Louis -3-

14

-necesitas ayuda hijo?

Mamá me sorprende en la cocina preparando comida para mi pareja. Tengo una bandeja con 2 tazas de café, hice dandwiches de carne asada que habia guadada y omelettes.

-mamá

-si, yo.
Sonríe con ternura, debo ser un desastre tembloroso
-Que haces?

-preparé algo para comer

-tu solo?

Asiento mirando hacia otro lado
-podrías decirme si está bien? Busqué en Internet como hacer los omelettes y usé carne que había guardada, y

-está bien cariño, relájate.
Me parece que todo está bien. No te preocupes.

-mamá yo, él, hoy

-si Louis, lo sé, papá me contó

Voy a abrazarla porque no puedo hablar. Sus brazos me dan cariño.
-estoy tan feliz hijo. Tan contenta y feliz, va a salir todo bien tú solo tienes que ser feliz.

Me limpio las lágrimas y seco mis manos en mi pantalón.
-voy a ir a darle de comer a mi pareja.
Le digo con una sonrisa.
Mamá aplaude despacio y sonríe dando pequeños saltos. -ve hijo, disfruta esto.

Tomo la bandeja, a la que mamá agrego servilletas y camino nervioso hasta el cuarto.
Toc toc toc
-Adam?

-pasa Louis.
Aaah su voz diciendo mi nombre me llena de alegría.

-permiso.
Dejo la bandeja en la mesita de noche y antes de decirle lo que preparé me toma de la mano y me lleva a la cama.
-vamos a comer mirando algo en la tele, encontré una película de comedia. Ponte cómodo.

Suelta mi mano y por un segundo creí que no sería capaz de dejarlo ir. Con algo de nervios subo de un lado de la cama y apaga la luz, lleva la bandeja con él hasta acomodarse junto a mi.

-ahora si. Mm que rico, tengo tanta hambre

Veo con placer y orgullo como bebe su café y muerde un sándwich. Mi lobo salta y ladra feliz.

No puedo dejar de mirarlo, es hermoso, tiene el cabello despeinado de un color azul eléctrico, una nariz perfecta y labios rojos e hinchados. Su rostro es masculino pero lindo.
Lame sus labios y me sorprende tronando sus dedos en mi cara.
-Louis, no has comido nada y tampoco estás mirando la película

-oh, si, ahora como
Tomo mi café y miro de reojo que me mira pero fijo mis ojos en él televisor. Mis manos tiemblan al agarrar los cubiertos para cortar el omelette y una mano suya se posa sobre una mía.
-estás bien Louis?

-si

-yo sé que está pasando algo que no entiendo

-ehh, yo

-cuéntame

-sigue comiendo Adam

-ya comí todo, tu no has comido nada aún