¿Qué fue lo que vivió en Londres que la hizo cerrarse a conocer amigos? Tenía miedo por eso siempre se ocultó tras la sombra de su hermano gemelo Nathaniel.
Ella amaba escribir entonces lo conoce a él Félix Graham de Vanilly y su destino empieza a c...
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Pov Lizzie
Estaba recogiendo mis libros, ansiosa por ir de compras con Chloé, tenía que comprar algo de color rosado para ayudarme a complementar con ella supongo que ella también comprará ropa después de todo siempre dice que va a mirar y termina con más bolsas en las manos que Jean se ofrece a cargarlas. Miré a mi compañera que terminaba de anotar las últimas notas de la pizarra, sus ojos azules se quedaron fijos al frente un momento y luego me vieron a mi a su lado, con el puesto despejado esperándola.
—Lo siento me atrasé. —Se disculpó y yo negué con la cabeza a lo que ella me decía, me sentía bien tener amigos con los que poder liberarme de vez en cuando.
—Tranquila yo te esperó. —Anotaba rápido sobre su cuaderno y lo cerró. Félix se giró hacia atrás mirándonos a ambas, él también tenía el escritorio recogido.
—¿Vas a escribir hoy? —Me preguntó con sus ojos verdes fijados en mí, se me había olvidado que había quedado con él.
—Lo siento. —Me llevé una mano a la cabeza y lo miré algo incómoda sin saber que hacer—. Se me olvidó por completo, quedé con Chlo ayer de ir de compras y luego a por helados. —Sé que ellos dos no se llevan bien, lo invitaría con nosotras, pero no sé si el recto Félix quisiera acompañarnos.
Ellos dos se miraron seriamente por una fracción de segundos, pensé que se iba a formar una guerra en ese mismo instante, pero para mi sorpresa él sonrió posando sus ojos verdes en los míos. Era raro, los meses que llevo conociéndolo jamás había visto esa expresión en su rostro, reinó el silencio entre nosotros por unos segundos más hasta que él decidió abrir sus labios y nos miró a ambas.
—¿Puedo acompañarlas? —Me sorprendió, bueno no solo a mí Chloé abría los ojos mirando fijamente a Félix, sin dudas ninguna de las dos se esperaba aquel comentario de mi editor autoproclamado por él.
—¿Estás bien de la cabeza Graham? —Le dijo ella con la mirada incrédula a lo que escuchaba, por un momento pensé que ambas habíamos malinterpretado aquella frase o habíamos oído mal.
—Estoy bien Chloé, simplemente quiero acompañarlas ¿Es que no puedo? —Las dos negamos con la cabeza al mismo tiempo, esto era muy extraño para ambas.
—Seguro lo haces para tratar de robarte a Lizzie la mayor parte del tiempo Graham, después de las compras vamos por helado de André ¿estás seguro que quieres ir? —Él asintió al instante, sentía que algo no estaba bien como si alguien me hubiera cambiado a mi amigo, podía esperar de alguien menos Félix que respondiera con total naturalidad ante Chloé.
—Solo quiero acompañarlas ¿Qué de malo puede haber en eso Chloé? —¡Oh! ¡La estaba llamando Chloé! ¡Jamás Félix la ha llamado así! No de esa manera, su nombre en sus labios sonaba suave y gentil, como si la apreciara, sonreí en ese momento y los miré a ambos.
—Entonces que esperamos. —Me prendí en el hombro de la rubia y la miré con una sonrisita, era obvio de lo que pasaba Félix se había enamorado de Chlo.
