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.ೃ 💐 consuelo mutuo .𓄼

Doyoung había soñado con su amado Jaehyun y sus manos recorriendo su cuerpo, murmurando en su oído lo mucho que lo amaba y lo hermoso que era, él se sonrojaba solo para plantar un suave beso en las comisuras de los labios del tigre, haciendo que este gruñera.

Se había sentido bien, no más llantos, no personas y entornos desconocidos, no un asqueroso lobo intentando violar su cuerpo.

Pero entonces abrió los ojos, estaba desorientado, había pasado de la más completa felicidad a la confusión y posteriormente a la tristeza, no había sido real.

El agua fría recorría su cuerpo, su cabello se encontraba húmedo gracias al ambiente y podía escuchar gruñidos y gritos provenientes del comedor de la posada, probablemente Jaehyun seguía ocupado en lo suyo, suspiró con el cansancio aun en su cuerpo, escuchó dos leves toques en la puerta.

— Doyoungie, ya tengo la ropa ¿vas a terminar ya? —La voz de Sungchan lo hizo despertar por completo, asintió, pero entonces cayó en cuenta de que el chico no podía verlo.

— Sí, ya salgo. —dijo en un suspiro, el tigre emitió un murmullo de acuerdo y dejó de hablar, dejando espacio al conejito para secarse y relajarse un poco, no quería presionarlo y que entrará en pánico.

El pelinegro tomó una toalla que se encontraba en una repisa y secó su cuerpo, intentaba no mirarse ya que si lo hacía, aquellos desagradables recuerdos volverían con fuerza.

Se envolvió con la toalla y entreabrió la puerta, Sungchan notó su mano extendida y le entregó la ropa, era un hanbok de tono azul celeste, rosado y detalles de un tono azul un poco más oscuro.

Se colocó la ropa con rapidez y salió del baño, allí se encontraba Sungchan mirándolo con profunda preocupación, él le dio una sonrisa leve algo forzada mientras el chico solo lo abrazó en silencio, extrañamente, Doyoung se sintió muy consolado con el abrazo.

No lloró, pero se aferró más a los brazos del menor.

En su mente, sólo estaba la figura fuerte de Jaehyun.

El castaño respiraba con dificultad, algunos mechones de cabello se pegaban a su frente mientras el sudor recorría su cuerpo, sus garras se encontraban llenas de sangre al igual que algunas partes de su ropa, se relamió los labios secos mientras observaba al hombre lobo.

Tres cuerpos se encontraban en el suelo con múltiples heridas, eran subordinados del lobo que tocó a su bebé, emitió un gruñido, tenía tantas ganas de ponerle sus garras encima a aquel hombre y desgarrarlo hasta que muriera desangrado en el suelo.

El hombre lobo sonreía con orgullo, aunque en el fondo se encontraba un poco preocupado pues el castaño no lucía cansado y él se estaba por quedar sin subordinados.

Tal vez podría ordenar a los que quedan que ataquen y él podría huir con tranquilidad.

Ese era su plan.

Se relamió los labios observando la puerta abierta, cuando Jaehyun fuera atacado inevitablemente tendría que defenderse, esa sería su oportunidad de huir.

El tigre no era tonto, notó la obvia mirada del híbrido, en pocos segundos se dio cuenta de su intención, frunció el ceño ferozmente, nunca iba a dejar que huyera ileso luego de haber lastimado a su amado sol.

El castaño arremetió contra los lobos restantes, estos ya esperaban su ataque y se defendieron con facilidad, Jaehyun era bueno en esquivar y contraatacar, era él contra unos tres lobos más, sin contar al líder del grupo.

Conejo & Tigre ★ jaedo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora