Aquella rubia llega a Beacon Hills dónde conoce a una persona que hará sus sentimientos volverse locos.
Odio.
Tristeza
Y amor.
Pero, eso no es todo. La rubia también hará que aquella chica se vuelva loca, la tristeza y el amor serán más fuerte que e...
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paint you
Rachel Raeken
atrapé sus labios dejando que me tomara de la cintura mientras arrojaba las llaves a la mesa.
Ella se encargó de cerrar la puerta mientras dejaba que mis piernas se colocarán en su cadera.
Ella tomo mis muslos antes de volver a prenderse de mis labios mientras nuestras lenguas jugaban
Lleve mis manos a su cuello antes de que me dejara en el sillón quitándome el vestido de un jalón.
No sé inmutó en mirar hacia las bolsas que había traído. Sus ojos estaban presos de la lujuria y el deseo.
Jadee mientras ella pasaba sus manos al rededor de mi cuerpo antes de dejar besos por mi cuello.
「 」『🌷』「 」
Reí. Tire la almohada mientras volvía a taparme con la cobija, escuché la risa de ella antes de tomarme de los pies.
—¡Suéltame Cora! —grité riendo.—
Patalee intentando soltarme pero ella me tomo de los pies antes de jalar mis piernas hacia ella
Me destape riendo.
—Vamos a desayunar. —dijo Cora con una mini sonrisa. Pude detallar su rostro, joder que linda era, pero no lo admitiría.— ¿Que pasa, quieres una foto?
Reí.
—Tengo muchísimas tía, mi galería está llena de ti. —dije con una sonrisa.—
Reí antes de sentir como juntaba sus labios con los míos en un beso corto pero cariñoso, tal vez.
Y por unos segundos tenía miedo, miedo de perderla aunque me costará aceptarlo Cora me estaba haciendo sentir varias cosas aparte del deseo.
Sentí como se me empañaron los ojos y decidí correr mi cara antes de rodear su cuello con mis brazos ocultando mis ojos.
Escuché su risa antes de que me tomara de la barbilla mientras dejaba un beso en mi nariz.
—¿Que pasa, las mañanas te ponen sentimentales? —dijo con una pequeña sonrisa burlona.—
—Te odio.
—Lo se.
Reímos. Veía algo en sus ojos que no lo había visto en nadie y temía que me ilusionara, pero sabía en qué me metía. Sabía que estaba jugando con fuego, pero estaba dispuesta a quemarme que fui cegada en esos momentos.
「 」『🌷』「 」
Me subí a sus piernas mientras ella acariciaba mi cabello con delicadeza. Pase el pincel por el dibujo mientras hacía unos pequeños detalles
Detalles que eran importantes para mí. Comencé a pintar mientras sentía como Cora abrazaba mi cintura
Reí antes de comer la fresa que me dió en la boca. La saboree, la fresa siempre sería mi fruta favorita y no me cansaría de decirlo.
—Vaya que estás obsesionada conmigo rubia, te perdono todo pero, ¿Que me dibujes? me siento importante.
Reí.
—Tal vez lo eres.—murmuré entre dientes.—
Escuché su risa. Baje la cara para tomar las pinturas, el rubor creció en mi rostro pero decidí ignorarlo.
—¿Aparte de sentimental te pones romántica rubia? No sabía que eras así. Siento que no estoy contigo rubiesita.
Sonreí. Rubiesita, la mire de reojo antes de soltar una risita mientras seguía pintando.
—¿Te acostumbras a verme gritando tu nombre? —solté.— ¿O te acostumbras a verme coqueteando?
Ella me tomo de las caderas haciéndome soltar un leve jadeo ante su tacto.
—Yo creo que en todas tus facetas. —dijo. La mire de reojo, ella se quedó callada un rato como si fuera a decir algo pero solamente calló.—
Reí.
—Creo que no has visto ni el 10 por ciento de mi otra faceta. —murmuré antes de volver a pintar.— aunque comprendo, conoces un poco. Las demás solo conocen a la típica niña que llegue siendo, angelito.
—Eres un ángel. —se quedó callada.— aunque me encanta más cuando no lo eres.
Ella beso mi hombro.
—Lo anotaré en mi diario, diré que me dijiste angel. —sonreí.— siento que prefiero rubia.—suspiré. Me quedé callada mientras sentía como acariciaba mi espalda trazando sus dedos como si formará en una figura pero decidí ignorarlo.— termine.
Puse el último detalle antes de mostrarlo. Cora sonrió observando, como lo dijo. Era ella sentada como en una sesión, su cabello caía por su espalda y lucía una blusa blanca de mangas largas.
Cora paso sus dedos por la parte de abajo donde recordé que había escrito algo.
—No se borra de la mente lo que tienes aferrado al corazón. —murmuró leyendo lo que había escrito.—¿De dónde sacaste eso?
—Es de un libro.
Ella sonrió.
—¿Y, porque lo escribiste en mi pintura?
Me encogí de hombros. No quería darle importancia pero estaba que me moría de nervios
—Casualidad.
Ella soltó una risa mirándome. Joder, sus malditos ojos me volvían loca y ver ese pequeño brillo me hacía sentir querida.
「 」『🌷』「 」
—¿Que compraste?
Mire a Cora. Ella señaló las bolsas que había en la mesa, no recordaba.
—Son compras que hice ayer. —contesté acercándome.— Ropa, joyería o perfumes.
—¿Todo eso compraste?
—Dior, Victoria's Secret, Gucci, etc. —dije mirando las bolsas señalando las bolsas.—
Me acerque sacando las cosas. Deje la ropa en mi sala mientras saco mis joyerías.
Sonreí. Me fui al baño dejando las velas con olor en las esquinas antes de regresar
Estaba acomodando mis perfumes hasta que sentí un frío objeto en mi cuello
Una leve sonrisa se formó en mis labios al sentir el aliento de Cora sobre mi cuello
—¿Siempre te tensas cuando se te acercan? —paso sus manos por mi cuello.— ¿Te gusta?
Me acerque al espejo observando la jadeita que yacía en mi cuello. Era como una reliquia, estaba llena de diamante y era algo seguro. Tenía un objeto de color rojo que estaba rodeado de plata.
—Joder, me quedé sin palabras. —murmuré. La mire.— ¿Cuánto costó? Cora esto se nota que vale millones. ¿Es para mí?
Una sonrisa ladeada se formó en su rostro.
—Si, es para ti rubia. —me miro.— y no, millones no, billones. —corrigió.— ¿Te gusta?
—Me encanta.
Atrapé sus labios. Mis manos se dirigieron a su cuello en un beso lleno de deseo.
Por este tipo de cosas confundida horriblemente las cosas, solo somos sexo.
