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- ¡Lo amas por completo! - dijo mi amiga emocionada.

- Es que ya no sé, porque de verdad desee tanto un beso, pero sé que esta mal y que esto debe parar. - lloriquee haciendo un pequeño berrinche.

- Ar, debes aprovechar, además ellos son los que insisten, tu no hiciste nada malo. - trato de calmarme por el otro lado de la línea.

- Me siento mal también por Jaehyun, el ha sido muy lindo conmigo, ¡dios! Dime en que problema me he metido. - suspire frustrada.

- Tranquila, por el momento descansa y deja de pensar en esos dos, así que duérmete y mañana vemos que pasa. - sugirió mi amiga.

- Esta bien, te amo Sun, descansa. - me despedí mientras suspiraba.

- Tu también descansa y toma tus medicamentos Ar. - dijo de igual manera para después colgar la llamada.

Apagué mi teléfono y lo coloque en mi mesa de noche, apagué las luces y me acosté en mi cama lista para dormir pero una notificación hizo que me sobresaltara, no pude controlarme y tome rápidamente mi teléfono para ver quien era.

Nuevo mensaje:
Jaehyun <3
No me pude despedir
de ti hoy porque estuve
en una junta.

De igual manera,
nos vemos mañana.

Buenas noches Ar.

Arlen:
No te preocupes Jaehyun,
Kim me explico la situación.

Igual, mañana
nos vemos y descansa
Jaehyun.

Apagué la pantalla y coloque mi teléfono de nuevo en mi mesa de noche, me arrope y caí casi automáticamente en un sueño profundo pues realmente estaba cansada además que los medicamentos causan somnolencia.

Al día siguiente

Entre tal como el día anterior al gran edificio, salude a todos en recepción y me dirigí hacia el elevador, esto empezaba a ser rutina.

Entre a la oficina y pude visualizar la figura de Jaehyun sentado en su escritorio concentrado en su computadora, no hice mucho ruido y me acerque a mi pequeño escritorio a dejar mis cosas para después me acercarme hacia Jaehyun.

- ¡Buenos días! - dije colocandome enfrente de el. - ¿Cómo amaneciste? - pregunté tratando de conversar aunque automáticamente me arrepentí pues sentí que fue algo tonto preguntar.

- Buenos días Ar, muy bien de hecho muy feliz porque hoy iremos a cenar, ¿y tú? - respondió animado dejando de lado lo que estaba haciendo.

- Muy bien, me alegro que estés bien. - sonreí. - ¿Hoy que tengo que hacer de trabajo? - cuestione esperando que hoy si trabajará como debía ser.

- De hecho hoy si tienes trabajo, toma, necesito las firmas de estos documentos, necesito que organices mi agenda y que hagas varias llamadas, así que estas algo ocupada. - dijo entregandome una pila de papeles, me dio una sonrisa de compasión y puso su vista nuevamente en la pantalla de su computadora.

- Excelente. - dije tomando los papeles antes de irme casi brincando de la emoción pues nuevamente sentía la presión del trabajo y tener por fin algo que hacer me hacía feliz pues ya es casi un vicio estar ocupada en todo momento, algo que adquirí trabajando por años en mi anterior trabajo.

Jaehyun no mintió al decir que estaría ocupada, no tuve nisiquiera tiempo de tomar el almuerzo pues tenía muchas cosas por hacer, casi todo el día estuve de arriba a abajo en el edificio haciendo distintas tareas, fue un día pesado pero aun así lo disfrute pues me sentí productiva, aunque no fui la última pues Jaehyun también tuvo mucho trabajo, estuvo la mayor parte del día sentado en su escritorio sin despejarse de la computadora a excepción de cuando tenía que ir a alguna junta.

La hora de salida llegó pero aún no terminaba de organizar la agenda de Jaehyun por lo que me quedaría un poco más para poder acabarla y que quedara a la perfección.

- Vaya día, espero no te hayas abrumado pero así son la mayoría de días. - se acercó Jaehyun a mi escritorio con su abrigo y bolso en mano. - Ya es hora de salir Ar, deja eso después lo continuas. - regaño apartando mi silla del escritorio con cuidado.

- Ya casi acabo, solo me faltan unos detalles. - dije volviendo al computador para seguir con mi trabajo, hasta que recordé la cena y que esta era en 40 minutos. - Cierto, la cena, discúlpame, seguiré con esto en casa. - me disculpe apagando el equipo para apresurarme a tomar mis cosas.

- Si que eres trabajadora, me gusta, pero tienes razón ya debemos irnos. - se acercó a la puerta esperandome para salir juntos.

Me acerque a él y salimos en camino al elevador, llegamos a la planta baja donde me encontré nuevamente con la gran variedad de automóviles por escoger.

- Estamos aquí de nuevo y como te dije la otra vez, escoge uno. - dijo mientras me miraba.

- Ay en que situación me pones. - suspire nerviosa pues no sé si lo que escoja estará bien. - Mmm, este, supongo. - señale el primero que vi, el cual parece ser al conocimiento nulo que tengo, un deportivo negro de cuya marca desconozco por completo.

- Buena elección, vamos linda. - dijo feliz mientras caminaba hacia el vehículo.

El camino fue tranquilo, manteníamos una conversación amena mientras veía con detalle la bella vista que había de la ciudad, el restaurante no estaba muy lejos por lo que llegamos rápidamente.

Nos adentramos al restaurante que no era tan lujoso a comparación del anterior que había visitado con el, pues me sentí mal de que el pagase todo aunque sé que se negaría a que yo pagará, el mesero nos guió a nuestra mesa y tomamos asiento.

- Nunca había visitado este lugar, es lindo. - comentó analizando el lugar.

- Me alegra que te guste, como me diste libertad de escoger me decidí por este porque es más accesible a los demás y no quiero que pagues mucho solo por una simple cena, aunque me gustaría que conocieras otro restaurante que esta por el edificio de mi apartamento, es de una señora muy linda que me trata como si fuera mi abuela y su comida es deliciosa. - dije entusiasmada.

- Que linda, pero recuerda que por mi no hay problema en ir a lugares que te gusten, no porqué usualmente vaya a lugares lujosos significa que no me gustaría ir a lugares que a ti gustan, es más vamos al restaurante que me dices. - dijo levantándose de la mesa ofreciéndome su mano.

- Pero ya estamos aquí, no es necesario. - me apresure a decir apenada.

- No te preocupes, vamos, la noche es joven. - insistió tomando mi mano, yo solo acepte y ambos salimos del lugar.

Entramos a su automóvil y nos dirigimos hacia mi apartamento pues el ya sabía mi dirección y me pareció más fácil llegar ahí e ir caminando hacia el restaurante pues quedaba muy cerca del edificio de mi apartamento. Llegamos y este estacionó su vehiculo, ambos bajamos y empezamos a caminar hacia el restaurante.

𝘍𝘭𝘢𝘮𝘦 - jaemin, jaehyun y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora