Capítulo 34

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Esa revelación la dejo helada no podía imaginarse como se sentía su amiga, la persona que quieres ya no este, es una soledad tremenda la que debía de estar sintiendo entonces comenzó a entender muchas de las cosas que actualmente estaban pasando y por eso y por su hermana decidió que valía la pena continuar con lo que ya habían comenzado, los peligros a los que se enfrentarían eran por causa de amor y eso era suficiente.

La mañana siguiente Daniela se encontraba muy pronto en casa de Emily, su cara lucia cansada y como su no hubiera dormido esa noche por esa misma razón Emily no quiso verse en el espejo porque ella seguramente se miraría peor ya que después de la llamada que tuvieron en la noche no pudo pegar el ojo.

-       ¿Y si logramos dar con la dirección de la casa de los abuelos? Le expreso la pregunta que no le permito conciliar el sueño

-       Saldríamos directamente para allá

-       ¿Qué? Mis padres se volverán  locos.

-       Descuida eso lo tengo arreglado ya con José

-       ¿ustedes  estuvieron en contacto? 

-       Este es un pueblo chico, las cosas aquí se saben inmediatamente y nos unió un poco tu causa.

Emily no entendía que quería decir con "nos unió un poco tu causa" pero tampoco le interesaba preguntar porque temía que su causa fuera Abel y  en esos momento estaba demasiado sensible como para hablar del sin llorar,  fue también ese momento que se comenzó a preguntar cuando llegaría el día que lo pudiera recordar sin ese sentimiento melancólico.

Daniela conocía perfectamente el camino,  fue cuando faltaban un par de cuadras que Emily también comenzó a reconocer  el lugar, cuando estuvieron frente a la puerta ambas se miraron expectantes, Emily hizo sonar el timbre.

-       Residencia Castro

Era la misma voz de la mujer que la recibió la primera vez

-       Disculpe quisiéramos hablar con Juan

-       ¿Quiénes son?

Le dieron sus nombres y sorprendentemente en esta ocasión no las hizo esperar y cuando la puertas se abrieron ellas cruzaron ese enorme jardín verde hasta que estuvieron en el  salón.

-       Él no se encuentra- la escucharon hablar y se giraron para poder verla

-       ¿Dónde se encuentra es muy importante poder verlo?

-       En su escuela

-       ¿Cuál escuela? ¿regreso a la preparatoria?

Con una sonrisa en los labios un poco burlona les dijo

-       No el ya no regresara ahí

-       ¿entonces? Díganos por favor donde podemos verlo

-       No es conveniente que lo vayan a buscar, además sus padres se están preocupando mucho por su seguridad que incumpliría con mi trabajo si les dijo dónde está.

Las chicas sabían que sería difícil sacarle la información a la señora pero no querían irse sin antes  hacer todo su esfuerzo.

-       ¿Usted nos reconoce verdad? ¿Sabe porque estamos aquí?

Y dio un pequeño paso hacia atrás

-       Ya las recuerdo y sé que buscan información de Hilario

-       Usted puede decirnos la dirección de los abuelos de Hilario

-       Si

Y se dirigió a un cajón donde se encontraban diversas cosas regadas entre ellas papel y lápiz y antes de comenzar a escribir les advirtió

-       No quiero que nadie se entere que yo les di la dirección ni siquiera que estuvieron aquí.

Cuando escucharon decir eso le prometieron no involucrarla,  no les importo las razones pero era evidente que quería proteger a Juan porque de lo que no se dieron cuenta es que cuando ellas se retiraron ingreso al cuarto de cámaras y borro la evidencia de que estuvieron ahí.

Se fueron con el papel en las manos como si tuvieran un tesoro de información y entonces emprendieron el camino en carretera hasta la ciudad de México, sería un poco difícil manejar hasta allá tanto porque no conocían, como por el tráfico, afortunadamente las dos podían apoyarse con la manejada o al menos se sentía más tranquilas estando las dos juntas de lo que no se percataron era que ninguna de las dos sabia de mecánica por si tenían algún inconveniente.

-       Ahora ¿qué planes tienes cuando estemos en la ciudad?

Daniela no quiso comentarle y Emily sospecho que más bien no quería asustarla antes de tiempo para que no se arrepintiera y se bajara en media carretera.

-       ¿Usaremos algo para que no nos reconozcan? Dijo mirando en los asientos traseros  dándose cuenta que esta vez no tenía ni gorras o  sudaderas enormes.

-       No tenemos que verlo cara a cara sin nada de disfraces

Parecía que  no era suficiente a ver enfrentado hace unos días Abel ahora tenía que enfrentar a Hilario, no sabía de donde iba sacar fuerzas en esta ocasión, era demasiado peligroso además.

-       ¿Sabes qué clase de persona es? 

-       Tranquila traigo cosas suficientes para defendernos

Fue cuando estuvieron en donde se suponía era el vecindario de la casa de los abuelos de Hilario que Daniela abrió la parte trasera de la camioneta y puedo observar que llevaba un par de pistolas, un chaleco anti balas los ojos de Emily no daban crédito lo que estaba mirando.

-       ¿Qué esto?

-       Bueno tu misma dijiste que Hilario es una persona muy peligrosa, yo no dejare que te pase nada- le entrego el único chaleco anti balas

-       Pero... Daniela creo que esto es demasiado, olvidemos esto y regresemos

-       Ya no podemos volver

Daniela seguía con la mano estirada para que tomara el chaleco anti balas, Emily no quería aceptar el único chaleco.

-       ¿Puedo saber de dónde tomaste todo esto?

-       Lo compre...

-       Daniela

Fue por la indecisión de Emily que la misma Daniela comenzó a colocarle el  chaleco anti balas para después ponerle una sudadera enorme, ese truco que jamás lo dejaría de usar y le asusto, tener seguido este tipo de experiencias no era bueno.

Daniela tenia secretos para Emily y uno de esos era que desde que hablaron aquella ocasión en la plaza como había comenzado a tomar clases clandestinas de uso de armas así que era ella quien tenía la ventaja o eso esperaba, a ella el maestro le mostro cosas teóricas como los diferentes tipos de calibres,  pero también le enseño a disparar y las practicas las hizo en diferentes tipos de lugares, estaba muy felices cuando el maestro comenzó a mostrarle como distinguir  un arma que estaba cargada de una que no lo estaba, en cambio Emily jamás había tocado en su vida un arma y después de lo sucedió no esperaba hacerlo pero ahí estaba con un arma entre sus pantalones y a pesar de que Daniela estuviera más entrenada le pareció que la vida de ambas estaban en peligro pero no sabía cómo parar a Daniela.


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