Capítulo 13

559 69 2
                                    

Clarke miró a la casa, agachó la cabeza y se abrazó a sí misma, empezaba a refrescar:

- ¿Podemos hablarlo en otro sitio?

Lexa al darse cuenta de que Clarke empezaba a tener frío se movió para quitarse la chaqueta y ponérsela encima de la rubia pero en cuanto alzó un poco el brazo, la rubia hizo un movimiento como si se hubiera asustado, Lexa terminó de quitarse la chaqueta y se la puso por encima, ya no sabía si tiritaba por miedo o por el pánico que le producía que la dijese algo:

- Si llega un día en que te agredo verbal o físicamente quiero que me pegues una fuerte patada en los huevos- Clarke curvó levemente la comisura de los labios- no te replicaría y creo que sería incapaz de moverme de por vida, quedaría petrificada de rodillas e intentando encontrar mis gónadas dentro de mis entrañas- aferró sus mejillas y besó su frente- vamos a buscar un sitio donde hospedarnos y hablaremos, tengo unas cuantas preguntas ¿vale?

Preguntó acariciando el mentón de Clarke:

- De acuerdo.

Lexa se acercó a la puerta del copiloto y la abrió, esperó que Clarke montase para cerrar la puerta, rodeó el coche y montó al lado del piloto:

- Hazme un favor de buscar hoteles.

Pidió la morena mientras que ponía el coche en marcha y se alejaba de esa casa que empezó siendo de ensueño y terminó siendo infernal. Fueron a tres hoteles y todos llenos, hasta que dieron con uno tipo motel de carretera, la que daba en la autovía 17 carretera Ogeechee, en el neón ponía el nombre del motel INN on 17, Lexa estacionó cerca de la caseta de la recepción:

- Espera aquí, voy a ver si tienen una habitación libre.

Salió del coche y la rubia observó como Lexa entraba en el establecimiento donde estaba la recepción. En el parking del motel había unos cuantos coches, todas las habitaciones estaban de seguidas, como pequeños apartamentos, la fachada era de color verde azulado y era extenso, no era el típico motel que tenía un apartamento encima del otro. Lexa no tardó en salir y en su mano llevaba una tarjeta, montó en el coche y lo puso en marcha:

- Por suerte en este sí había una habitación, está a la vuelta he visto folletos con fotos, si la habitación es así como lo pintan tampoco es tan horrible.

Dio la vuelta a la calle y aparcó enfrente de su habitación:

- Solo quiero descansar.

Dijo la rubia algo desanimada, Lexa miró a Clarke:

- Solo quiero que las almohadas sean cómodas.

Lexa salió del coche y se adelantó para abrir la puerta, Clarke la siguió y al abrir la habitación ambas quedaron asombradas, sería un hotel de tres estrellas pero tampoco era cutre, la cama era de matrimonio y a simple vista parecía cómoda, enfrente de la cama había un mueble grande con cajones y encima una televisión de 45 pulgadas pantalla plana, al lado en había otro mueble con un pequeño microondas y enfrente de la puerta cruzando la habitación estaba el baño, los colores de la habitación eran claros y muy limpios, apretó cerro el coche con la llave a distancia y entró en la habitación para cerrar las cortinas de color mostaza y que no se viese nada por la ventana. Clarke se sentó en la cama y fue directa:

- Está bien ¿qué quieres saber?

Lexa agarró una de las sillas que había junto a una mesita redonda que estaba junto a la ventana, la colocó enfrente de la rubia:

- La primera y la que más me perturba ¿Te has acostado con mi padre?

- No

Y fue una respuesta sincera, otra cosa era que Lexa pudiera creerla tan fácilmente:

El precio del arte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora