Molly Weasley había trabajado mucho en su vida para que Harry Potter se quedará dentro de su familia. Con cuidado había educado a su adorada Ginny para obsesionarse con él y poco a poco transformar ese fanatismo en amor, cuando la guerra comenzó y Ginny tuvo que separarse de Harry la pobre señora no sabía que hacer pues temía que Harry terminará enamorando de Hermione, gracias a Merlin la chiquilla amaba a su otro hijos, Ron.
Entonces la guerra terminó y ambos chicos volvieron a Hogwarts, pero esa fue una época confusa para Harry pues, con la paz de la postguerra, el muchachito había tenido oportunidad de explorarse a si mismo pero Molly no le dió tiempo a profundisar en su corazón pues rápidamente lo emparejó con Ginny, haciendo uso de uno que otro trucos logró que para el final del año escolar su hija rechazará la.oferts de ser jugadora de Quiditch para volverse la señora Potter.
Ahora todo su trabajo estaba en peligro y no solo eso sí no también su nuevo estilo de vida y es que la mejor parte de ser no solo la mujer que crío a Harry si no también su suegra es que logró que el chico la cubriera de oro y lujos sin que ella lo pidiera directamente.
Y ahora este accidente podía quitarle todo.
Cuando se enteró sobre el vientre de alquiler y quién iba a ser el susodicho Omega casi mata a Ginny. De todas las personas del mundo escogía al maldito mortífago ese.
Pero al menos tendría un nieto y eso calmaría no solo la necesidad de Harry por tener hijos si no también la de Ginny y es que la pobrecita cada día parecía perder más la cordura.
Ahora su hija había quedado estéril y aquel idiota había perdido a niño, pero, tal vez no todo estaba perdido.
- Hermione querida - visitó a su nuera que era ginecóloga en aquel hospital
- Oh madre, que bueno encontrarla, escuché lo de Ginny ¿Cómo está?
- Oh mi niña - comenzó a llorar — la pobre a quedado estéril - Hermione se llevó las manos a la boca - y ahora el bebé que esperaba el otro Omega — largó un sollozo fingido — lo ah perdido.
- madre, cuánto lo siento - la muchacha estaba tan conmovida - ¿Hay algo que pueda hacer por tí?
Eso era lo que buscaba.
- En realidad, había pensado en algo, una forma de que nadie sufra en esta historia.
- Sabe que haría lo que fuera por qué Harry sea feliz.
Ahí estaba, esa devoción desmedida que su nuera sentía por Harry era lo que necesitaba.
- Ese Omega es un Omega dominante, son extremadamente fértiles y Harry es un alfa dominante - Mione asintió - solo necesitamos crear un nuevo embrión, sin decirle nada a nadie.
- Molly, eso es antietico, no creo que Harry...
- ¡No tiene por qué saberlo! - Molly tomó las manos de su nuera - Se que tú sabrás cómo hacerlo, logras que ese niño Nazca y nadie se entere de la verdad.
- Madre yo no creo que ...
- ¿Acaso no quieres que Harry sea feliz? Se siente tan culpable ahorita que esta pensando en separarse de mi Ginny.
Molly vio como la mente de su nuera trabajaba a mil por hora poniendo en una blanca su moral y el amor que tenía por su amigo.
- Está bien, lo haré.
Con una sonrisa la señora Molly salió del hospital totalmente alegre pues sabía que nadie notó el ligero movimiento de varita que había echo.
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Algo intranquila Hermione llevaba dos cafés en ambas manos mientras buscaba a Harry por todo el hospital, después de un rato lo encontró en un pasillo del último piso en desuso, con la cabeza enterrada entre las rodillas y su espalda sacudiéndose por culpa de sus sollozos.
- Hola Harry - llamó su atención - Molly me dijo lo que pasó.
- Hermione, estoy maldito, todo lo que tocó muere, todos los que están cerca mío sufren - Harry seguía llorando - Ginny me lo dijo, en cada aborto, que ya no quería ser madre pero yo no podía controlar este deseo, el anhelo de ser padre y terminé torturandola.
- No pienses así Harry, Ginny te ama - lo abrazo por los hombros - ambos harían lo que fuera por el otro. Ambos querían ser padres.
- Si aún tuviéramos el giratiempo volvería para evitar todo esto, no, volvería para evitar que se case conmigo.
Eso fue suficiente para que Hermione tomara una decisión, le ofreció uno de los cafés que trajo y tras contar hasta diez Harry cayó incociente en mitad del pasillo, lo levito hasta una sala vacía y tras una serie de hechizos y pócimas logró recolectar el suficiente esperma para poder hacer una fertilización.
Una vez terminado lo llevo hasta una sala de descanso, ya pensaría que excusa le daría pero ahora debía actuar rápido.
Preguntó en donde estaba el otro paciente que vino con Ginny, le sorprendió que las enfermeras rápidamente la guiarán hasta la habitación de lujo, le sorprendió mucho ver qué "el Omega" en cuestión era nada más y nada menos que Draco Malfoy, su suegra no le había dicho sobre eso, ya le preguntaría luego.
Draco estaba inconsciente y su cuerpo acababa de pasar por un aborto pero como Omega dominante no le costaría nada volver a formar óvulos fértiles con las pociones correctas.
Dicho y echo, ahí estaba un óvulo ansioso por ser fecundado y Hermione no perdió el tiempo, rápidamente tomó la pipeta y se aseguró de introducirlo en Draco.
Ahora solo quedaba esperar.
Para cuándo Harry despertó Hermione se encargó de explicarle cómo es que el doctor se había equivocado y Draco no había sufrido un aborto, solo un sangrado normal.
La sonrisa en el rostro de Harry disipó toda culpa de su corazón.
Tres días después con el Omega y Ginny aún incociente Hermione confirmó que Draco estaba totalmente embarazado y no habría nada que evitará que su amigo fuera feliz por fin.
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Omega de alquiler
FanfictionHarry y Ginny han pasado por cuatro abortos. Ginny, desesperada por concebir, decide "alquilar" un vientre para que geste al último embrión que les queda. ¿Pero quién estaría dispuesto a hacer algo que el mundo mágico veía mal? Buenos Ginny recor...