Capítulo 46

706 106 8
                                    

Se mantuvo callado todo el camino con la vista puesta en la ventana, no quería ver a Samuel, mucho menos hablar con él, le había tocado demasiado la conversación con Fargan. Estaba claro que Samuel no lo amaba, no llegaría nunca a amarlo ¿entonces porque molestarse en seguir luchando?

-Oye- Rubén salió de sus pensamientos para mirar al chico a su lado- ¿Todo bien?

-Sí, sí, solo...solo estoy cansado- presto atención al camino frunciendo el ceño- Por acá no es mi departamento

-Lo sé

-¡Estamos yendo para tu casa!

-También lo se

-¡Samuel! ¡Te dije que quería ir a mi departamento!

-Tenemos cosas que hablar

-¡¿Ahora quieres hablar?! ¡Luego de ignorarme por días!

-Necesitaba poner mis pensamientos en orden

-¡Una mierda! ¡Para el coche! - trato de abrir la puerta, pero estaba cerrada- ¡Samuel!

-Ya casi llegamos

El peliblanco gruñó antes de dejarse caer en el asiento con los brazos cruzados, estaba enojado, pero más que eso estaba frustrado, no necesitaba una conversación con Samuel justo ahora, no luego de tener su cabeza tan confundida y su corazón dolido

Cuando notó que el coche se detuvo se bajó de manera rápida para entrar a la casa, Samuel lo siguió de cerca, notando que entró a la cocina buscando a alguien

-Merli no está

-¿Dónde está? Le pediré dinero para el taxi y me iré- Sam se quedó callado mirando la encimera de la cocina- ¿Sabes qué? Da igual, pediré un taxi que acepte tarjeta

-¡¿Puedes parar un segundo?! ¡Quiero hablar!

-¡¿De qué?! Dejaste las cosas muy claras cuando me dejaste en el aeropuerto

Sam suspiro antes de apoyarse en la encimera, Rubén hizo lo mismo, acomodándose a su lado, pero un poco lejos de él. El silencio inundó el lugar y por un instante Rub sintió un vacío en el pecho

-¿Porque lo hiciste?

-No quiero hacerte daño

-¿Y porque lo harías?

-Porque se lo que sientes por mí...- Rub bajo la cabeza- Y no puedo sentir lo mismo por ti

Tomo aire para aguantar las lágrimas mientras asintió despacio con una sonrisa sarcástica, sin decir nada se alejó de la encima dispuesto a irse, pero la mano de Sam detuvo su brazo

-Te lo advertí, no me puedo enamorar de ti

-¿Porque? ¿Por tu miedo de quedarte solo? Pues te informo algo Samuel ¡Así va a ser si no te abres de una puta vez y dejas de jugar al gilipollas follandote a todos!

-¡Yo dejé en claro que lo nuestro era puro sexo!

-¡Lo sé! ¡Me lo repetías todo el tiempo! ¡Y aun así me enamoré de ti!

-Lo siento

-No, no me pidas perdón, yo fui el imbécil que se enamoró y pensó por un segundo que podías sentir lo mismo

-Rubén...

-Es que por un minuto pensé que era el indicado para por fin hacer que tu corazón volviera a amar, pero...- limpio sus lágrimas sonriendo- No, no lo soy

-Todo es muy complicado

-Lo complicado eres tú Samuel, que prefieres seguir con tu vida fácil, follandote a todo el mundo, trabajando como un esclavo y no abriéndote un minuto a lo que sientes

-¡Te dije que no te enamores! ¡Era la única regla que no podía romper!

-¡En el corazón no se manda joder! Tal vez para ti es fácil porque solo es sexo, pero para mí dejo de serlo

Sam se alejó dándole la espalda, Rubén aprovecho el momento para respirar, sus sollozos eran cada vez más fuerte y lo que menos quería era mostrarse débil

-Sabes que no te puedo dar eso

-Lo sé, aunque fui lo suficientemente estúpido como para pensar que en Francia lo hiciste- Rubén soltó una risa sarcástica- Esa noche de verdad pensé que sentías algo por mí, pero todo fue una maldita ilusión

-¡Joder Rubén! ¡No soy el malo!

-No, no lo eres, te lo dije antes y te lo vuelvo a repetir, nunca ha sido culpa de quien hieren, de quién llora, sino culpa del que se enamora y yo fui el imbécil que me enamoré de ti

-¿Tanto como para besarte con alguien más?

-¡No juegues esa carta!

-¡Lo vi yo mismo Rubén! ¡Agradece que no le rompí la cara por...

-¡¿Porque?! ¿Porque lo harías si no sientes nada por mí? - Rubén tomo aire soltándolo de golpe- Puedo hacer lo que me salga de los huevos porque no soy de tu propiedad

-Pero dices que estás enamorado de mi ¿no? ¿Entonces porque lo haces?

-¡Porque quiero respirar en paz! ¡Porque quiero que no me duele más! ¡Quiero sentirme amado por alguien por una vez! ¡Y me encantaría poder gritarte que te odio, pero no puedo porque en realidad te amo! - Sam se sorprendió por lo último- Así que sí, me besé con Fargan, pero lo hice porque al menos el sí pensó en mí, si está enamorado de mí y...

-¡Basta!- soltó un suspiro- Quería hablar contigo porque pensaba que lo que sentí en Francia era una maldita broma, que no sentías nada por mí y solo estaba alucinando

-Pues no, no lo estabas, estoy enamorado de ti desde hace meses, pero no te lo dije por la misma razón que me vienes diciendo desde que llegué

-Te dije que la persona que se lance al abismo por mi le espera un gran golpe contra el suelo porque no llevaría paracaídas

-Sí, y me estampe tan duro que duele- Rubén se limpió las lágrimas- Quiero irme

-Estamos hablando...

-Hablar está de más, lo dicho dicho esta Samuel- Rub apartó la mirada- Por favor no me hagas más daño, si al menos me aprecias, déjame ir

Sam asintió despacio antes de alejarse saliendo del lugar y subiendo las escaleras dejando completamente solo a Rubén que al notar que estaba solo se apoyó en el sofá de la sala y respiro varias veces para calmarse. Luego de unos minutos salió de la casa, mandándole un mensaje a sus amigos para que lo esperarán en su departamento

Por otra parte, Sam se encerró en su habitación, sentándose en la cama y gritando de la frustración mientras ocultaba su rostro entre sus manos. Tenía un fuerte sentimiento de querer gritar, de golpear algo, no quería dejar ir a Rubén, no quería terminar todo con él, pero sabía que no podía darle lo que quería, no con el miedo constante de perderlo

Oficialmente esa era la peor noche de los dos, no solo porque se sentían vacíos, con el corazón roto y frustrados, sino porque al final, ninguno se dijo adiós.

||Please, daddy|| 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora