No tan simple vida

Año 14

-El profesor Flitwitch es un tirano -se queja Annethe al recostarse como un bulto de papas en el extenso y cómodo sofá en la sala común de Hufflepuff, con sus manos latentes y un dolor de cabeza es como termina esa jornada de entusiasmo obsesivo del intelectual profesor.

Que resultó ser un erudito, investigador y curioso nato.

Por eso es Ravenclaw.

Tanto Dorothea como el resto se ríe al notarla con poco entusiasmo, tan distinto a su emoción del viernes, al descubrir que no era inepta por su incapacidad de aceptar la magia como un todo por su mentalidad, sino un problema de fuerza y potencia que no sabía tenía.

-Vamos no puede ser tan malo -asegura Susan con un libro de pociones en mano, tanto Wen como Su afirman en distintos tonos.

-Eso dile a mi pobre varita – se queja la nacida muggle alzando dicho objeto peligroso -la pobre casi saca chispas –

-Estas exagerando – Dorothea agrega comenzando a adaptarse a su forma de ser.

-No ...no lo estoy, estoy segura de que esto está en contra del trato infantil, algún tipo de abuso de ese estilo – bufa en un tono sarcástico la pobre chica explotada, recomponiéndose en un estado más decente ante la mirada del resto.

Hay chicos que entran, otros que salen poco interesados en el tema de platica.

Aunque son conocidos por sus movimientos en los primeros meses...poco a poco los rumores se van supliendo por otros, algo bueno considerando el asunto de Rowan, el salvar a una Slytherin del bosque prohibido y otras cosas que se han transformado a asuntos casi novelescos.

Ahora solo el rumor de una de séptimo embarazada, una pelea de gatas en Gryffindor y un escabroso rumor sobre un Gryffindor siendo hijo de un asesino muggle.

Siempre hay algo nuevo.

-No hay ningún abuso infantil – acusa Wang burlona -y si lo hay ...estoy seguro el profesor Flitwitch no lo aplica ...lo creería de Snape -bufa mirando su propia tarea -estoy segura esto es el pago de algo que hicimos –

-Considerando que lo ignoras todo el tiempo y cuestionas – Asegura Susan con una mirada pasible.

-Es para que recuerde que no olvido lo de Rowan – excusa Wang con dignidad – no porque el resto lo olvide, quiere decir que este bien –

- ¡Yo te apoyo! – Wen alza su mano con facilidad, Annethe se ríe porque les dijo el mensaje que el jueves le dio el pocionista, una actitud que no ha escalado hasta su jefa de casa pero que el profesor ha notado.

-Y bien ... ¿ya terminaron su tarea? – pregunta la nacida muggle.

-En eso estamos -suspira negando las tres niñas en cuestión ...con excepción de Dorothea cuyo ensayo no era tan largo, las demás solo suspira en negaciones distintas ...incluso Susan tomo parte de esa llamada de atención por cierta contestación en la última clase.

-Como tú ya la terminaste – se queja la oriental.

- ¡Hola! ... ¿¡cómo están mis novatas favoritas!? – Tonks se echa sobre el hombro de la pobre Hamilton que seguía en el sofá solitaria, mirando con diversión a las que casi saltan del susto.

-Estamos haciendo tarea – acusa Su con un cruzar de brazos, fulminando a quien solo se rie.

-Vamos ...no seas sentida Su, no es mi culpa que el entrenador no quiera que apoyes en nuestro primer partido – excusa Tonks al alzar sus manos.

-A Oliver si lo dejo Bill ... ¿¡porque a mí no!? – Wang se queja ante la mirada del resto que se mantiene en silencio en distintos grados de diversión y curiosidad.