—¡Estoy tan cansado! —divagó entre suspiros y quejidos entrando por aquella puerta de ese departamente casi oscuro ya que la luz del día se estaba por ir en unos cuantos minutos.
El castaño con las pocas fuerzas que le quedaban en sus piernas caminó unos pasos largos hasta llegar a la sala pequeña del fondo y dejar caer todo su cuerpo en el sillon color gris de la habitación.
Estos últimos días aquel cabellos marrones estaba tan ajetreado, eran los días restantes del semestre en su universidad y un trabajo de presidente era bastante pesado. "Beomgyu ¿Sabes que tengo que hacer aquí?" "Gyu... El profesor Lee te está llamando" "Joven Choi, mañana necesito que esté presente a las siete de la mañana" "¡Choi Beomgyu!" "¡¡Choi Beomgyu!!" "¡¡CHOI BEOMGYU!!" y mil y un estudiantes más buscando por el.
Sus clases estaban por terminar junto con el. Había descuidado su alimentación, dormía pocas horas en las noches y hacia todos sus pendientes como presidente escolar además de sus proyectos y trabajos de cada materia.
Solo que este día especificamente fue el más duro. Al día siguente tenía un evento de fin de cursos en su universidad... Era más que nada una pequeña feria en la que varios estudiantes tenían la oportunidad de establecer sus puesto, ya sea vendiendo sus propios productos, haciendo pequeños trabajos y otros solo de forma recreativa.
Ya que es el presidente escolar es el que hace una gran parte de la organicación, recurrian por dudas, corregir cosas, verificar si todo estuviese bien. Había iniciado con esa actividad desde, aproximadamente, las siete de la mañana... Ahora son casi las ocho de la noche y su cuerpo se encontraba bastante debil, sus brazos dolían y sus ojos se cerraron en cuanto tocó el suave terciopelo de aquel colchón.
(...)
—Mmm... No me contesta —musitó el pelinegro preocupado
Ya había salido del trabajo, eran las nueve de la noche y se estaba por ir a casa en donde esperaba encontrar a su compañero de cuarto o en su defecto su ahora pareja. Choi Yeonjun había concluido con sus estudios universitarios hace aproximadamente seis mese, no le fue complicado conseguir un trabajo estable en un negocio pequeño que le pagaban bien.
Así fue como se conocieron
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Ya eran las tres de la tarde, la hora de salida para la mayoría de los estudiantes solo que no para Choi. Después de que las clases terminarán había otro trabajo que tenía que realizar que lo mantuvo ocupado por una hora. Pasó este tiempo y aún no podía irse a casa a tomar un descanso aunque está palabra no estuviese incluida en su diccionario.
La mesa en la que se encontraba trabajando estaba llena de carteles, plumones de todos colores desparramados por toda la superficie, su libreta de ideas a un lado suyo, unas botellas de agua vacías y una barrita como su única comida en el día. En dos semanas más sería el baile escolar de fin de cursos, tenía que realizar carteles promocionales por toda la institución para así llamar la atención de los estudiantes por eso es que los estaba haciendo con suma perfección y concentración. Faltaban quince días más para hacer unos cuantos y apartar de esos imprimir unas cuantas copias. Beomgyu es alguien bastante dedicado y responsable en cuanto a sus trabajos, siendo la razón de porque no sabe cómo tomar un descanso.
