Querido Ranpo,
El día que tuvimos nuestro primer encuentro, juré odiar todo lo que significaba ser tú. La sola presencia de tu ser en mi mente me enloquecía y en las noches en vela por el terrible insomnio que me atormenta solo podía imaginar cómo se sentirían las dulces pulsaciones de tu corazón detenerse lentamente en mis manos, mientras seguías atrapado en el diabólico libro que acabaría con tu vida y con mis pesadillas.
Descubrir que un asesino posee corazón debería ser el más grande logro de tu carrera como detective. Con el libro en la mano podía escuchar sus conversaciones y sentir los latidos de sus corazones y fue cuando supe que no tienes una habilidad, un movimiento de mi parte y estarías acabado, por supuesto que tenía todo planeado para tu asesinato ¿Qué te hace pensar que en tantos años una mente tan retorcida como la mía no pensaría en cómo superar una tan pura como la tuya?. El asesinato perfecto, morirían dentro del libro y no habría cadáver de evidencia, sangre o testigos, nada de nada, solo un libro.
Mi corazón latió en arrepentimiento cuando supe de tu inexistente habilidad ¿cómo asesinar a alguien tan naturalmente talentoso? Así que no pude. Solo dejé que resolvieras el caso más simple que he escrito en un libro, un clásico que hasta el más imbécil carente de materia gris podría resolver, no soy bueno, no soy justo y había una trampa demasiado simple escondida en lo más vistoso, tan bien escondida y tan simple que no la notaste. Era tu fin.
Estaba listo para desaparecer de esa habilitación antes de que salieras del libro y decidieras arrestarme, no pasó ninguna de las dos cosas. No me fui y no me arrestaste.
Me pediste mi número y nos hicimos rivales, pasamos tiempo juntos y nos hicimos amigos, comenzamos a salir y me enamoré de ti. No creas que he traicionado tu amistad, intenté no amarte. Te juro que lo hice.
"Lo estoy idealisando" pensé, que quizá como un amor primerizo me estaba cegando ante una persona maravillosa sin dudas, pero idealisanda por una mente destrozada por la soledad que años fue compañera. Así que anoté y observé todos tus defectos como ser humano, eres infantil, flojo, desconsiderado, egoísta, apático muchas veces, pensé "una decepción sería la mejor opción". Pero solo pensaba en que podría vivir con ellos y como algunos te hacían adorable y de nuevo fracasé.
Dejó de ser una guerra de intelecto para convertirse en una de sentimientos contra mi mismo tratando de borrar tu nombre de mi corazón.
Vi como mi corazón decidía ya no vivir en mi pecho, ya no llamarse mío porque conoció manos que lo trataron con calidez, con tanta dulzura que se hizo adicto a ese tipo de droga aún sabiendo que lo destruiría. Intenté por todos los medios quitarlo de tus cálidas y suaves manos, pero se aferraba a ti ya decidido a morir en ellas.
Querido Ranpo, no he querido traicionar tu amistad con sentimientos no bienvenidos, pero me desbordé en lágrima tantas noches soñando con una imposible cita, con una sonrisa dedicada a mi y cargada de sentimientos que no he necesitado en mi vida o que creí no hacerlo hasta que te conocí, el dolor de mi pecho sin corazón en cada roce de manos accidental, en cada risa, en cada salida, en ojos brillantes por un manuscrito de mi para ti, en ti mostrándome la ciudad, en ti sintiéndote como un hogar, en besos que jamás me darás y en abrazados que solo puedo imaginar, en millones de citas que hay en mi mente y tú diciéndome amigo cuando lo que quiero en el fondo de este podrido ser, es ser más que eso.
¡Hazle daño! Rechaza y bota ese corazón que se aferra a tus manos con esperanza, reniega en contra de este amor que me atormenta.
Voy a vivir el dolor en carne viva y esperar con paciencia a que ese traidor corazón vuelva donde pertenece. Lo espérate mientras olvido tus manos tocando las mías o tu voz diciendo mi nombre con una sonrisa, olvidaré aquellas salidas a tomar té y esos besos que no pasaron, olvidaré los sueños y los lugares dónde quise ir contigo, olvidaré los planes, olvidaré la calidez y la suavidad que no me pertenecen. Querido Ranpo, te olvidaré.
Es tiempo que este corazón delator recuerde y regrese a donde pertenece.
Los monstruos no tienen corazón así que puedes, debes destrozarlo. No sientas culpa, por favor.
Querido Ranpo, está es la última carta que te dedico. Cuando me olvide de estos molestos sentimientos las voy a enterrar como si fuesen el cadáver de este amor.
Te amo.
Edgar Allan Poe
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Misión: Recuperar su amor
FanfictionPoe decide seguir con su vida y superar el rechazo de Ranpo. Ranpo descubre que esta profundamente enamorado de Poe y solo tendrá una misión en mente. Misión: Recuperar su amor. Los personajes no son mios, la historia sí.