Capitulo 12

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Nervioso, Warren pisó de un pie al otro mientras esperaba en el estacionamiento del vivero Hashimoto Nursery el sábado por la mañana. Él y Tanner habían acordado reunirse allí a las 10, pero como Warren estaba tan nervioso, llegó demasiado temprano. Apenas eran las 9:45 y ya había estado allí al menos 10 minutos, la mayor parte del cual había pasado mirando las diversas cosas que se exhibían fuera de la tienda, como canteros elevados y casas de jardín.

Lo racional hubiera sido entrar, pero ¡¿y si llegaba Tanner y al no encontrarlo se iba de nuevo?!

Aunque eso probablemente no sucedería, ¿verdad? Tanner esperaría, o llamaría o algo así, ¿verdad?

Warren tragó nerviosamente, jugueteando con uno de sus brazaletes. ¿Qué estaba mal con él? ¿Por qué estaba tan nervioso? Solo se estaba reuniendo con su jefe para ir a comprar plantas, no es como si fuera una cita ni nada.

Warren nunca había tenido una cita verdadera. Muy bien, una vez había ido a jugar bolos con un chico llamado Antonio que lo había invitado a salir poco después de mudarse a Los Ángeles, pero el inglés de Warren era tan malo en ese entonces que no habían podido comunicarse correctamente, así que la cita había estado llena de silencios incómodos. Antonio nunca más lo volvió a llamar después de eso, y Warren tampoco había intentado comunicarse con él.

Con un suspiro, Warren vio a una pareja joven que salía del vivero con algunas plantas en cajas cuales guardaban en la cajuela de su auto mientras reían y charlaban alegremente sobre algo que Warren no podía entender porque estaba demasiado lejos.
La mujer cerró el baúl después de que su esposo o novio colocara la última caja adentro, antes de que él se inclinara para besarla. Fue un beso rápido seguido de una brillante sonrisa antes de que ambos subieran al auto y se fueran, con Warren observándolos hasta mucho después de que el auto desapareciera en el tráfico.

¿Por qué no podía tener una relación así? ¿Por qué no podía tener a alguien con quien comprar plantas al azar en una perezosa mañana de sábado? ¿Alguien a quien pudiera besar al azar antes de subirse al auto?

La imaginación hiperactiva de Warren le presentó una hermosa imagen de él y Tristan mientras salían del vivero con una planta de tomate que pusieron en el auto antes de besarse y...

¡No, espera! ¡Fantasía equivocada! ¡Debería ser Jack! Sí, por supuesto. Jack era la persona con la que quería comprar plantas y besar y, y, y... ¡Y su nombre era señor Tanner, no Tristan! ¿Qué le pasaba?

Warren gimió internamente. Se sentía tan patético. ¿Estaba realmente tan solo que se enamoró del primer hombre que fue amable con él?
¡No quería que le gustara Tanner! Tanner era solo un pervertido al azar que se acostaba con cualquiera de todos modos. Porque en serio, ¿qué clase de persona le llevaba a casa a un extraño al azar de la calle? Claramente, Tanner era solo un jugador de todos modos; así que no era lo que quería Warren. Warren quería un chico fiel y romántico que estuviera listo para una relación seria, no uno que se acostara con cualquiera.

Sí, exactamente, quería a alguien como Jack.

Espera...

Sin embargo, antes de que Warren lograra repensar eso, el Audi del señor Tanner entró en el estacionamiento, conduciendo hasta donde estaba parado Warren, cerca de la entrada.

Después de estacionar el auto, Tanner se quitó las gafas de sol que dejó en algún lugar y salió con una sonrisa brillante.

—¡Buenos días!— saludó alegremente. Llevaba unos jeans desgastados y una camiseta con un avión y algo de matemáticas. Lo hacía parecer una persona completamente diferente. ¿Cómo era este el mismo hombre que Warren veía en la oficina todos los días? Lucía tan joven y casual. Para nada como el aterrador jefe que Warren había pensado que era hasta hace poco.

Pornstar (lgbt, Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora