Estaciones, el dragón y el caballero

5.2K 531 242
                                    

La historia del príncipe, el caballero y el dragón no se había apartado de mi mente, Lucy me había mostrado libros y películas que tenían que ver con eso, ya que según ella la mejor fuente de conocimiento humano eran las películas y la internet. Lucy incluso me mostró historias con temáticas diferentes, pero aún no entendía por qué yo tendría que ser el caballero ¿el caballero no tendría que ser aquella persona destinada a Demian?, ¿Aquella persona que el destino había puesto en su camino?

La nieve se había derretido poco a poco hasta que las primeras flores comenzaron a brotar en las delgadas ramas de los árboles, había pasado todo ese tiempo y mi mente aún estaba confusa. En todo ese tiempo solo pensaba en Demian, sin embargo, yo sabía que él ya me había olvidado a mí, que pasaba su tiempo alegre con las personas que lo rodeaban, yo ya no ocupaba lugar en ello.

—Lucy... — le pregunte a la chica que veía concentrada un programa de cocina.

—Toma nota Tom, quiero esa pizza mañana... ¿dijiste algo? — me preguntó apartando la mirada de la televisión.

— ¿Realmente soy el caballero?

— ¿Sigues pensando en eso? No te lo conté para que le dieras tantas vueltas ¿Cuántas veces tenemos esta conversación al día?

— Pero... yo no puedo ser el caballero. Tal vez soy... tal vez soy el villano que le pide ayuda a la bruja para engatusar, tal vez moriré y nadie me recordara ¿Soy el villano? — no quería ser el villano, tenía miedo de serlo, tenía miedo de robarle la felicidad a Demian.

— ¿Qué es lo que te gusta de Demian?

—Bueno... no lo sé, simplemente sé que quiero estar junto a él, es como la luz de luna, hay algo que te obliga a mirarlo siempre y aunque lo hagas mil veces siempre termina impresionándote.

—Entonces no eres el villano — me sonrió — el villano solo quiere al protagonista por conveniencia, tus sentimientos son puros. Seth son cuentos de hadas no la realidad no le des más vueltas.

Quería pensar que eran cuentos de hadas, pero la idea de brujas, ángeles, demonios y cientos de criaturas existiendo eran cuentos de hadas para los humanos, tal vez los cuentos de hadas no eran del todo falsos.

—Tal vez... yo soy el dragón, tal vez como el dragón tengo ese deseo enfermizo de tener a Demian solo para mí, solo que para el soy un estorbo. Tal vez si me quedo con vendrá una persona y me destruirá para estar con Demian.

—Bueno... al menos el dragón es amigo de la bruja — Lucy soltó una carcajada.

— ¿El dragón y el príncipe pueden ser amigos?, ¿Pueden tener sentimientos de... amor?

—No lo sé... ¿la bruja puede tener un final feliz? Esas son preguntas que tenemos que responder por nosotros mismos, y quedándote aquí no lograras nada Seth, tu cuento de hadas no va a escribirse solo.

—Pero... si él no quiere estar conmigo ¿Qué haré entonces? Mi corazón no lo soportará...

—Tu corazón... — dijo pensativa — Seth en este momento es lo único que tienes, cuídalo mucho por favor, los corazones son valioso, tan valioso que nadie, ni siquiera un demonio, se atrevería a aceptar uno como paga, pero también son frágiles y pueden romperse de la manera más ridícula, se puede sanar... pero en ocasiones el corazón nunca vuelve a ser igual. — me explicó.

—Ya veo... — dije asustado — voy a...

— ¿A?

—A dar un paseo... — respondí algo apenado mientras buscaba una chaqueta, ya que, aunque era primavera la brisa primaveral me seguía haciendo sentir frío.

Recuperando mis alasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora