Apoyo

576 36 17
                                    

(Unas horas después )

El reloj marcaba las horas en la tranquila habitación de huéspedes, donde Max se retorcía en la cama, buscando el elusivo descanso. Sin embargo, sus pensamientos ruidosos e intrusivos se lo impedían. La preocupación y la culpa por el accidente ocurrido hace unos años en la pista lo atormentaban sin piedad, y las imágenes del momentoc en que Charles quedó atrapado en el auto en llamas seguían persiguiéndome.

De repente, una serie de suaves golpes resonaron en la puerta, y la voz de Charles se deslizó con cautela y firmeza a través de la abertura.

-¿Max podrías acompañarme a la sala por favor?-

A pesar de su inquietud, Max sabía que no podía negarse a la solicitud de Charles. Se obligó a sí mismo a levantarse de la cama, sintiendo cómo el dolor en su espalda y cabeza se intensificaban. Max se tambaleó por un momento antes de lograr ponerse de pie. Se estiró y se colocó las chancletas que Charles le había prestado.-Ahorita te alcanzó-

Con pasos vacilantes, Max siguió a Charles por el oscuro pasillo hasta llegar a la sala de estar. El ambiente estaba iluminado solo por la tenue luz de la luna que se filtraba a través de las cortinas. Las sombras danzaban en las paredes, creando una atmósfera sombría y misteriosa que acentuaba la pesadez en el corazón de Max.

En la sala, la presencia de un médico agregó un toque adicional de solemnidad a la situación. Max se sintió como si estuviera entrando en un territorio desconocido y peligroso. La expresión seria del médico aumentó la incertidumbre en la habitación, y Max tuvo un nudo en el estómago mientras se preparaba para enfrentar lo que vendría.

Pascale, preocupada por la palidez de Max y el dolor que había notado en su espalda, no podía ocultar su inquietud. -Máx, por favor, deja que este doctor te examine. No es normal que estés experimentando estos síntomas.-

Max asintió con una mezcla de resignación y agradecimiento. Aunque sabía que aún había un poco de alcohol en su sistema debido a la noche anterior, decidió dejar de lado cualquier preocupación sobre su propia apariencia y salud. Estaba dispuesto a someterse a cualquier examen necesario para descubrir la verdad detrás de su malestar.

El médico comenzó a realizar una serie de pruebas médicas mientras Pascale observaba con ansiedad. Max experimentó una variedad de sensaciones, desde el frío de un estetoscopio en su piel hasta la presión de un tensiómetro en su brazo. La incertidumbre sobre su estado de salud aumentó con cada minuto que pasaba.

A medida que el examen continuaba, el médico parecía cada vez más preocupado. Sus cejas se fruncen y su mirada se volvía más intensa. Max mantenía la calma en la superficie, pero en su interior, la preocupación comenzaba a apoderarse de él. ¿Qué podría estar pasando en su cuerpo que fuera tan preocupante?

Finalmente, el médico se apartó y miró a Max con seriedad. -Max, necesito que te hagan algunas pruebas adicionales. No quiero alarmarte, pero hay ciertos indicadores que me preocupan. Debemos descubrir qué está causando estos síntomas.-

Max asintió, aceptando con determinación el desafío que se le presentaba. Esa noche, la ansiedad lo mantuvo despierto, mientras las preguntas sin respuesta llenaban su mente. ¿Qué podía estar pasando en su cuerpo? ¿Cuál podría ser la causa de sus síntomas?

(A la mañana siguiente)
Al día siguiente, Charles lo llevó al hospital para realizar una serie de exámenes adicionales, incluyendo una radiografía de su espalda. Mientras esperaba los resultados, la incertidumbre pesaba sobre Max como una losa. No sabía si debía prepararse para enfrentar una enfermedad grave o una lesión que podría cambiar su vida aunque ésta ya estaba arruinada pero no le importaba por el sufrimiento que ya le había hecho a Charles en su vida.

Un golpe por la espalda   (Lestappen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora