una cuerda... me acerque y tire de ella, solo sentí como alguien empezaba a jalarla, así que me sostuve más fuerte.

─¡Jennie! Debimos acordar como subirias, pero hice lo que pude.

─Pues no estuvo tan mal tu idea─dije con una sonrisa.

─¡Deja te muestro mi habitación!

Dijo jalando de mi brazo, no podía dejar de mirarla, era una chica tan hermosa.

─Lisa...

─Mira, aquí esta mi colección de libros, me fascina leer, pero no tengo mucho tiempo últimamente.

─Princesa...

─Estas son mis joyas... pero son demasiado pesadas, me gusta mucho más el colgante de patito que me diste, pero mi padre se pone de gruñón por usar algo "sin chiste" ─dijo lo último con molestia.

─Manobal...

─¡Y! Estos son mis vestidos favoritos, personalmente este de montura es muy hermoso, pero este blanco es más cómodo.

─¡Lili!

...

Voltio rápidamente con su carita confundida, pero a la vez con un leve tono rojito.

─L-lo s-siento, ¿que pasa?

─Antes de que me mostrarás tus colecciones de cosas y tus bellos vestidos... quería darte esto─saque la flor que escondía detrás de mi espalda y la extendi a su dirección.

...

Se quedo callada observando con detalle la flor.

─No eres muy buena demostrando lo que sientes ¿cierto?─ dije con una sonrisa.

─Creo que no... una disculpa, Jennie.

─No te preocupes Lisa, yo lo entiendo.

─Pero... te lo agradezco , es un muy bonito regalo ─ dijo con una linda y tierna sonrisa,

Nunca la había visto sonreír...

─Jennie... se que no he dejado de hablar desde que llegaste, pero quiero mostrarte mi pasatiempo favorito.

Ella se acercó a su balcón, y yo hice lo mismo.

─Me gusta mucho observar el cielo lleno de estrellas, todas son tan únicas y tan brillantes.

─¿Entonces te gustan mucho las estrellas?─pregunté con interés.

─Claro, tengo mis favoritas...¡mira! Esa tiene un brillo tenue y tímido, seguro tiene miedo de mostrar su verdadero resplandor, en cambio esa de allá es orgullosa del brillo que tiene, tan radiante que puede demostrar su confianza.