Celos

393 27 44
                                    

Después de la trágica pérdida de la madre de Charles, Max intentaba levantarle el ánimo, pero sus esfuerzos a menudo caían en vano. A pesar de ello, la relación entre ambos seguía siendo hermosa, siempre uno al lado del otro,  Max regalándole  diferentes cosas a Charles intentando animarlo después de cada sesión de terapia que Charles tomaba con sus hermanos, para procesar todo, aunque específicamente  era mas para acompañar a Arthur que fue quien lo paso peor y que los tres hablaran  sobre como se sentían al respecto. En las tardes, compartían momentos viendo películas o dando paseos, pero al regresar a casa, la mirada melancólica de Charles no pasaba desapercibida para Max, a pesar de los intentos del otro por disimularla .

Por lo que Max una de esas tardes llego con Charles. -¿Qué te parece si vemos esa comedia que tanto te gusta? Seguro te saca una risa.- Pregunto Max tomando la mano de Charles mirándolo a los ojos, ofreciéndole  una cálida sonrisa, al ver que Charles estaba algo apagado. Por lo que Charles asintió débilmente, tratando de darle una sonrisa normal. -Sí, suena bien.- Y Max asintió acariciando la mejilla  de Charles suavemente mirándolo a los ojos, para después  agarrarlo de la mano dirigiéndolos al apartamento de Charles. 

Pasaron unas semanas, y Max observaba a Charles cada vez más absorto en su teléfono, riendo y charlando en su habitación. Aunque le alegraba verlo sonreír de nuevo de la manera especial que lo hacia, no podía evitar sentir un dejo de celos al darse cuenta de que no era él quien provocaba esas risas. Sin embargo, decidía no decir nada, guardando sus propias emociones para no perturbar la alegría  que quien sea que le escribía o con quien hablaba el sentimiento que le causaba a Charles.

Un día, Max decidió sorprenderlos a ambos cocinándoles el almuerzo. Preparando la comida favorita de Charles, sirviendo las distintas  porciones en ambos platos dejando el suyo en la mesa y el otro lo coloco en una bandeja para llevar también la bebida de Charles al mismo tiempo y  se acercó a la habitación de Charles. Max al estar enfrente de la puerta y suspiro para después sonreír  mientras tocaba la puerta. -¡Hey, Charles! Traje algo para que comamos juntos. ¿Puedo entrar?- Espero unos segundos ahi y cuando escucho a Charles hablar supuso que estaba en otra llamada, como lo había echo días anteriores. Hasta que escucho como Charles le grito. -¡Maxie claro que puedes pasar!- Al entrar, Max notó que Charles estaba inmerso en una conversación telefónica.

Max entro y sonrio al ver al Charles. - Ah, no quiero interrumpir. Disfruta tu llamada, y nos vemos luego.- Dijo mientras colocaba las cosas en la mesita que estaba al lado de la cama de Charles, y cuando lo volteo a ver el monegasco solo le sonrió  de regreso y asintió  agradecido. Y en ese momento noto nuevamente Max que Charles tenia ese brillo especial en sus ojos por lo que le trato de sonreírle  mas a Charles pero en el interior se sentía  decepcionado de que no fuera el, por lo que al terminar de colocar las cosas, salió de la habitación  del otro, yendo a comer a la mesa pensativo, pensando como seguir esforzándose por mantener viva la conexión con Charles, aunque las sombras de la incertidumbre y la distancia se mantenían presentes en su corazón. Su deseo más profundo era ver nuevamente la luz en los ojos de su novio, incluso si no era él quien la encendía.

Ya cuando termino de comer se puso a lavar su platos y ollas que uso para después  regresar a su habitación en silencio, consciente de que Charles estaba ocupado. Por lo que se puso a revisar  sus redes sociales, las cuales había reabierto recientemente, aunque por un momento se sintió invadido por una sensación de nostalgia y melancolía, al ver las fotos de cuando era piloto. Sin embargo, el cansancio acumulado lo venció, y se quedó dormido con el teléfono en la mano.

Al día siguiente, Max despertó al escuchar cómo la puerta de su habitación se abría lentamente. Al abrir los ojos lentamente, notó un peso a su lado y, al aclarar la vista, descubrió a Charles sonriéndole. -Que haces despierto tan temprano Mijn liefje- Dijo Max con voz somnolienta, y lo abrazo pegándose a el cerrando los ojos nuevamente. -Bueno Maxie es que nos invitaron a una fiesta hoy en la tarde y quería saber si querías ir. Ademas de que unas personas que ya conoces van a pasar a saludar y asi vamos todos juntos a la fiesta por si te quieres arreglar a salir a saludarlos.- Charles explicó  y que por ello, se levantó temprano para limpiar. Max simplemente asintió adormilado. — Sí, suena bien. Solo dame un minuto —murmuró Max mientras intentaba despertarse por completo.

Un golpe por la espalda   (Lestappen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora