Separados

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La pelinegra se dejó caer de espaldas sobre la cama de su novio.


-Hiro, tengo sueño.

-Pues duerme.


GoGo se arropó con las cobijas del chico, inhalando profundo ese olor a ositos de goma y colonia de hombre que tanto le fascinaba.


-Hiro, no me gusta.-Se quejó ella.


El chico dejó su Megabot en el escritorio y se volvió hacia su novia.


-¿Y qué se supone que yo debo hacer al respecto?-Preguntó, con voz dulce y pícara.


Leiko señalo a el pedazo de cama vació y abrió los brazos.


-Ven y abrázame.-Ordenó.


El chico hizo como se le ordenó.

Y dos minutos más tarde, ambos estaban dormidos, abrazados y con sonrisas plasmadas en el rostro.


(...)


Honey se removió incómoda en su asiento.

Se mordió las uñas antes de finalmente enfrentar cara a cara al resto de su equipo.


-Chicos... urm... Fred y yo... pues... verán...

-Nos vamos a ir a Inglaterra. Es decir, ya no hay Grandes Héroes, Honey ya terminó la universidad, papá quiere que vaya a visitar a mis abuelos. No tenemos razón para quedarnos en San Fransokyo, ¿O sí?-La interrumpió su esposo.


Leiko frunció el ceño.


-Pero, ¿Por qué...?

-¡Yo también me voy!-Interrumpió Wasabi.


Todas las miradas se clavaron en él.


-Es decir... Abi murió aquí, ya terminé mi universidad, la vida me odia, no hay más súper héroes. No le veo ningún sentido lógico a el porque permanecer aquí.


Hiro sintió como se le encogió el estómago.


-Pero, ¡Chicos!-Se quejó.-¿Qué hay de nosotros?


Honey se encogió de hombros.


-Lo siento, de verdad. Pero... lo siento, chicos.-Y se echó a llorar.


Fred abrazó a su chica.


-Es... es la verdad. Lo sentimos, Hamada.-Se disculpó Wasabi.


Los ojos de ambos pelinegros se llenaron de lágrimas y GoGo empezó a llorar.

No soportaba la idea de perder a su mejor amiga, Honey Lemon, para siempre.

Hiro también quería hacerlo, quería llorar y hacerles saber que estaban mal. Pero no podía. No. Tenía que ser fuerte. Si no por él o por Tadashi lo sería por GoGo.

La abrazó y empezó a susurrar cosas en su oído.


-¿Cuá-Cuándo se van?-Preguntó, consternado.

-En una semana.-Respondió Honey, monótona.-Lo siento, Lei.


Leiko fingió una sonrisa y asintió.


-Bueno, hasta entonces, pasaremos el tiempo juntos. ¿Verdad?-Ofreció.

-¡Por supuesto! Cada gota de tiempo que tengamos la exprimiremos hasta el máximo.-Aceptó Fred.


Y eso hicieron.


¡El unicornio del vecino vomito arcoíris y lloró helado gracias a ustedes!

¡Muchas gracias por los 1K+ de votos! ¡Es enserio! ¡Las amo!

Y como soy mala con ustedes a pesar de que ustedes han sido buenas conmigo, les tengo un pre-view de algo que pasará en un capítulo próximo.

¡Hey, Baymax! ¡Enséñales el borrador!


Yo soy Tadashi, Tadashi Hamada. ¿Quiénes son ustedes?


Jejetl, con eso tendrán para aguantarse otras dos semanas.

Besos robóticos congelados:

-Valery

P.S. ¡Ya llegamos a los 13K+ views! ¡Las amo!


#Here4you ||HiroGo|| #TheWattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora