—Me sorprende volver a verte de nuevo —Emory dio un brinco tras escuchar esa voz masculina, visualizo de quien se trataba y decidió ignorarlo — ¿Te gustó la vida Kook?
Emory continuo sin decir palabra mientras acomodaba la mesa para el té, su padre tenía algo importante que decirle. Sus notas habían mejorado y siempre que pasaba eso, Eric tenía una sorpresa para su única y preciada hija.
—Es de mala educación no responder a tus mayores, ¿Sabías?
—Es de mala educación entrar en el patio de una persona sin su permiso, ¿Sabías? —Uso la misma táctica — vete antes de que llame a la policía.
—Te ves tan linda enojada —Se acercó hacía ella, pero se alejo cuando ella lo amenazó con una cuchara — chica ruda.
—¡Vete!
—No me iré hasta que me perdones —Su rostro se volvió serio — fui un idiota y dije cosas que te lastimaron.
JJ necesitaba ser sincero y arreglar las cosas con ella, estos tres días sin verla se dio cuenta lo mucho que la extrañaba y la necesitaba en su vida.
—Ese día tuve un día de mierda y solo me desquite contigo...
—No necesito excusas.
—Si, si la necesitas —Respondio seguro de sus palabras — por qué se que me necesitas de la misma forma en la que yo te necesito a ti, y lo sabes.
—No te necesito —Mintio la castaña aún sin bajar la cuchara.
—¿Puedo pedirte algo? —Ella lo miro molesta pero no se negó — antes de que me des una respuesta, necesito que veas algo y sabras a qué me refiero.
JJ le dijo que guardara silencio, tomo de la mano de Emory y se adentraron en la casa de JJ. Apenas entraron en la sala, la blanquecina noto al hombre dormido profundamente en el sofa rodeado de cervezas. Supongo que a eso se refería con que ese día había tenido un mal día, pero aún seguía sin ser una buena excusa para la forma tan cruel en la que el la había tratado frente a muchas personas.