||Please, daddy|| 🔞

Capítulo 44

Samuel fue el primero en despertar gracias al sonido de su móvil, se estiró aún medio adormilado hasta tomarlo con su mano y contestar la llamada

-¿Hola?

-¿Recién despiertas? ¿Y ese milagro? Nunca duermes más de las nueve

Alejó el móvil de su oreja para fijarse de la hora, eran casi medio día y su vuelo de regreso salía a las cuatro de la tarde, ni si quiera habían almorzado. Se despertó lentamente hasta notar un brazo alrededor de él, miró a la persona a su lado, encontrándose con un Rubén completamente dormido

-¡Mierda!- Sam aguanto su grito al notar como Rub se movía en la cama

-¿Sam? ¿Pasa algo? -Luzu parecía preocupado al otro lado de la línea

-N...no, todo está bien- suspiró rendido- ¿Para qué me llamabas?

-Oh si, quería pedirte que cuando veas a Rub le digas que lo estoy llamando, su móvil me sale apagado

-Le diré lo más pronto posible- dirigió su mirada al peliblanco- Nos vemos al regresar, adiós

-Bien, adiós gruñón

Cortó la llamada antes de tratar de deslizarse lejos de los brazos de Rubén, lo hizo lentamente tomando la mano del chico y quitándola de encima suyo, aunque eso no evitó que se quedará por unos minutos disfrutando el rostro tranquilo y sonriente que tenía mientras dormía

-Joder, no puede estar pasando- Sam tapó su rostro frustrado al estar liberado

-¿Sam?-se quedó quieto al escuchar la voz adormilada del chico- ¿Todo bien?

-Emm...si, todo bien- Rub hizo un sonidito ocultando su cara en la almohada- Debemos arreglar todo, nuestro vuelo sale en unas horas, además que Luzu quiere que lo llames

-Hay que dormir un poco más, estoy muerto

-Ya dormiste demasiado, arriba

-No veía que te quejarás en la noche bobo- Rub río rodando en la cama- Voy al baño, ya regresó

Sam asintió despacio escuchando la puerta del baño cerrarse, gruñó tirándose a la cama en gesto dramático. Había dormido con Rubén, eso no solo era ir contra su única regla irrompible, sino además darle ilusiones que no podía cumplir al chico, y eso le molestaba demasiado

Por otra parte, Rubén al cerrar la puerta del baño no pudo evitar soltar un grito emocionado que cubrió con su boca, no podía negar que estaba feliz, Samuel no solo había dormido con él, sino que se le notaba tan en paz y feliz cuando lo hizo que ahora si podía pensar que el chico tenía sentimientos por él.

Pero la felicidad de Rub no duró mucho, la comida fue muy incómoda, más que todo por el silencio y la manera en que Samuel lo ignoraba mirando su móvil. Esto no cambio cuando después subieron al avión y el pelinegro se puso los audífonos a saber para que

Podía entender que Sam se sintiera raro luego de lo que pasó, pero tampoco debía ser tan frío con él, no lo había obligado a dormir juntos, mucho menos a tener sentimientos por él

-Sam...

-Luzu dijo que vendría por ti, yo tengo que ir a ver unos asuntos, así que nos vemos luego- no lo miro al hablar simplemente camino lejos de él

-¡Hey! ¡Espera! ¿Te vas sin más?

-Sí, ya te dije que tengo cosas que hacer, hablamos luego

-¡Samuel!

El pelinegro lo ignoro caminando hacia afuera del aeropuerto, no quería hacerle caso, sabía que si lo hacía terminarían hablando de todo lo que sintieron en ese viaje, y era lo que menos quería. Rubén, por su parte, se quedó sin decir nada viendo como el chico se iba, no entendía su actitud, mucho menos por qué parecía querer escapar de él con urgencia

-¡Hey Rub!- dirigió su mirada a su hermano- ¿Todo bien?

-Sí, sí, todo bien, solo...- Rub suspiro- Olvídalo

-Bueno, genial, porque tengo una propuesta para ti

Rub miro con el ceño fruncido a su hermano, el cual tenía una sonrisa de oreja a oreja. Pero ahora lo único que le interesa a Rubén era saber que le pasaba a Samuel y eso no saldría de su cabeza ni con la mejor noticia del mundo

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-¡Espera, espera!- Alex negó con la cabeza poniéndose recto en el sofá- ¿Me estás diciendo que Luzu te dijo para organizar su boda?

-¿Enserio Alex? ¿De todo lo que contó eso es lo único a lo que le hiciste caso? - el más pequeño se encogió de hombros haciendo que Mangel pusiera los ojos en blanco- ¿Y desde ahí no hablas con Samuel?

-Nop, no me responde los mensajes, ni las llamadas, y cuando está en la empresa parece tan ocupado que siempre tiene algún pendiente que lo espera

-Bueno, tal vez está viendo los últimos papeleos para los clientes de Francia

-¡Claro que no Alex! Yo estuve ahí, ese contrato se cerró- Rub suspiro- Creo que es por el viaje, algo causó que hizo que todo cambiará

-No creo que sea tanto así

-Sentimos diferente el tener sexo juntos, dormí con él, incluso podría decir que conoció a mi madre como si fuera mi novio

-Fue una cena que no estaba planeada, a cualquiera le pasa

-No es cierto, solo le pasa a Rubén

Rubius le sacó el dedo medio a su amigo antes de acostarse en el hombro de Mangel rendido, justo en ese momento vio salir a Nieves de la cocina con una bandeja con helado

-Dicen que sirve para los corazones rotos

-No quiero pasar mi tarde del sábado comiendo helado y deprimiéndome

-Es lo mejor que puedes hacer considerando que Samuel te cortó- Rub le lanzó un cojín a Alex

-A ver, puede que tenga miedo, tal vez le cuesta admitir que tiene sentimientos por ti, eso es todo

-¿Entonces porque huye? Debería demostrarlos, no huir como un cobarde

-Rub ¿acaso tú no estás haciendo lo mismo?

El peliblanco miro de reojo a Mangel antes de hacer berrinche, era cierto que el también negó sus sentimientos por bastante tiempo, pero al final los acepto, aunque claro, no se los había dicho a Samuel

-Entonces ¿qué tengo que hacer? ¿Esperar?

-Sí, o decirle tú lo que sientes- Nieves acarició su hombro- Si estás tan seguro de que siente algo por ti, tal vez ya es hora

-Concuerdo con Nieves

-Yo solo quiero drama-Rubén le tiro otro cojín ganándose la risa de Alex

-Lo pensaré, pero...de verdad no pasare mi noche del sábado en casa ¿podemos salir a algún lugar?

-¿A dónde quieres ir?

-Hay un bar nuevo que abrió en el centro de la ciudad, podemos ir a verlo, es algo tranquilo, poca música, ambiente relajado

-No creo que...

-¡Venga Mangel! Quiero salir con mis amigos sin pensar tanto, disfrutarlo, al menos un día- el pelinegro bufo

-Bien, pero a algo tranquilo ¿o no Nieves?

-Exacto, algo tranquilo

Alex levantó las manos en señal de celebración haciendo reír a Rubén, al menos podía olvidarse un rato de sus problemas de corazón con sus amigos