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La larga noche

Sentía como si mi corazón se hubiera hundido en un abismo infinito cuando vi el cuerpo de la persona que más amaba en este mundo en aquel horrible estado, el charco de sangre era grande y él no sabía por cuánto tiempo había estado así

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Sentía como si mi corazón se hubiera hundido en un abismo infinito cuando vi el cuerpo de la persona que más amaba en este mundo en aquel horrible estado, el charco de sangre era grande y él no sabía por cuánto tiempo había estado así. Seguramente habría perdido mucha sangre, pero conociéndola a ella, estaría concentrando todas sus fuerzas en la Técnica de Maldición Inversa. Cuando se acercó a ella, para ver si tenía aún pulso, era muy débil. La tomó en sus brazos y la teletransportó a la Escuela de Jujutsu, exactamente donde sea que estuviera Shoko.

Sería una subestimación la sorpresa que Shoko sintió en aquel momento y el miedo de perder a su antigua compañera de la Escuela. Tras el shock inicial, se puso manos a la obra.

—Espera afuera Satoru.—dijo Shoko.—No te hace bien verla en este estado, no te preocupes, todo va a salir bien. Ella es una mujer fuerte.

Gojo sabiendo que su antigua compañera estaba en lo correcto salió de la habitación y cayó sentado en el suelo. "La única persona que podría haberla tomado tan desprevenida y despreocupada como para clavarle algo en el corazón hubiera sido esa puta maldición que se apoderó del cuerpo de Geto." pensó mientras apretaba sus puños para contener la rabia por la que estaba pasando. Tenía que quedar claro que esto no le pasó nunca a Shinei en su vida, perder el mismo combate con la misma persona era imposible. Poseía años de experiencia desde que era una alumna, ya que entró como Chamán de Grado Especial directamente. Encima no se esperaba que el encuentro fuera tan pronto.
Si él hubiera ido con ella, si tan solo hubiera ido con ella, esto no estaría sucediendo.

Esta situación era resultado de los sentimientos que ella tenía por Suguru Geto, al no haber superado su muerte completamente y él sabía porque no uso sus Ojos Divinos al punto de matar a aquella maldición. Ya que por consecuencia, el cuerpo de Geto sería reducido a polvo también.
Eso era lo que ella menos quería. Pero probablemente tenga que ser la solución. Está claro que con esta maldición no se puede ir jugando.

—Oh, es verdad.—musitó mientras sacaba su teléfono de su bolsillo, marcando el número de Tora. Él debería de saber sobre esto. Unos segundos después le respondió.—Shinei está recibiendo tratamiento de Shoko, la han tomado desprevenida y está inconsciente. Avisa a Keishin también.

Colgó y cerró los ojos, todo se estaba yendo al carajo cuando apareció esa maldición que manipula el cuerpo de su mejor amigo. Esta sensación de que tu mundo se venía abajo, ella lo sintió este mismo día cuando vio a esa maldición por primera vez. La razón por la que ella y Gojo se mantuvieron alejados en malos términos desde hace años, la razón por la que Shinei no pudo superar la muerte de Suguru y la razón por la que no encontraron su cuerpo más tarde seguramente. Todo estaba yendo fatal, este sentimiento de derrota no era algo que experimentara muy a menudo en su vida.

Corrigiendo, nunca había experimentado la derrota a parte de la vez que le pasó con Toji Fushiguro.

Tuvieron que pasar dos largas horas hasta que Shoko terminara de tratar con Shinei, pasé a verla junto con sus dos hermanos. Estaba durmiendo, o en coma, Shoko no lo sabía. Solamente que sobreviviría a ese ataque, ella no podía morir. Sino todos ellos ya estarían más que acabados, el balance de maldiciones y de su energía maldita se quebraría.

—No puedo entender como ella ha sido tan fácilmente herida, como no ha usado la Técnica de Maldición Inversa para curarse. Lo hacía todo el tiempo en el pasado.—comentó Shoko.

—No es que se haya debilitado, será por el hecho de quien la habrá atacado y sus reflejos no lo tenían en su lista de enemigos que tendría que protegerse de.—explicó Gojo.—Era alguien que consideraba como su mejor amigo y nunca pudo superar su muerte. Ella nunca pensó remotamente que tuviera que defenderse de una de las personas en las que más confió en su vida.

Todos en esa habitación sabían perfectamente a quién se refería el Hechicero más poderoso, era inevitable que ese tema volviera a la luz. Y con Shinei tan vulnerable en este momento, sabían que las maldiciones lo aprovecharían sin dudar. Esa noche en la camilla de la enfermería de la Escuela de Jujutsu, Gojo se quedó a su lado. Se rehusaba a irse, no quería dejarla sola.

Los demás suspiraron por el comportamiento del albino pero lo entendieron y se fueron. No es que no se preocuparan por ella, pero ahora tendrían la responsabilidad de informarles a los Altos Mandos de esto y también de cómo van a lidiar con la frágil salud y estado que ha tenido Shinei durante estos últimos meses. Nadie entendía como una hechicera que era una divinidad podría acabar en cama tres veces en tres meses. oY esto no era nada bueno para el Mundo Mágico.

La miraba, estaba en calma y tranquilidad.
"Cómo quisiera que siempre estuviera así de calmada."

|•••|

Cuando se despertó, le dolía el corazón pero literalmente. No entendía como la pudo atacar por la espalda, estaba en guardia y no había nadie más que ella recordara en aquel momento. Ya habían sido dos veces en un mismo día que venía a ver a Shoko. "Qué maldita vergüenza, la hechicera más poderosa no debería ser tan fácilmente derrotada por sus sentimientos." pensó ella. Bueno, técnicamente hablando dos días ahora que veía la hora del reloj colgado en pared frente a ella. La una de madrugada, no se había percatado de su presencia. Era Satoru sentado en una silla a su lado y apoyando la cabeza dormido en su camilla. "Qué mono."

Querría acariciar su cabello pero tampoco quería despertarlo, lucía tan pacifico y ella sabía que él debía de haber pasado por el infierno cuando ella estuvo así.

Te quiero Satoru, prometo que la próxima vez no seré tan benevolente y lo destrozaré sin dudar. Parece ser que no podremos cumplirle esa promesa a Geto, total, nunca le gustaron mucho los funerales.

 Parece ser que no podremos cumplirle esa promesa a Geto, total, nunca le gustaron mucho los funerales

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𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍-gojo satoru ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora