Una infección llegó al mundo, todo estaba cada vez peor, infectados por todas partes que estaban acabando con la raza humana, pero hay un campus en Corea del sur qué está dispuesto a acabar con la infección.
Yoongi fue reclutado como alumno de prime...
Yoongi casi cayó al suelo del fuerte golpe que le dio Chaewon.
- ¿Y eso por qué fue? - preguntó mientras que se tocaba la parte del rostro donde había llegado el golpe.
- Jungkook está en la mierda por tu estupidez, si escuchaste todo no deberías haber preguntado imbecil - refutó enojada y de brazos cruzados.
- No sabía que hacer - dijo simple, típico en el.
- Podrías haberlo pensado mejor, si tanto lo conoces me imagino que sabías de sus problemas de autoestima - y al ver la cara de Yoongi supo que sí sabía - ¿Y aún así hiciste todo este circo? Jungkook lleva años intentando que lo vean como una persona y no por como se ve, arruinaste todo - y desapareció.
Bien, quizá Chaewon tenía razón, sabía de los problemas que tenía Jungkook con respecto a su persona, no se valoraba como tal y creía que nunca sería suficiente para nadie, pero no pueden culparlo, para Yoongi es la primera vez que se siente de esa manera, estaba asustado.
Su familia era su prioridad y que de un momento a otro eso haya cambiado le dio miedo, por eso se había negado a sentir ese tipo de cosas por Jungkook.
Y al haber reaccionado por escuchar esa conversación se dio cuenta de lo mal que había hecho al alejarse sin dar explicaciones, llevaba casi 3 semanas sin hablarle y como evitaba verlo no se dio cuenta de como estaba.
Entró al cuarto color durazno, aprovechando que Chaewon le dijo que Jungkook se había quedado dormido para poder verlo aunque sea de lejos.
Cerró la puerta tras entrar y se acercó a Jungkook, en su rostro habían varias lágrimas secas, su suave piel se veía agrietada, sus ojos se veían hinchados a pesar de estar cerrados, sus labios se veían resecos y pálidos, su cabello desordenado sin esa coleta qué acostumbraba a ver y su ropa desalineada.
Jungkook siempre se había preocupado de verse bonito porque le gustaba sentirse aunque sea un poco de esa manera, se cuidaba la piel, hacía ejercicio, comía bien, vestía siempre con un increíble sentido de la moda y su cabello siempre estaba bien peinado, pero el Jungkook qué conoció con el de ahora eran muy diferentes.
Se había despreocupado totalmente de su apariencia y su hermosa sonrisa ya no estaba, se había ido y todo por su culpa.
No aguantando más el verlo así salió para buscar a Taehyung, era su mejor amigo, el sabría como ayudarlo a arreglar todo ese embrollo.
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Nayeon se encontraba caminando hacia la habitación de su hermano, por fin había podido librarse de sus obligaciones para ver como estaba.
Abrió la puerta y lo encontró durmiendo todo destrozado, corrió hacia el para poder despertarlo y preguntarle que le había sucedido.
- Hermanito ¿Qué te sucedió? - le preguntó al verlo abrir los ojos con preocupación en el rostro.
- N-no es nada - ignoró sus sentimientos como siempre para no molestar.
