Sangre Y Fuego ( Bakugo Y TN)

CAP 12

Ya había pasado casi una semana desde que _____ empezó el servicio comunitario. Ayudaba con muchas cosas, pero no a detener villanos. Ese día la habían llamado para ayudar con el cuidado de niños pequeños que apenas controlaban sus dones. Ella estaba llegando al lugar, una guardería especial para niños con quirks, cuando una voz familiar la hizo voltear. Era Bakugo, que había querido acompañarla. Él sabía que ella se sentía triste por no poder hacer el examen de la licencia provisional, y quería animarla.

-_____ -dijo Bakugo-. ¿Estás lista?

- ¡Sí, lo estoy! -dijo _____ emocionada-. Gracias por venir conmigo.

-No hay de qué -dijo Bakugo con calma-. Quiero estar contigo y quiero ver cómo te va con los niños.

Ella se alegró de tenerlo a su lado, y le dio un beso. Juntos entraron a la guardería, y se encontraron con otros héroes que también hacían el servicio comunitario. Eran héroes que habían cometido algún error o falta, y que tenían que redimirse ayudando a la sociedad. Algunos eran conocidos de _____, y otros no.

-Hola, _____ -dijeron los héroes al verla llegar-. ¿Qué tal?

-Hola, amigos -dijo ella sonríen y saludando con la mano-. Bien, gracias, el es Bakugo, mi novio - tomo a el rubio del brazo, acercándolo a ellos-. Él vino a acompañarme. Es un gran héroe. Tiene la licencia provisional, y es muy fuerte.

Bakugo los veía con una mirada aterradora, no le caían bien los héroes que hacían el servicio comunitario, y no quería estar ahí, pues no tenía buenos recuerdos de cuando el también cuido a unos niños, pero quería estar con _____, y ayudarla en lo que pudiera. Además, la mayoría eran chicos y a él no le agradaba pensar que _____ estaba rodeada de ellos.

-Hola -dijo Bakugo con desagrado-. ¿Qué hacen aquí?

-Hacemos el servicio comunitario -dijeron los héroes-. Igual que _____.

-¿Y por qué? -preguntó Bakugo con molestia-. ¿Qué hicieron?

Los héroes se sintieron incómodos, y le contaron sus motivos. Algunos habían actuado sin permiso, otros habían causado daños colaterales, otros habían sido imprudentes o irresponsables... Todos habían cometido algún error o falta, y tenían que pagar por ello, pero Bakugo solo los miró con desprecio.

-Son unos inútiles -dijo Bakugo con desagrado-. No merecen ser héroes. Deberían renunciar.

Los héroes se sintieron ofendidos por como el rubio les hablaba y miraba, era grocero y los ponía incómodos.

-No eres nadie para juzgarnos -dijo uno de los héroes-. Tú también puedes cometer errores. No eres el mejor. Hay muchos mejores que tú.

-No le hagan caso a Bakugo -_____ intervino para calmar la situación. -. Él solo es así por su carácter. Es un buen chico en el fondo.

Lo alejó de los chicos para poder hablar con el.

-No seas tan grosero con los héroes -dijo ella a Bakugo susurrando-. Ellos solo están tratando de obtener su licencia, tratalos bien.

Bakugo se quedó callado, y no dijo nada más. Sabía que _____ tenía razón, y que él había sido muy duro con los héroes. Pero no quería admitirlo, ni pedir disculpas.

Entonces llegaron los niños con su maestra. Eran unos veinte niños, de entre cuatro y seis años, que tenían quirks muy variados y difíciles de controlar. Algunos tenían quirks de fuego, otros de hielo, otros de electricidad, otros de telequinesis... Todos eran inquietos y problemáticos, y hacían lo que querían.

- Pongan atención niños -dijo la maestra-. Hoy tenemos unos invitados especiales. Son unos héroes que vienen a ayudarnos. Quiero que los saluden y que se porten bien con ellos.