Parte 142: Varias amenazas

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Jhin se encontraba en el palacio, o taller, de la llamada Creadora. Ella, al igual que Shi se encontraban escuchando la última obra musical del artista.

Cabe a destacar que la Maestra de las Sombras se hallaba" sumamente tranquila y calmada mientras escuchaba la melodía.

"¿Y bien? ¿Qué te parece?"

"Una serenata bastante apropiada..."

"........"

"Seguro que es una chica afortunada... solo espero que la mantengas viva por mucho tiempo, Khada Jhin..."

"No me fijo en ese tipo de barreras banales, ¿sabe?"

"Muy propio de ti"

"Creadora... no quiero interrumpir vuestro reencuentro, ¿qué le parece si..."

"Por supuesto, eres libre de iniciar el segundo acto"

"Perfecto..."

El asesino se acercó a la llamada Creadora, cogiendo una caja de madera de un color oscuro y que desprendía una fuerte energía maligna.

No temió en hacer un par de malabares con ella antes de marcharse, dejando a ambas mujeres solas y con su taza de té.

"Ese chico es tan prometedor como el día en que le conocí"

"¿Aún le ves como a un niño?"

"No, aún me veo como una joven..."

"Tus implantes son muy buenos... aunque mi belleza es más natural..."

"Cuanta humildad, Shi... tan parecida a cuando acudiste a mí años atrás, buscando que te creara un artilugio en específico..."

"........"

"¿Te importa refrescarme la memoria un poco?"

"¿Síndrome de tu avanzada edad?"

"No, simplemente tu voz es más armoniosa... ¿por qué no te dedicaste al canto?"

"Porque eso no hubiese sido útil para mis padres"

"........"

"Ysdra, la Guardiana de la Caja... no tú copia inferior, aclaro... habló sobre el poder que ocultaba la antigua región de Helia..."

"........"

"Las ahora llamadas Islas de las Sombras... con sus terribles espectros y criaturas de maligno poder... un poder desperdiciado..."

"Un poder que ansiabas"

"Se me ocurrió que si atrapaba un poco de ese poder... combinado con el arte de las sombras... podrían surgir cosas interesantes..."

"Ahí es donde surge mi frustración, Shi"

"........"

"Creé un artefacto tan único, sofisticado, capaz de... encerrar esa niebla, esas almas... evitando la corrupción de su magia..."

"........"

"Y tú no la usaste..."

"Cambié e opinión"

"Una obra de arte... y no la usaste..."

"El Maestro Zed encontró métodos mejores de aprovechar las Islas de las Sombras..."

"........"

"Como por ejemplo, encontrar a uno de sus más macabros espectros y que fuese su aliado por voluntad propia... algo más duradero..."

"La ofensa que me causaste perdura hasta día de hoy"

"........"

"Y ahora que ese joven aprendiz tuyo no está adherido a su arma darkin... desataré el mal de Helia... mataré a tu gente... y me haré con esa guadaña..."

"Vas a quedar decepcionada"

"........"

"Esa guadaña está atravesando problemas..."

"¿Me tomas por necia?" - le preguntó sonriente - "Eso ya lo sabía"

Paralelamente, en los desiertos de Shurima es que se encontraba Malzahar, el Profeta del Vacío. Y estaba acompañado de Zed.

Sí, al ninja no le agradaba demasiado el desierto de Shurima.

"Odio este lugar..."

"¿Nunca has estado en Shurima?"

"Hace unos años... buscando a una mocosa..."

"Qué irónico, ahora has vuelto para solventar los problemas de tu mocoso"

"........"

"No me mires así, tengo que descargar el odio que te tengo de alguna manera... no letal..."

"Pues has matado el ambiente"

"¿Zed ha hecho un chiste?"

En cuanto Zed dio un par de pasos para adentrarse en las ruinas a las que Malzahar le llevó, se percató que este no le seguía.

"¿Trampa?"

"No, él está aquí, pero es agresivo"

"Eres un hechicero..."

"Lo sé"

Una figura se abalanzó salvajemente contra el ninja, quien recibió un poderoso zarpazo antes de zafarse de su adversario con sus artes sombrías.

Delante suya había una especie de ser humanoide, combinado con dotes de rata y coyote.

"Grgrrr... ¿quién eres tú?"

"Zed... ¿tú eres Ahazu?"

"Grgrr... has cometido un error al venir a esta..."

"Rhaast te necesita"

"Rha... ¿Rhaast?"

La Sombra de ZedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora