_____ despertó con una sensación de calidez y paz. Sentía los brazos de Bakugo abrazándola por la espalda, protegiéndola y acariciándola. Se giró y observó el rostro del chico, que aún dormía profundamente. Pensó en lo hermoso que era, con sus ojos rojos, su cabello rubio y sus cicatrices. Pensó en lo mucho que lo amaba, y en lo agradecida que estaba por tenerlo a su lado.
Se acercó a él y le tomó las mejillas con sus manos. Le dio un beso suave en los labios, despertándolo con ternura. Él abrió los ojos y la miró con amor. La abrazó y la recostó en su pecho, sintiendo su corazón latir.
-Buenos días, _____ -le dijo él, con una voz ronca.
-Buenos días, Bakugo -le dijo ella, con una voz dulce.
Se saludaron con amor, mirándose a los ojos y sonriendo.
-¿Qué te crees? -le dijo él con arrogancia y amor-. ¿Cómo me besas así? ¿No te da vergüenza?
-No -le dijo ella con burla-. ¿Por qué me daría vergüenza? Eres mi novio. Y me gustas mucho.
-Pues a mí también me gustas mucho -le dijo él con picardía-. Pero eso no significa que puedas hacer lo que quieras conmigo.
-¿Ah, no? -le dijo ella-. ¿Y qué significa entonces?
-Significa que yo también puedo hacer lo que quiera contigo -le dijo él en un tono travieso y se volvieron a besar, con más pasión y deseo. Se olvidaron del mundo y solo se concentraron en el otro. Se besaron hasta que les faltó el aire y ambos se vieron sonriendo.
Ella se lvantó de la cama, pues debía cambiarse y prepararse para la escuela. Era un nuevo día, y tenía que cumplir con sus obligaciones, pero antes de ponerse de pie Bakugo la sostuvo de la cintura, abrazandola.
-Bakugo, tengo que levantarme -le dijo ella con seriedad-. Tengo que cambiarme y prepararme para la escuela.
Bakugo no quería que se fuera. Quería quedarse con ella en la cama, abrazándola y besándola. La veía con una mirada tranquila, invitándola a quedarse.
-No te vayas -le dijo él con ternura, mirándola con amor-. Quédate conmigo. No tenemos prisa.
-No podemos quedarnos -le dijo ella con nervios-. Tenemos que ir a la escuela. Tenemos clases y deberes. El profesor Aizawa se enojará si llegamos tarde.
-No me importa el profesor Aizawa, ni las clases, ni los deberes -le dijo él haciendo un berrinche, que hacía reír a la chica-. Lo único que me importa eres tú. Quiero pasar más tiempo contigo.
-Eres muy dulce, Bakugo -le dijo ella sonriéndole, mientras acariciaba su cabello-. Pero también muy irresponsable. Debemos ser buenos estudiantes y buenos héroes. Podemos pasar tiempo juntos después de la escuela.
-Está bien -le dijo él con decepción, incorporándose para sentarse en la cama-. Pero al menos dame un beso de despedida. Quiero sentir tus labios una vez más antes de irme.
_____ dejo salir una pequeña risa, pues la actitud infantil de Bakugo era adorable, lo tomo de las mejillas y lo beso. Un beso largo y profundo, lleno de amor y promesa. Un beso que los hacía sentir vivos y felices.
-Te quiero, Bakugo -le dijo ella, al separarse.
-Yo también te quiero, _____ -le dijo él, al abrazarla.
Ella se fue a su habitación y se cambió y se preparó para la escuela. Se puso su uniforme y se peinó su cabello. Se miró al espejo y se sonrió. Se sentía hermosa y segura de sí misma.
Bakugo también se cambió y se preparó para la escuela. Se puso su uniforme y se arregló su cabello. Se miró al espejo y se sonrió. Se sentía guapo y confiado en sí mismo.
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Sangre Y Fuego ( Bakugo Y TN)
De TodoTN es una chica misteriosa que llega a la Academia U.A., la escuela más prestigiosa para los que quieren ser héroes. Ella tiene el don de controlar la sangre, lo que le permite hacerse cortes en el cuerpo, utilizando su sangre para crear armas y esc...