—Disfrute su bebida, señor —Yoongi por fin había entregado el último pedido de ese tiempo, sabe que pueden llegar más, pero quiere que al menos sus compañeros de trabajo puedan atender mientras él se toma un poco más de tiempo para tomarse un ligero y merecido descanso.
Camino en dirección a la barra de bebidas necesitaba un respiro, el calor en el casino estaba comenzando a alborotarse, y por supuesto detesta cuando la ropa empezaba a pegársele a su cuerpo debido al sudor, quizás esa era la única desventaja de usar todo el tiempo el uniforme, pero debía soportarlo, unas horas más y podrá liberarse del trabajo, claro mientras el jefe no exija turnos extras para la noche, después de todo no era una novedad que la mayor parte de los ingresos para el casino fueran por la noche, pero por el momento deseaba que los miles de turistas decidieran mejor ir y pasear por las calles de la ciudad en lugar de darles una visita a los casinos.
Estaba a pocos pasos de la barra de bebidas, cuando una voz conocida lo hizo detenerse.
—¡Min Yoongi! —el mencionado se tenso un poco al escuchar esa voz, era su jefe, el señor Wood, más temprano que tarde Yoongi se giro sobre sus talones para encarar a su jefe quien caminaba en su dirección mientras secaba con frenesí su amplia frente con un pañuelo de tela de color negro—. Por fin te encuentro —la voz levemente rasposa y congestionada le hablo—, diablos... pensé que no habías venido a trabajar —soltó una risa nerviosa.
—No puedo permitirme faltar, señor —Yoongi apretó ligeramente sus labios, el señor Wood siempre es exigente con la puntualidad y también con la limpieza, el orden es su mayor hazaña cuando se trata del casino—, ¿necesita algo, señor?
—Sí... —dijo en voz baja para sí mismo y miro por detrás de su espalda por unos momentos antes de volver a pasar aquel pañuelo por sobre su frente, sudaba, Yoongi podía notarlo, pero creía que era una exageración, porque empezaba a hacer calor, pero el señor Wood sudaba como si hubiera corrido un maratón de ochenta kilómetros y fuera el primer lugar—, sí —volvió a regresar su mirada a Yoongi—, necesito que lleves una botella de whisky, que el barman te entregue cuatro vasos de cristal con hielo dentro, que el hielo y asegúrate de que la botella no pase de los años noventa ¿quieres? —de nuevo miro hacia atrás.
Yoongi no pudo evitar mirar en la misma dirección, ¿por qué el señor Wood estaba tan nervioso? No lo entendía, pero parecía que tenía la urgencia de ir hacia allí o quizás de escaparse.
—Entendido, señor —menciono Yoongi—, enseguida lo llevaré a su oficina.
—¿Qué? —el señor Wood volvió a mirarlo—. No, mierda no —negó rotundamente—. Llévalo a la oficina de York.
Las cejas de Yoongi se alzaron en sorpresa, ¿la oficina de York? Ningún mesero se atrevía a ir a la oficina de York, siempre que realizaban pedidos a esa oficina, quien los llevaba siempre eran los sirvientes personales del jefe, York es el dueño del casino y el hotel, es quien da los salarios y se encarga de que siempre haya el dinero suficiente para las apuestas, y también de otros asuntos más, y claro nadie le había visto la cara, porque el señor Wood se encargaba de contratar al personal.
—Pero —Yoongi quería recordarle al señor Wood la importancia y por supuesto innecesaria visita que él debía hacer, porque claro no estaba dispuesto a desobedecer las reglas, mucho menos si con eso se trataba de una forma de despedirlo, enojar a York significaba el despido inmediato.
—Sin peros —dijo de inmediato el señor Wood—, llévale la bebida, las cosas se están poniendo tensas allá y necesito que lleves eso, es un encargo, el señor York esta de acuerdo con que uno del personal se lo entregue, así que descuida, no es como si fuera a pasarte algo por entregar la bebida.
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Paradise Street ||JimSu||
Fanfiction"Oh, minino, el amor es para los débiles, apostar... es cosa de valientes." Las Vegas, Nevada. Peché Mortel, es el nombre del casino en donde Min Yoongi, un doncel que siempre fue irrespetado por ser el hijo de una prostituta, trabaja como mesero, e...