Padres

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El aire de la colina era maravilloso, traía consigo diversos aromas. El viento acariciando su piel, era un regalo, y la luz cálida del sol del atardecer, era mágica. Habían pasado ya dos meses desde que Chifuyu había partido en su viaje, por el mundo, con Kazutora y Takuya, un joven omega de clase elfo, bastante rápido. Baji había insistido que vinera con él, para que sirviera en asistirle, y si era muy útil.

En ese momento se encontraba solos ellos dos, Kazutora se había ido a realizar un importante trabajo, que le había pedido su padre. Era raro, Taiju no solía pedirle nada a Kazutora.

El sol se estaba ocultado ya, y la noche cubría todo con su manto, cuando Kazutora llegó, pero no venía solo.

— Padre — Chifuyu se mostró sorprendido de ver a su padre, además de que se veía cansado. Se acercó a él, pero al hacerlo noto un cambio, la gran aura de su padre no se sentía. El brillo en los ojos de Chifuyu se extinguió al comprenderlo.

— Solo tienes uno minutos Chifuyu, tengo que llevarlo al otro mundo.

— ¿Qué pasó? — no podía creerlo, su padre era el ser más fuerte de todos.

— Me perdonarás — Draken permaneció calmado, como siempre, sin importar la situación.

— Cuando no lo he hecho.

— Hace unos meses, conocí a un omega — el corazón de Chifuyu sintió un piquete, y su rostro lo exteriorizo, por que Draken solto una risa nasal — Lo lamento, pero tu madre y yo no nos vemos desde tu nacimiento.

— No te juzgo, es solo la sorpresa. Así que ese omega es bastante fuerte para matarte, ¿Qué clase de Yokai es?, ¿o es otra deidad?

Draken negó con la cabeza.

— Es un humano.

Eso si descolocó más Chifuyu.

— Desde la primera vez que lo vi, sentí una fuerte conexión, que me llevaba y me atraía más a él. Además de que es hermoso. Tal belleza, llamo la atención de Kizaki.

— El dios de la guerra.

— Manjiro no quería estar con Kisaki, pero el lo iba a obligar, yo no podía permitir eso.

—¿Y decidiste pelear?

— Tenemos un hijo.

— ¿Qué? — la sangre se le bajo hasta la punta de los dedos de los pies.

— Es por eso que estoy aquí, necesito que lo cuides por mí.

— No.

《Ese omega y esa cosa deben morir, por traerte desgracia — Chifuyu estaba enojado. No podía creer que su padre, el gran rey, haya sucumbido ante un omega humano.

— Chifuyu es tu sangre, no te pido que lo cries, solo que vigiles que este bien.

Chifuyu seguía negando con la cabeza.

— Te amo hijo, y se que harás lo correcto, me tengo que ir.

El cuerpo de Draken desapareció en un instante en un luz blanca, y el cielo, que dejaba ver todas las estrellas se nubló, y una lluvia tan tranquila como silenciosa se dejó caer.

— ¿Estás bien Chifuyu?

El mencionado levanto la vista y se topo con Kazutora, parecía afligido. Estaba triste por él.

— ¿Hacía dónde me debo dirigir?

— ¿Depende?

— ¿De qué?

— Si harás una locura o una buena acción.

— Estoy bien.

— Eso dices, pero siento tu aura rodearme, están intensa y fuerte, que muy apenas me puedo mantener aquí.

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