INFINITY

Lazos Espirituales.

Sanzu bebía tranquilamente su té, cuando sintió como todo su templo temblo, los gritos no se hicieron esperar, y pronto el grito de uno de sus sirviente le alertó.

— ¡Nos atacan!, su divinad, por favor resguardarse.

Sanzu hizo caso omiso a las peticiones de aquel sirviente, y se encaminó hacia el bullicio. ¿Quien en su sano juicio se atrevía a irrumpir en su hogar?, lo destrozaria, y le daría una lección.

Antes de que Sanzu pudiera llegar a donde se supone estaba el revuelo, las puertas de su saloncito fueron derribadas,y junto con él cayeron al suelo.

Con un nube de polvo por aquel brusco movimiento Chifuyu entró, observando todo a su alrededor, hasta encontrarse con Sanzu, que aun estaba tirado en el piso.

Cuando la mirada de Sanzu choco con la de Chifuyu, sintió una corriente eléctrica recorrerle el cuerpo. Eso ojos del omega frente a él brillaban. Debía parecer aterrador, pero a la vez le ofreció hermoso, y eso lo enfureció.

— ¿Quién rayos eres?, y ¿como osas interrumpir en mi palacio?

— Tu eres Sanzu — Chifuyu bufo — esperaba a alguien más bello.

Aquel comentario no fue para nada del agrado de la divinidad de la belleza. Rápido se puso de pie, y encaro a su enemigo.

— ¿Cómo te atreves?

Chifuyu totalmente ajeno al tono del omega, lo sujeto fuertemente del cuello, su mirada fijá en el, trasmitiendo el miedo y el respeto que debía tener por él.

— Chifuyu Deidad del los Cielos, antiguamente conocido por ser el hijo del rey de los yokais, un placer.

Los ojos de Sanzu se abrieron, ahora entendía la situación. Intento librarse del fuerte agarre de Chifuyu pero no lo lograba.

— ¿Qué es lo que quiere?, ¿Qué no sabes que atacar a otra deidad está prohibido?

— Así — el tono de Chifuyu siempre manteniéndose claro, mostrando su superarídad — Entonces dime, que pasa cuando una deidad daña a otra.

— Es obvio niño tonto es castigado.

Chifuyu solto a Sanzu.

— Entonces supongo que tu debes ser castigado. Ya que has atacado a una, y maldecido a una.

— De que hablas, estas loco.

— Al maldecir al la familia del gran Draken. Nunca pensante que parte de su decendencia podría convertirse en divinidades. Fue un error, pero lo pasaré por alto si me dices como romperla.

— No hay forma.

— ¡Vamos! — el grito de Chifuyu fue acompañado con un trueno, alarmando más  a Sanzu.

— Te estoy diciendo la verdad.

— ¿Debe haber algo que pueda hacer?

— Podrías matar a todos los descendiente de Akane.

— Esa no es una opción.

Significa matar a humanos, matar a Emma, él no lo haría.

— Que tal si te mato a ti, ¿funcionaria?

El rostro de Sanzu se lleno de terror.

— ¿Cuáles el miedo?, renaceras no es así.

Chifuyu levanto su espada.

— Espera, creo recordar otra cosa.

— Habla.

— Cortando los lazos ancestrales. Bueno en si es solo una teoría, no se si funcione.