III
Devastado, desolado, decepcionado, confundido y err... cualquier otra palabra que pueda evocar un sentimiento similar...
Todo eso lo estaba sintiendo Shinichiro en ese preciso momento—o eso decía—y la razón era muy sencilla, incluso tenía nombre: Wakasa Imaushi—otra vez—.
Creyó que después de su "disculpa pública" todo iba a cambiar y así fue, solo que no en la dirección en la que Shinichiro pensaba.
En vez de lograr acercarse más parecía que había logrado que el rubio lo evitará con más ganas, incluso había intentado buscarlo en el gimnasio la ahora de salida pero no tuvo suerte y encima de esto se había auto-adjudicado dos problemas más.
Primero sus compañeros no dejaban de hacerle preguntas para tratar de averiguar a quien iba dirigida su disculpa pero no importaba cuántas excusas dijera ellos simplemente no le creían ni una y ya se estaba cansando del asunto, su única solución temporal fue directamente ignorar cada pregunta que le hacían al respecto.
Pero lo peor de todo—y que sinceramente no pensó bien—fue que también le terminaron dando una advertencia, se había librado del castigo por ahora pero aún así tenía que llevar a un tutor para que hable con el director.
Afortunadamente tenía al mejor abuelo del mundo y después de un breve regaño prometió guardar el secreto de la advertencia de sus padres con la condición de que él mismo tendría que decirles cuando esté listo.
¡Y lo haría!
Eventualmente.
Tal vez se tome su dulce tiempo, pero algún día.
Y volviendo a nuestro tema de interés...
Era muy bastante probable que desde una perspectiva externa Shinichiro se viera como un acosador en potencia tratando de asechar a uno de sus compañeros—ya hasta le había empezado a dar igual rechazar a los demás con tal de tener una oportunidad de acercarse al rubio—pero la verdad era que no podía evitar sentirse como cachorrito regañado.
Es decir, se disculpó con el.
¿Por qué parecía que se había alejado más? ¿qué había hecho mal? ¿acaso lo odiaba?
Quería hacerle esas preguntas y muchas más.
— ¿Por qué me estás evitando?
Por esta razón, ese mismo día se había puesto como objetivo obtener respuestas.
— ¡Ya deja de seguirme!
Solo que sus tácticas para obtenerlas eran dignas de un verdadero acosador—o en su defecto, de un reportero de programa de chismes—.
No se había separado ni le había quitado la mirada de encima a su compañero durante todo el día, por lo que en cuanto vio que el rubio estaba dispuesto a huir del aula a la hora del almuerzo, no se quedó atrás y salió disparado a toda prisa detrás de él, sin siquiera darle oportunidad a sus compañeros de levantarse de sus asientos.
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¿Study Group?
FanfictionLa preparatoria Shujin, clasificada por algunos como la peor de todas o simplemente referida como un nido de delincuentes por otros. Hanagaki Takemichi tiene solo dos objetivos al entrar ahí. Sobrevivir y mejorar sus notas, para lograrlo cree que lo...