Alfa

Capitulo 4

Al día siguiente amanecí, tranquilo es como si hubiese dormido un año entero, literalmente. Amanecí tranquilo es como si mis problemas se hubiesen ido, aunque me acordé de que tenía trabajo que hacer, hoy empezaría mi plan Primero no generar sospechas.

Me di un baño, me cambié sorprendentemente el Chacal, no solamente me alquilo un
superdepartamento con decoraciones de lujo, sino que también me compró ropa nueva.

— ¡Esto es increíble!, — reí sarcástico. Sin más, primero me coloqué el bóxer color blanco marca kenny, segundo la camisa y tercero los pantalones. Subí la cremallera del mismo, me miré al espejo me veía perfecto increíblemente perfecto.

Baje a preparar el desayuno, prepare unos huevos con pequeñas rodajas de tomate, para tomar un jugo de naranja, ese sería mi desayuno. No quería comer tanto en el primer día que me desempeñaría como Sherlock Holmes, miré mi teléfono sin ningún mensaje ni siquiera de mi abuela. Esa señora seguramente estaría jugando al bingo en el centro de jubilados. Hoy era martes, así que seguramente ella estaría ahí.— Tengo que verla, — pensé.

Camine hasta la puerta, saldría a tomar algo, no tenía muchas cosas que hacer, así que pasearía por el parque.

Al abrir la puerta, a mi Lado izquierdo, pude divisar a una jovencita de cabello color miel
regaba unas pequeñas plantas que estaban sobre unas macetas, está al verse que yo la estaba mirando levantó la vista, en su rostro joven se podía apreciar que tenía una mirada llena de alegría, una alegría que te contagia.

Ella estaba vestida con un overol parecido a los que usaban los jardineros, nada más que era de color rosa pastel. Se veía encantadora.

— Hola — me saludó, con una sonrisa en su cara. Sin más pase por su lado ignorándola primer paso para no llamar su atención.

No pude ver su reacción, pero ya me imaginaba su cara de confusión, la cosa es que si quiero hacer el trabajo bien no debo llamar su atención ni siquiera la de los vecinos. Esto probablemente me llevaría meses, pero trataría de acelerar el trabajo. Salí a la calle, este estaba lleno de personas claramente por qué era un día de semana, camine las diez cuadras que había desde el edificio hasta el centro de la ciudad, allí un pequeño bar, llamo mi atención, algo ilógico porque suelo tomar bebidas de un grado de alcohol considerable.
Sin más entre me senté en una de las sillas de la barra. Cruce mis manos, no quería llamar la atención perfil bajo, así me mantendría todo el día. Qué locura pensar que hace dos meses estaba vendiendo la mercancía del Chacal a un cazarrecompensas, matando a todo aquel que traicionaba a mi jefe, mutilando esos cuerpos de mafioso que se metían con las llenas si… trabajo difícil diría.

Los mafiosos de la ciudad eran cauteloso, antes había varias bandas dominando la ciudad y sus alrededores, sobre todo París, la ciudad de La luz estaba lleno de esos. Era como si en una parte de la ciudad hubiera un manto dónde hay dos caminos uno el bueno y el otro el malo, los Peaky Blinders eran en sus tiempos uno de los mafiosos más respetados desde su muerte Tomás Shelby manejaba toda la zona sur desde Italia hasta que volvió a París aquí se instaló junto con su gente, el Chacal me dijo que su "padre" conoció a ese tipo y que no era tan peligroso como decían, sin embargo, El Lobo tuvo la oportunidad de trabajar junto a él, este le dijo que si quería seguir en este camino la misma mafia lo guiaría a su éxito. La gente no entiende que la mafia es peligrosa, ni siquiera saben lo que es meterse con gente así. La cosa es que nunca, pero nunca debes dejar comprarte por un postor, esos son soldados de la misma mafia que han existido desde los primeros tiempos, siempre lo mismo, ¿No es así?. Mujeres que son utilizadas como prostitutas, alcohol, drogas, sexo, todo eso es lo que ves en este estilo de vida.

Un tipo se acercó a mí preguntando qué iba a beber, le dije que quería un mambo azul con un poco de tequila, este me miró y se rió en mi cara.

— ¿Eres un mafioso o algo así?.