Louis -3-

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Ese día pintó sobre la manada un manto de dolor y sufrimiento, Louis no fue el único que perdió alguien. Un total de 34 miembros muertos, mujeres, ancianos, algunos niños.
Fue un día que nadie ha podido olvidar jamás, su manada sufrió muchos ataques, saqueos y guerras, pero nunca el número de muertos fue tan alto.

Louis perdió a su compañera momentos antes de aparearse, como puede ser el destino así de cruel?
Por qué darle en una bandeja de flores y colores a un ser tan maravilloso para luego dejar que se lo arrebaten de esa forma? Dejar que muera en sus brazos.

Nadie más que él y sus padres supieron que esa joven muerta era la primer compañera alfa de Louis.

Desde ese día el joven lobo vive un duelo por su alma gemela que no cesa.
El sabe, es consciente que al ser un alfa cada 30 años en algún lugar del mundo el destino hace nacer una pareja humana nueva para él. Y también por cosas del mismo maldito destino nunca se encuentran y cada una de esas parejas a la edad de 30 años y pocos días mueren vacías por dentro al no reunirse con su pareja alfa.

Louis ha vivido toda su vida con dolor, con rabia, con enojo, odiando al destino con todo su ser.
Se siente el asesino de un total de 8 parejas que han nacido para él cómo la hermosa Jenna y han muerto por él también.
Cada vez que se acerca el mes de su cumpleaños cada 30 años sabe que en algún lugar hay una pobre alma buscándolo sin saberlo, anhelando encontrar algo que llene ese vacío que comienza a crecer dentro suyo.
Dentro de sus cuerpos crece una especie de agujero negro que consume todo hasta que mueren, así, sin nada. Toda la luz que crean en su semana de cumpleaños número 30 explota sin tener adonde ir.

La atormentada mente del lobo alfa estalla de dolor pensando en miles de escenarios diferentes, en rostros y sonrisas que van a dejar de existir por su culpa.

Muchos de esos cumpleaños cada 30 años los pasó encerrado apropósito, para no conocer a nadie más que a Jenna.

Vivió años enemistado con su lobo.

Años metido, hundido en la depresión.

Pero como para todo ser eterno solo fueron etapas, como también tuvo etapas llenas de felicidad, como cada vez que nacía un hermano nuevo, como cuando se recibió de cada carrera que eligió estudiar, como cuando su lobo se siente bien y disfrutan corriendo en el bosque.

Nunca le contó a nadie lo que pasó aquella vez. Nunca dijo el nombre de esa hermosa humana en voz alta. Nunca se atrevió a conectar emocionalmente con nadie aparte de sus padres y hermanos.

Seguramente muchos miembros de la manada lo ven como alguien introvertido, vergonzoso o tímido. Nadie sabe que es un alfa, ya que esos meses después de la muerte de Jenna, completamente perdido y dañado, conoció una bruja que le proporciona mensualmente una bebida que suprime su aroma. Tampoco corre en forma de lobo con nadie que no sean sus padres o hermanos.
Su lobo le reclama no comportarse como alfa pero cuando la "crisis de alfa" es muy fuerte solo necesita que su padre lo domine así el poder alfa que tiene en su ser baja y sólo se comporta como uno más de la manada.
Ningún miembro de su familia está de acuerdo con lo que hace, pero a Louis no le importa, es su decisión.

Actualidad
-cómo estás cariño?
Mamá me sorprende en la cocina sirviendome café.

-buenos días mamá, estoy bien, hoy tengo mucho trabajo que hacer.

Mentira, no estoy bien, el maldito mes de agosto empieza hoy. Pero hago mi mejor esfuerzo para no demostrar lo mucho que me sigue afectando mi cumpleaños cada 30 años.

-Louis

-no ma. No empieces por favor. Qué vas a cocinar para almorzar?

Mamá me mira con esos ojazos llenos de dolor por mi y tengo que cambiarle de tema

-no cocinaré hoy cariño, tengo trabajo

Un escalofrío comienza a recorrer lentamente mi cuerpo

-pero le pedí a tu hermano que cocine para ti
Largo aire que tenia retenido.

Mamá sonríe.
-no te preocupes cariño, nosotros te cuidamos.

-debería ser al revés mamá.

-para nada. Nos cuidamos entre todos. Tus hermanos te aman Louis.
Mamá me da un beso en la mejilla

-me voy cariño, recuerda estar tranquilo, el mes pasará rápido

Mama sale al jardin donde la escucho hablar con Eric y quedo solo en la cocina, suspirando.
Otro agosto, otra persona que morirá por mi.
Mi lobo acostado lloriquea con sus patas bajo su hocico.