N/A: cambie el nombre de El a Elena (bueno, siempre fue ese pero lo puse completo ahora) para que resulte menos confuso! Disfruten de la lectura!
Alex se deshizo el nudo de la corbata con manos temblorosas y volvió a anudársela de forma impecable. Su respiración seguía un poco agitada mientras buscaba sus pantalones alrededor de la oficina de Maximov y se acomodaba la camisa bajo los pantalones, para que pareciera que no acababa de darle una felación a su jefe de veintiseis años.
Se hizo un silencio bastante extraño, hasta que Alex abrió la boca para hablar en un intento de disiparlo.
-Te saltaste la reunión con uno de los socios de La Industria Gris.
-No puedes culparme por ello.- respondió Rhys haciendo hacia atrás sus doradas hebras.- Estaba ocupado recibiendo una mamada increíble.
Alex giró los ojos, sabía que el otro estaba exagerando, dudaba que lo hubiera hecho muy bien, pero Rhys parecía bastante complacido.
-Las cosas que hay que hacer por un ascenso estos días.
Rhys le miró pasmado, hasta que se percató de la pequeña sonrisa que adornaba los labios de Alex.
-Wow, espera, detengan todo.- susurró Rhys en un tono alarmado.- ¿Soy yo o el señor seriedad acaba de hacer una broma?
-Ja, ja.- respondió con sarcasmo, empujándolo para alejarlo.- Olvidaba que el del humor eras tu.
-Supongo que soy una mala influencia para ti.
-Supongo que sí.
Lanzó una fugaz mirada al reloj sobre el muro y casi se queda sin respiración, en un parpadeo se les había ido alrededor de hora y media, mientras estaban en eso al menos dos personas habían llamado a la puerta y Rhys no fue muy amable cuando los mandó a que hicieran otra cosa, para que Alex continuará usando su boca.
-Tenemos que fijar reglas si vamos a continuar haciendo esto.- comenzó a hablar Alex subiéndose los pantalones.
-Creí que ya las habíamos fijado.- Rhys dice abotonándose la camisa color hielo que llevaba, pero solo lo suficiente para dejar expuestas sus bronceadas clavículas.
-No.- espetó, cepillándose el cabello con los dedos.- Lo que fijamos fue un código de colores para saber cuándo detenernos.
-Así es.
-Yo estoy hablando de cuando no estamos follando. Ya sabes, cuando estemos en el trabajo.
Rhys alzó una ceja, mirándole con un renovado interés.
-¿Qué reglas quieres fijar?
-Bueno, en primer lugar quiero que mantengamos esto.- hizo un gesto con el índice apuntandolos a ambos, primero a Rhys y luego a él.- en secreto
No sabía cómo reaccionaría la gente cuando se enterara, pero no quería darles a entender algo que no era, si alguien como Trip llegaba a enterarse de lo que estaba ocurriendo nunca escucharía el final de esos comentarios.
-Ya me lo imaginaba.- respondió Rhys, y se volteó, su expresión siendo indescifrable para Alex ahora, aunque su tono resultaba más cortante que hace unos segundos atrás.- ¿Algo más?
Las palabras giraban entorno a ellos, y Alex podía sentir los letreros que colgaban apuntandolo mientras la palabra idiota brillaba, porque no, no debería seguir creyendo que esto iba a ir a algún lado cuando no era así.
¿Realmente iba a arriesgarse a admitir que estaba con un hombre solo por una relación que no iba a funcionar?
Alex pensó en decirle que por el momento evitaran las expectativas románticas, pero luego recordó que no debía preocuparse por ello, porque Rhys no sentía o sentiría algo por él.
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Make me love you (Gay)
RomanceAlex tiene 34 años, ha trabajado 10 años para Industrias Maximov, y espera que luego de todo el arduo trabajo su esfuerzo sea recompensado de alguna forma, y ¿Qué mejor que de ser ascendido a nuevo Director Ejecutivo? Pero, ¿Qué puedes hacer cuando...